CAPITULO 18

¿Que me pasa? 
 

Espero unos segundos para recuperar el aliento y habló.

- ¿Que pasa? - pregunto, pero no recibo respuesta alguna. Sigue perplejo, como si hubiera visto un fantasma.

Me levanto de la cama, me acerco e intento acariciar su rostro, pero se aleja, lo que me hace sentir como una completa estúpida.

Nose que decir, ni se que hacer, y todo es más incómodo recalcando que me encuentro en ropa interior.

- Tengo que irme- dice.

Pero antes de que pueda decir algo, estoy vestida y en mi departamento.

- Wou... Tu no estabas ahi- dice Kim.

- Si... Si lo estaba cariño...Mía llegó hace unos minutos... ¿ estas bién? - le dice Diana a Kim, tratando de cubrir el hecho de que halla aparecido de la nada.

- No, no lo estaba...

Obvío su discusión, y me dirijo a mi habitación sin decir palabra alguna.

Quiero matar a ese idiota... ¿ Que rayos paso?

Tomo mi cel para ver la hora, y son más 5:8pm.
Unos segúndos después me entra una llamada de Erick.

- Hola Erick...

- Hola hermosa, ¿podemos vernos?

- Claro, ¿ Donde?

- Te pasaré a buscar en 10 minutos.

- Bien. - digo, y cuelgo.

Ariel

¿Que acaba de pasar? Fue como... Como una visión...

Los dioses formando el Zafiro, adentrando su poder... No estuve ahí en ese momento, así que... ¿Como es posible que esto llegue a mi mente?

Un ruido me saca de mis pensamientos... 
Salgo de la habitación y todo esta en el aire, chasqueo mis dedos para que todo vuelva a la normalidad, pero en vez de eso... Todo se estrella en el suelo, causando un temblor en todo el lugar.

Rayos comienzan a salir de mi cuerpo, y siento como al mismo tiempo voy viajando al futuro y al presente, pero mucho más rápido de lo normal..

Es como si no tuviera control de mis poderes, comienzan a salir fuego de mis manos, que es algo que aún no había utilizado.

Unos minutos después... Mi cuerpo vuelve a la normalidad y vuelvo al tiempo donde estaba. Por lo que decido ir a visitar a mi amigo y averiguar que es lo que esta pasando.

Mía

Ya estoy con Erick, pero no eh dejado de pensar en que pudo haber pasado. 
Todo fue extraño... Sentí un cosquilleo en mi cuerpo, y no se si fue de tanto placer o fue Ariel.

De todas formas, fue extraño, nunca había visto esa expresión en su rostro...

- Te noto pensativa. ¿Pasa algo? - Pregunta Erick.

- No pasa nada. ¿Querias hablar de algo?

- No, solo quería pasar el rato.

- Ahora mismo no estoy en eso ánimos Erick- le digo de manera pacífica.

- Entiendo, entonces vallamos por un helado y luego te llevó devuelta a casa. ¿Bien?.

- Esta bien.

Después de comprar los helados entablados una conversación, que por unos momentos me hace olvidar lo ocurrido.

Después de unos minutos más, decide llevarme a casa nuevamente, ya que el reloj marca las 8: 34, lo que quiere decir que estube con Erick aproximadamente unas 2 horas y medias.

Cuando llegamos al apartamento me despido.

- Te agradezco el helado Erick.

- No hay de que princess. - dice guiñando un ojo.

Y antes que de que pueda salir del auto me detiene.

- Mía.

- ¿Si?

- Si me permites darte un Consejo...- fijo mi mirada, esperando que siga. - Ese tal Ariel... No me da buena espina, parece todo un engreído, y un estúpido, aunque no te conozco hace mucho tiempo, ni a él tampoco, estoy conciente de que mereces algo mejor.

Y no se... Pero en verdad me molesta lo que acaba de decir...

- En primer lugar, tienes razón- Hablo-no me conoces ni tampoco a él, por lo tanto, no tienes el derecho de saber quién me corresponde ni lo que es mejor para mi, y por esa misma razón, al igual que él, yo podría ser una engreída y estúpida, así que, para la próxima, conoce a una persona antes de dar tu opinión, porque, que yo sepa, solo lo viste el día de ayer, y en cualquier caso, no necesito una alarma de peligro, yo puedo cuidarme sola- Sin nada más que decir, me suelto de tu agarre y salgo del auto molesta.

Cuando entró al apartamento, tanto Diana, como Kim y Borís, notan lo molesta que estoy.

- ¿ Que pasa Mía? - pregunta kim.

Diana

Mía comienza a explicar, lo que había pasado, y la razón de por que estaba molesta.

Diciendo lo que había dicho Erick y lo que ella había respondido dando vueltas por toda la Sala, por lo cual nuestros ojos están, como si estuvieran viendo un partido de tenis, mirando de un lado a otro siguiendo la pelota.

De repente, noto algo extraño en Mía, sus ojos son grises, pero se tornan azul.

Me dirijo hacia a ella rápidamente, sin poder creer lo que acabo de ver.

- Mía- digo, mientras me detengo frente a ella para ver detenidamente, fijandome en sus ojos, que extrañamente ahora no son solo grises, sino que también tienen una mezcla de azul.- ¿Que te pasa? - le pregunto.

- ¿Acaso no es obvio?- dice- estoy molesta.

- No hablo de eso... Hablo de tus ojos.

- ¿ De que hablas?

No digo nada, solo la tomo de la muñeca llevándola a su habitación, indicándole que se vea en el espejo.

Cuando lo hace, se nota en su rostro que esta perpleja.

- ¿Que rayos? - Me mira. - ¿Que es esto? - pregunta.

- ¿Me preguntas a mi? - digo apuntándome a mi misma. - Tu eres la que tiene a un dios como novio.

Pero no dice nada, comienza a dar vueltas por toda la habitación, como si estuviera pensando en algo.

- ¿Crees que Ariel te allá hecho algo? 
¿O que sea un efecto secundario de estar con el? - le pregunto.

- No es una pildora o algo que pueda tener efectos secundarios... Esto no tiene sentido.

- ¿Entonces crees que pudo haberte hecho algo?

- Eso tampoco tendría sentido... Es decir... ¿Por que lo haría?

- Bueno, pues quizás no halla sido a propósito...

- ¡Diana! - me llama Kim desde la Sala. - ¿sucede algo? - pregunta.