CAPÍTULO 2

El presente de mi pasado
 

Es sábado, son las 7:00 a.m y hoy tengo el día libre, por lo cual decidí salir a hacer lo que me gusta, leer y escuchar música.

Me baño, cepillo mis dientes, elijo un outfit cómodo, tomó mis cosas y vamos a por un día relajante para mí.

Paso a una de mis cafeterías favoritas y ordeno lo mismo de siempre: un sándwich con una batida de fresa. Término y salgo.Pongo una de mis canciones favoritas para el camino, mientras disfrutó la vista y me dirijo al lago de Ontario. Cuando llego a mi destino busco un árbol a la orilla del lago, para sentarme y comenzar a leer mi libro: Factura al corazón, un libro de comedia romántica, que hasta ahora me ha encantado.

Después de leer por un rato, recuesto mi cabeza contra el tronco del árbol, mirando el hermoso cielo azul de hoy, el aire fresco, el sonido pasivo del agua, tal y como me gusta. Recuerdo la pregunta del día anterior del profesor__si pudieran volver al pasado... Volverían?__ 
En ese momento recuerdo lo divertido que era correr sin parar y asombrarme de todo como una niña al fin.

Dejó mis pensamientos a un lado, cuando me doy cuenta de que el suelo esta temblando, el cielo ha oscurecido y están cayendo rayos y relámpagos.

-¿¡Que esta pasando!?

Comienzo a recoger mis cosas con prisa, para salir corriendo, porque cobarde si soy, no lo puedo negar... Además, quien querría que le cayera un rayo encima? , lo pensaría si flash fuera real, pero como no lo es, ni loca me quedo aquí a esperar la muerte.

No doy ni el primer paso, cuando siento que algo me golpea con fuerza, dejándome inconsciente.

Comienzo a abrir mis ojos, sin saber cuanto tiempo llevó inconsciente.

-Que frío... -Digo con voz temblorosa. ¿Acaso es nieve? Solo existen dos explicaciones, o estoy muerta o las estaciones cambiaron demasiado rápido.

Miro a mi alrededor y el lugar me resulta familiar.

Mi corazón da un salto, al ver que a mi lado hay un chico más o menos de mi edad, y en ese momento me doy cuenta, de que nunca había visto tanta perfección en un mismo cuerpo... Labios carnosos, piel como porcelana, su pelo negro como el carbón y su cuerpo parece esculpido por los mismos dioses.

Me acerco, para verlo mejor y analizar las heridas que tiene, parece que al igual que yo, fue impactado, pero estas comienzan a desaparecer.

-¿Que rayos? - susurro.

No me eh acercado bien, cuando de repente, se despierta, toma mi muñeca y me estrella contra el suelo, dejándome más adolorida de lo que ya estaba.

-No me toques - dice mirándome con esos ojos fríos y azules como el mar, que te penetran hasta el alma, y ahí, ahí se completa la perfección.


 

- Pues para tu información el que esta tocando a alguien aquí eres tú - le digo señalando mi muñeca, la cual suelta bruscamente.

Se levanta del suelo, se sacude y mira a su alrededor.

Este estúpido ni siquiera me ayuda a levantarme... Con que así son los hombres de hoy en día eh... Chicas... Estamos perdidas.

Me pongo de pies y comienzo a buscar mis cosas, pero no están, miro a mi alrededor y me doy cuenta de que ni siquiera estamos en el lago Ontario.

- ¿¡Que!? -grito atónita- ¿Do... Donde estamos? - pregunto confundida

- Que ruidosa eres - responde el chico
- Se supone que tú eres la que debería saber donde estamos... Después de todo tú eres la que vive aquí

- ¿De que hablas? -le pregunto confundida

- Olvídalo - dice rodando los ojos
- Me voy

-¿¡Como que te vas!? ¿A donde?¿ Ahora? ¿Pretendes dejarme aquí sola!?

- ¿Que es esto? ¿Un interrogatorio... ¿Como le llaman ustedes? Eee... Ah ya, ¿un interrogatorio policial? O que? - dice- Además ¿por que debería yo acompañarte? Adiós humana.

No pude ni responder y ya el chico no estaba, no estaba, ¿como rayos es que ya no estaba!? Pero si estaba hablando con el ahora mismo!

Ok esto no es normal, ya había mencionado que soy una cobarde ¿no? Pero creo que si estas hablando con una persona y esa persona desaparece casi frente a tus ojos cualquiera se asustaría. Nosé digo yo...

Comienzo a caminar rápidamente, para alejarme lo más que puedo de este lugar, ¿como es que un día normal y de verano se convierte en un día misterioso y de invierno? Sigo caminando, y pareciera que mis pies conocen el camino a la perfección... Mientras camino, pienso en aquel chico, no puedo creer que haya desaparecido en frente de mis ojos, ¿como es eso posible?

Una voz me saca de mis pensamientos.

-Miaa...

Conozco esa voz...

Me encamino y comienzo a seguir la voz que me llama, cuando llego, una niña pasa corriendo delante de mi hacia la que parece ser su madre.

-Te extrañe mamá-dice la niña tirándose a sus brazos para abrazarla.

-Yo también mi niña hermosa- Responde la madre

-La próxima vez me iré contigo- le dice la pequeña

Este diálogo entre madre eh hija se parece a uno que tuve con mi madre cuando pequeña.

-¿serás toda una empresaria como yo mi amor? - pregunta la madre

-Si-le responde la hija sonriendo

Comienzo a acercarme, para preguntar en donde estoy, pero me quedo tiesa y sin palabras al ver que la mujer, es idéntica a mi madre y que la niña es idéntica a mí, cuando era más pequeña.

Recuerdo perfectamente ese día... 
Mamá regresaba de un viaje de negocios y me llamaba para verme. Pero... ¿ como puede ser esto posible?

¿Que esta pasando? ¿Porque estoy aquí? Esto ni siquiera es Canadá

- Niña tonta-escucho una voz detrás de mi- se llama viaje en el tiempo y estamos aquí porque estabas pensando en tu niñez.

Me doy la vuelta y es el chico de antes,recostado de un arbol-¿eso que tiene que ver? ¡Cosas así no son normales!, El hecho de que este pensando en algo, no significa que me transporte allí- le respondo.

-¿Que es lo que no entiendes?, estamos en el presente de tu pasado... -me dice, como si fuera obvio, haciendo gestos con sus masculinas y perfectas manos.