Capítulo 2. Primer amor

El primer paso era responde el mensaje, ¿Hola? ¿Si soy yo?... ¿Noah? Ah que difícil era hacer algo que con frecuencia hacía, la diferencia ahora constaba en que era su crush a quien tenía que responder, ningún mensaje le convencía, lo eliminaba una y otra vez mientras el móvil indicaba que el chico seguía en línea, vaya problema tenía Afrodita, pues después de 10 largos minutos respondió.  

"Hola, ¿necesitas algo?  

Toda su pelea interna para eso, para responder de la forma más seca posible, ¿y qué tal si la consideraba una grosera?, aunque por fortuna era viernes y no tendría que verlo hasta el lunes, era de verdad una fortuna, pero, a diferencia de lo que su acelerada mente se proponía en pensar el nuevo mensaje de Noah fue tan amable como el otro, lo que, sin mentir, podríamos volver a decir que la emocionó como nunca.  

"Tal vez suene loco, pero ¿Tienes tiempo mañana?"  

Bien, eso no lo esperaba y debía decir que la idea de encontrarse la entusiasmaba mucho, pero, había un problema, al día siguiente tendría una cena con Logan y su abuela. 

“Por supuesto”  

Afirmo ella, pues, no sabía cómo le haría, pero tendría que cambiar esa cena por un desayuno y tener toda la tarde libre. 

Habían quedado en verse en un parque, algo que tenía muy emocionada a Afrodita, quien rápidamente le dijo a su abuela, arreglando todo para que al día siguiente por la tarde estuviera libre. El plan era desayunar con su abuela y después por la tarde encontrarse con Noah, ese hecho le había provocado insomnio, porque era la primera vez que estaría tan cerca del chico, eso había derivado que lo aceptará así de rápido. 

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Como de costumbre, Logan paso por ella y por la abuela Isabella, quien muy contenta había ocupado el asiento de copiloto, a un lado del chofer, dejando de ambos chicos de fueran en la parte de atrás. 

 Logan no podía ocultar su asombro al ver a la rubia con una ropa bastante llamativa, una falda color melocotón y así como un pequeño abrigo casi del mismo color, se veía diferente a lo habitual y eso lo había dejado atónito. 

— Si que te esmeraste... — En el fondo sabía que ese atuendo no era por la comida con él y su abuela, era algo más, algo más importante para ella, pues Afrodita en años jamás había mostrado interés en formar algún tipo de lazo con su persona. 

— Si... — Esa sonrisa y ese tono tan amable y desinteresado no era para nada algo que la describiera, era diferente a la rubia a quien solía molestar, por primera vez en años se veía madura, con un brillo en los ojos extraño y bonito... Porque, aunque no lo quería reconocer debía decir que se veía bastante bonita. 

— Noah Smith... — Dijo en voz baja el chico, mirando por la ventana esperando no ser escuchado y justo así fue, por que la rubia parecía que en ocasiones ni siquiera notaba su existencia. 

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— ¡¿Enserio?! — Grito Afrodita divertida mientras sostenía un pequeño pero grueso álbum de fotografías de la familia de Logan quien con mala cara veía a la rubia. 

— ¡Vaya!, parece que te diviertes... — Dijo él mientras moraba a su abuela con reproche, pues había sido ella quien les había mostrado aquellas vergonzosas imágenes de su infancia. 

La rubia no podía dejar de reír por las curiosas imágenes que veía, desde un Logan pequeño rompiendo el árbol de navidad hasta una fotografía donde al chico le faltaban dos dientes y sonreía sin vergüenza alguna, debía admitir que ese no era el chico que ella recordaba, aquellas imágenes presentaban un pequeño alegre de cabello negro y de sonrisa genuina. 

— Eras diferente... — Dijo ella mientras dirigía su miranda al chico a su lado. 

— Nunca cambié, solo que tú nunca me has conocido... — Llamarse “amigos de la infancia” solo era por decir, por que ciertamente nunca lo habían sido como tal, esa “amistad” si es que así se le podía llamar solo era algo impuesto por sus abuelas, así como su relación. 

— Deberías ver la última — Grito la abuela Sophia desde la cocina, haciendo alarde de una fotografía donde Logan tenía la boca atiborrada de pastel de chocolate, él sabía que esa imagen era la última sí que de un solo salto se levantó de su silla para arrebatarle el álbum, pero Afrodita había sido más rápida y había corrido antes de que él pudiera atraparla. Logan corría rápidamente detrás de la rubia, quien en un descuido cayó al suelo llevándose consigo al pelinegro cayendo encima de ella sin aplastarla, la escena parecía una de esas sacadas de película donde los protagonistas procedían a besarse después de caer de forma tan vergonzosa. 

— ¿Me vas a besar? — Pregunto Logan con sarcasmo en tanto era empujado por una Afrodita bastante sonrojado, algo que el pelinegro pareció no haber notado. 

— Ni en tus sueños — Respondió ella segura, tartamudeando porque su corazón acelerado no le daba para más, ni siquiera para razonar. 

Después de tan bochornosa situación todo paso en calma, pero bajo la atenta mirada de las abuelas, quienes, aunque no habían visto lo que sucedió en el jardín, sabían que algo sucedía, ambos estaban callados, mientras bebían un gran vaso de limonada, en silencio en tanto las abuelas hablaban. 

Al pasar unos minutos el teléfono de Afrodita, era una alarma que indicaba que la hora que tanto había esperado estaba más que cerca, antes de irse de un solo trago se tomó la limonada bajo la atenta mirada del pelinegro, dejando ver que su expresión mostraba una emoción bastante oscura, que nadie acepta cuando los siente, celos, esos odiosos y traicioneros celos, algo que había aumentado cuando ella salió sin ni siquiera despedirse de él. 

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Noah ya llevaba diez minutos esperándola, ella al verlo antes de acercarse a él se arregló el cabello y se aliso la falda, para verse presentable frente al chico que tanto le gustaba.