CAPITULO 32

Mi amado

Un rato después Diana habla.

- Deberías volver... Ariel debe estar preocupado.

- No quiero volver....

- Pero en algún momento tendrás que hacerlo...

- Esta bién- la abrazo,levantándome para desaparecer, pero antes, Diana habla.

- Mía... Falta mucho para eso... Solo disfruta todo el tiempo que puedas con cada uno nosotros... Así no vas a tener ningún arrepentimiento, porque disfrutaste cada momento. No ocupes tu mente con esos pensamientos, antes de tiempo, de ahí viene la para "preocupación" No te Pre-ocupes... Cada Día trae su a afán princesa, y si te afanas hoy, por lo que puede suceder mañana, dejaras pasar todas las cosas buenas que pasen hoy...como estar con tu familia y amigos...porque llegará un momento en el que ya no estarán. - se levanta y me abraza.

- Gracias... - digo, respondiendo su abrazo. - Saludame a Kim. - Y así me teletransporto, pero no había Ariel

Llego a la playa en donde estábamos antes, me siento en la arena y simplemente observo el mar... En cilencio... Sin nada que interrumpa.

De que sirve vivir por la eternidad si no podrás estar con los que amas... Si llegará un momento en lo que solo vivirás con sus recuerdos y los momentos que pasaron... Es cierto... Forma de una familia con Ariel... Pero no se... Aún no puedo aceptarlo.

Divido quedarme un tiempo más, mientras sigo pensando.

Diana.

Y aunque no lo parezca... Me duele verla haci... Tiene razón... En un tiempo solo le quedará Ariel, y la familia que quizás forme con él, pero falta mucho tiempo para eso.

Ariel

- No irás a buscarla Ariel? -pregunta Kiara. Pues todos siguen aquí esperando a que llegue.

-No, ella necesita tiempo, y se lo daré, cuando este lista volverá. No se preocupen, pueden irse.

Y así, uno tras otro, comienza a irse.

Han pasado horas y aún no llega, así que, me quedo a esperarla en el sofá.

Unos 30 minutos después escucho un ruido arriba en la habitación, por lo que supongo que es Mía, por lo que me teletransporto y la veo. Me mira, pero que me mire a los ojos solo me hace un nudo en todo mi ser, esta devastada, y sus ojos... Sus ojos rojos de tanto llorar, me parten el alma.

Se apresura hacia mi y me abraza, comenzando a llorar, haciendo que se me cristalicen los ojos. No puedo evitarlo, siento que soy culpable de todo lo que siente en este momento, y la verdad es que lo soy, si no hubiera llegado a su vida ni siquiera sabría que tenía poderes.

- Perdóname... - es lo único que puedo decir mientras la abrazo fuerte.

- No me abandones... No me dejes. - dice.

- Mi reto es nunca dejarte ir preciosa- digo, mientras tomo su rostro limpiando sus lágrimas, para luego abrazarla otra vez.

Y así nos quedamos por uno rato, sintiendo el calor de nuestros cuerpos, consolandonos mutuamente.

Un rato después nos vamos a la cama.

Mía

- Ariel, Mía... Despierten- dice Kiara apareciendo en nuestra habitación.

- ¿Que pasa? - Pregunta Ariel.

- Zela y Damián están aquí, los demás están peleando, pero Damián tiene la espada Meriad, y puede matarnos a todos.

Al escuchar esto, ambos nos levantamos rápidamente, poniéndonos ropa para salir.

Cuando salimos vemos a todos los demás luchando, y al parecer Zela logró conseguir poder.

Tanto Ariel como yo comenzamos a pelear junto con los demás. Y yo me enfrento a Zela, pero evitando que me toque para que no se fortalezca.

- Parece que te han enseñado bién. - dice, Zela.

- Solo espera y verás.

Y ambos comenzamos a luchar, Ariel se une a mí, mientras los demás siguen con Damián.

- En vez de estar aquí... Pelando conmigo... ¿No deberías estar organizando el funeral de tus padres?

Me detengo en seco.

- ¿Que? ¿D...de que hablas?

- Les hice una visita a tus padres ase un rato... - dice con su estúpida sonrisa.

Doy media vuelta quedando de frente con Ariel.

- Ariel... Hablo.

-Mía- dice abriendo los ojos, saliendo de mí vista. Me doy la vuelta buscándole, cuando lo veo frente a mí... Esta... Esta sangrando, mientras la espada lo atraviesa, y inmediatamente cae al suelo. Cuandos todo se percatan, Kiara, Alex y Jeys, vienen a pelear con Zela.

-¡¡¡Se está desangrando!!!!-Digo ya llorando, mientras lo sostengo en el suelo. 
- ¡Kiara! ¡¡¡Ayudame...!!! Por favor... Por favor no lo dejen morir...

- Es la espada Meriad Mía- dice Kiara con los ojos llenos de lágrimas, con su voz llena de tristeza, aún luchando con zela-No podemos hacer nada.

- Ariel... Mirame... ¡Por favor! -Digo entre sollozos.

- No llores tanto... Me duele... Verte llorar, ve a pelar, para eso te entrenamos... Mata a ese bastardo. - dice.

- Callate estúpido... - y se rie- ¡¡Como puedes reír en un momento así!! Dijiste que no me dejarías... Dijiste que tu reto era no dejarme ir... Por favor... No me dejes... -Digo llorando en su pecho. - ¡¡¡Ariel por favor!!! - y veo como sus ojos se van cerrando- ¡¡¡Ariel!!! - digo moviendolo-¡¡¡ Pacific... !!! Por favor ayudame... No me dejes... Me lo prometiste... No me dejes sola en este mundo... Te lo suplico... - pero nada importa, comienza a desaparecer volviéndose destellos que se van al cielo, tal y como lo dijo. - Ariel...

Se va... Y Zela hace una explosión que deja a todos los que estaban serca de él, queden inconscientes... Menos a mí

Me levanto.

- ¡¡¡Bastardo inútil!!! - haciendo que mis manos se enciendan en llamas, pero siento como algo es inyectado en mi cuello, haciendo que estas se apaguen,volteo y es Damián, trato de teletransportarme, pero no consigo nada, nada funciona... Pero aún así me lanzo hacia él... ¿Que pierdo? Lo único que pude haber tenido el resto de mi vida ya me lo arrebató.

Pero antes de que pueda llegar hasta él, toma la espada que esta en él suelo, y me corta en un brazo con ella. ¿Por que no sólo me mata..?