CAPITULO 45: "ADIÓS KAORI"

–Kaori… las medusas no se comunican, no hablan no es necesario por que con su luz es suficiente, por que cada medusa es diferente pero siempre brillan, no por que tengan luz, si no son trasparente y su interior tienes un liquido que es tipo electricidad que es como su defensa ya que es débil y sensible, pero eso hace que brille por su cuenta que se defiende y que por mas hermosa e indefensa que se vea es muy fuerte hasta letal, ¿sabes kaori? ¡Tu de pareces a una medusa! Por que tú llegaste a mi vida, que era un océano calmado, oscuro, turbulento, que necesitó una pequeña medusa que brille pero no tanto, que se sienta tanta ganas protegerla para que no se apagué no muera, pero a la vez por mas que todos pensaban que puedes ser algo malo, yo apreciaba tu  belleza, también sabia que por ratos puedes ser peligrosa y que de puedes defender sola pero que por otros momentos necesitabas de mí, “!Siempre serás mi medusa Kaori!”, ella me mira mientras sonríe y le salen unas lágrimas, esos ojitos están rojitos por que trata de no llorar, yo le agarro su carita con mi dedo pulgar limpio sus lágrimas, la acercó a mi mientras me agacho un poco y le doy un beso en su frente, ella sonríe solo hace eso, salimos de esa área nos vamos a los delfines ella juega un poco con ellos, hasta que al final salimos del acuario ella me agradece por todo.  
–¡sube Kaori! ¡Iremos a otro lugar!, le digo ella sonríe y me hace caso, ella comienza a ver todas las fotos que se saco en su celular y las que nos tomamos junto claro también la que tomo ella, son sonrisa en su rostro es mágico, me da mucho  gustó que yo el que causa esa sonrisa.  
–¡llegamos!, es una cabaña mágica una vez pase por aquí la vi y me promedi venir alguna vez aquí, cuando ella baja junto con migo se queda fascinada pero no tiene cara de asombro solo una sonrisa, caminamos por el camino de flores junto a enanitos y faroles de hadas con luz, también con un letrero que dice “Jardín secreto” hecho de madera, en la entrada había un animalito medio raro pero tierno ella lo acaricia, lo besa, le digo para ingresar al lugar, entramos vemos que hay pinturas mas animalitos raros  tiernos, hay luces los floreros son muy auténticos también las mesas y sillas son de madera, pero creo que ella ya vino aquí su rostro se refleja de nostalgia junto con una sonrisa, ella me agradece toma mi mano y me lleva a una mesa junto a la ventana, nos sentamos viene una niña nos entrega la carta esta hecha de crayones todo con sus dibujos muy tiernos una señora se nos acerca para nuestro pedido, le digo que nos traiga su especialidad ella me mira un poco extrañada, con un poco de asombro, la señoras nos sonríe y se aleja de  nosotros  
–¡Te gusta el lugar Kaori! Le digo con una sonrisa, ella me mira sonríe

–¡Si es muy bonito Isaac!, la señora nos trae la comida una  parrilla pequeña junto con todo las cosas yo preparo todo mientras veo como ella me mira la carne junto con la comida, parece una niña tan tierna, comimos viene nuevamente la señora a limpiar todo nos dice que queremos para postre, yo pido un helado de te verde y ella pide una flor del loto me sorprende que pida esto, la señora nos sonríe regresa después de unos segundos con nuestros pedidos junto con te verde por agradecimiento de nuestra visita, la señora vierte un liquido al capullo de chocolate y este se abre como la misma flor del loto, la sonrisa de Kaori a ver esto no se puede explicar, la señora se retira. 
–¿Kaori sabes sobre la flor del loto? ¿Dónde florecen?, le digo ella lo mira, luego me mira a mí sin entenderme.

 –¡No! ¿Tu si? Me dice con asombro y un poco de intriga  
–¡Kaori…! La flor del loto, crece en lagunas sucias de barro y de malicia, es un capullo hasta que los rayos de sol llegan a ella y esta se hable hasta que el sol se oculté y con ella la flor se vuelva un capullo cerrando toda su belleza. 
–¡Tu de pareces a la flor del loto! Por que eres muy hermosa, pero pocos lo ven y siempre tratas de sonreír preocuparte por otros por encima de ti, de importa mas la felicidad de otro a la tuya… pero siempre hay un rayo de sol alguien que de saca una sonrisa, eres tan linda que tu vida ahorita se encuentra en la suciedad, pero tú lograras florecer con los rayos de sol ¡pequeña kaori! ¡Feliz cumpleaños adelantado! Le digo ella me sonríe y no deja de ver el postre se lo come…

–¡Isaac gracias por todo! ¡Pero mi cumpleaños es la otra semana! ¡Isaac eres un gran chicoo!, pero es bueno que hables tu corazón como lo haces con migo Me dice con una pequeña sonrisa.

–¡lo se! ¡Tu padre me lo dijo! ¡Pero me quise adelantar!, le pago a la señora, ella nos dice para tomarnos una foto juntos como recuerdo del lugar, le hacemos caso ella me sonríe voltea a verme quiere decirme pero le interrumpo con un beso en la frente, la veo Sonreí la señora nos ha tomado la foto no los entrega junto con un papelito y un plumón, ella escribe en el papelito “mi mejor cumpleaños adelantado” “gracias por todo Isaac, gracias por ser mi caballero de armadura” pone una carita feliz yo le quito el plumón agarro la foto a su reverso escribo, ella me entrega la notita le entregamos a la señora para que lo coloqué junto a las otras que son muchas en la pared, agradecemos por todo, pero sin antes que kaori se tomara sus fotos sola, junto conmigo y ella sola, claro las que nos tomamos juntos me las paso a mi celular también como recuerdo dijo ella sonriendo, vamos en silencio a su casa, ella esta durmiendo profundamente, hoy fue un día muy agotador para ella, no dejaba de sonreír y reír, nunca le eh visto tan feliz a mi lado que se sintiera tan cómoda con mi presciencia llegamos a su casa me quito el cinturón veo que sigue durmiendo no la quiero despertar me acerco a ella, veo su carita la paz y tranquilidad que transmite me acerco mas a sus labios poco a poco hasta juntarlos con lo míos, puedo sentir su caliente, suave labio junto al mío, me separo de ella, después de un rato ella se despierta  se disculpa conmigo por quedarse dormida coloca sus dedos en su labio, luego mueve su cabeza como si estuviera pensando el algo. 
–¡gracias por todo Isaac! ¡Gracias por esta tarde! ¡Gracias por mí cumpleaños adelantado! Me dice con una sonrisa y un beso en mi mejilla. 
–¡no es nada!, le digo ella se sale del auto, cierra la puerta.