Venecia
El viaje fue largo, bueno lo que recuerdo del viaje, debo confesar que soy una persona que ¡Ama dormir! Y mi amigo Christian, justamente se le ocurrió salir en la madrugada, cuanto lo amo.
¡Es que no podía esperar! y salíamos en la mañana, y así no interrumpia el sueño de nadie. Pero como todo tiene que ser como él quiere, tenemos que aceptarlo.
_ ¡Llegamos!_ grita Abby que esta manejando.
Por suerte no me toco ir con Christian, ellos van el auto de enfrente y nosotras atrás.
Las rejas se abren, son altas y de color dorado y negro. Las casas no son casas, ni mansiones, son castillos, es como un sueño, todo es hermoso. No son muchas viviendas, pero ocupan mucho espacio.
El auto de los chicos se estaciona frente a una de las casas, muy linda por cierto. Hacemos lo mismo y bajamos del auto.
Pero cuando bajo, siento una corriente eléctrica que me recorre de la cabeza a los pies, cuando me doy cuenta alguien me está tomando de la mano. Es Christian. Me quedo mirándolo sorprendida. Trato de separarme pero su agarre es muy fuerte, pero no me hace daño, levanto mi mirada y lo encuentro mirándome fijamente, entonces dejo de forzar. Giro mi mirada a las chicas y los chicos también le están agarrando de la mano.
¿Qué está pasando acá?
Vuelvo mi mirada al hombre que me esta agarrando de la mano y le pregunto.
_¿Qué está pasando?_ él sonríe.
_ Entremos y te explico_ y así lo hacemos.
Luego de que un hombre de unos ¿40 años? Nos llevará las maletas arriba y entremos los autos a la cochera, nos encontramos en la biblioteca todos reunidos.
_¿Nos van a decir por qué actuaron así allá afuera?_ pregunta Maite con algo de enojo.
_¡Ay! Como si tomarnos de la mano fuera lo peor del mundo _dice Mark fingiendo estar ofendido.
_ Y si nos ponemos a pensar ¡Si! Quien sabe donde metieron sus manos.
_¡MAITE!_ decimos todas al mismo tiempo.
_¿Qué? Yo solo digo la verdad _ finge inocencia.
Cuando Mark iba a responderle Christian lo interrumpe :
_ Bueno no venimos a hablar de donde metimos nuestras manos, venimos a hablar sobre el plan y por qué actuamos así allá afuera_ nos señala a la izquierda donde hay una mesa con sillas alrededor, nos sentamos y ¡maldición! Christian de sentó junto a mi _ actuamos así porque los vecinos nos estaban viendo y recuerden que tenemos que fingir tener todos una relación ¿Está bien?
_¡No!_ gritamos con las chicas.
_No, nos podían dejar elegir al menos con quien queríamos estar_ dice Valentina.
_Valen, esto no es para siempre, es solo una misión y quiero que se comporten, no estamos jugando, así que van a actuar lo mejor que puedan.
Siento una mano en mi rodilla derecha,me sobresalto dando una pequeño grito.
_Venecia ¿Te encuentras bien? _ me pregunta Alice poniendo una mano en mi hombro.
_ Si, si, es solo que _ ¡mierda, mierda no se que decir! _ no es nada.
_¿Segura?_ pregunta Abby.
_Si_ Alice retira su mano de mi hombro.
Luego de unos segundo, levanto mi mirada y me encuentro a Christian quien me está penetrando con la mirada.
_ Pero solo tendremos que fingir fuera de la casa ¿no?
_ No, Ethan, vamos a tener que fingir también dentro de la casa_ la mano de Christian comienza a subir y bajar por mi muslo.
_¿Cómo? ¿Por qué?_ pregunta Valentina.
_ La gente que trabaja en esta casa, no trabaja para nosotros, y según la información que me dieron, la gente del servicio se lleva muy bien con los de las otras mansiones, y no quiero que nos arriesgemos a levantar sospechas ¿Está bien? _ el roce de nuestra piel me quema, y hasta puedo jurar que saltan chispas.
_ ¿Y por que no conseguiste gente que trabaje para nosotros? _ pregunta Alice.
_ Porque por otra parte si nos conviene, así nos volvemos más conocidos y no somos unos completos extraños _ pongo mi mano sobre la suya para que se detenga, se que esta jugando conmigo, pero no sabe que yo también puedo jugar a esto _ pero recuerden _ da vuelta su mano quedando entrelazada con la mía _ la familia Jonas es la principal _trato de safarme de su agarre pero es casi imposible, su agarre es fuerte, pero no me hace daño alguno.
_ ¿Cuantos integrantes son de esa familia? _ pregunta Abby.
_ Son cuatro integrantes; esta el señor Jonas, un hombre de 45 años, luego esta la señora Jonas, 43 años, y sus dos hijos un joven de 20 años y una niña de 5 años...
La charla siguió con información de ellos, debo confesar que a simple vista parecen una familia normal y feliz. Al parecer unos de sus hijos es un rebelde, típico de adolescentes, bueno aunque técnicamente no es adolescente, adolescente soy yo, pero ese chico se comporta como uno.
_ Bien entonces ya que todo terminó, me gustaría ir a descansar _ digo cuando logro safarme del agarre de Christian.
_Yo también_ me sigue Abby
_Y yo _ Valentina levanta su mano al igual que Maite y Alice.
_ ¿Las habitaciones?_ pregunto poniéndome de pie.
Los chicos se miran con complicidad, nosotras nos miramos preocupadas y confundidas.
¿Que está pasando?...
Minutos después...
_¡Los voy a matar! _grita mi amiga mientras les lanza lo primero que encuentra.
_Abby calmate, te van a escuchar_ susurra Ethan esquivando los objetos.
_¿Qué me calme?_ susurra en un tono de voz elevado _¿Cómo quieres que me calme cuando voy a tener que compartir una habitación contigo?_ dice sin cambiar el tono de sus voz.
_¡Ay! Como si fuera tan malo compartir una habitación con este bombón_ señala todo su cuerpo.
_Créeme que sí lo es _ dice segura.
_¿No hay otra manera?_ pregunto a lo que recibo una mirada fulminante de Christian _¿Qué? Yo tampoco quiero compartir una habitación contigo.
_ Chicas sabemos que se mueren por dormir con nosotros _ dice Mark con una sonrisa arrogante.
Y fue después de eso cuando comenzamos a reírnos como locas, maniáticas, hasta me atrevo a decir que enfermas.
¿Pero que se creen?
Ellos nos miraban totalmente enfadados, y algo ofendidos.
Después de varios minutos tratando de detener nuestra risa, nos dimos cuanta de que los chicos estaban recostados contra la pared blanca con sus celulares.
Edward levanta su vista y al vernos nos pregunta:
_¿Terminaron?_ los demás también levantan la vista. Asentimos.
_ Bien _ guardan sus celulares _ ¿No tenían sueño?_ asentimos de nuevo.
_Va ..._ tocan la puerta.
Nos miramos todos atentamente a lo que Christian nos hace una seña para que tomemos asiento.
Luego de eso dice:
_ Adelante _ entran cuatro personas, que supongo son del personal de servicio.
_Buen días, nosotros somos del personal del servicio.
_Buen días _ nos levantamos todos para estrecharles la mano.
_Un gusto_ les digo amablemente.
Cuando terminamos con el saludo ellos comienzas a presentarse.
_Yo soy Celeste _dice una señora de unos 40 años, es bajita, con algo de sobre peso, con el cabello corto y con algo de canas. Llevaba puesto un uniforme rojo y en las orillas blanco_ y ella es Marianela _ señala a una mujer de casi su misma edad, pero más alta y bastante delgada, su cabello negro lo lleva recogido _ Ambas nos encargamos de la limpieza y de lo que ustedes necesiten.
_ Muchas gracias _ respondo.
_ Oliver, su chófer _ dice el mismo hombre que nos ayudo a subir las maletas. Era pelado y vestía un traje.
_ Yo soy Joaquin el chef _ dice un hombre de unos 30 años, moreno y con ojos verdes. Me sonríe mostrando su dentadura perfecta ¡wow!
En eso siento un brazo rodear mi cintura y unos dedos presionar sobre ella. Miro a mi derecha y Christian esta mirando a Joaquin seriamente.
¿A que juega señor Clark?
_ Yo soy Christian Clark, y ella es... _ no lo dejo terminar.
_ Venecia Steel _ digo sonriendole.
_Mi esposa _ Christian preciosa más sus dedos en mi cintura.
Lo miro desafiante, él hace lo mismo. No se cuanto tiempo estuvimos así pero todos ya se presentaron con sus "esposas" correspondientes.
[****]
Pasamos todo el día ordenando nuestras cosas, los chicos lo hicieron rápido y bajaron a la biblioteca a trabajar.
Luego de cenar me dirijo con Christian a "nuestra habutacion"
_ Izquierda a derecha _ me pregunta Christian cerrando la puerta detrás de él.
_ Suelo_ respondo segura dirigiéndome al baño para bañarme.
Después de casi veinte minutos, salgo y me encuentro a Christian recostado en la cama con ambas manos en la parte trasera de su cabeza haciendo resaltar sus trabajados brazos, bajo mi mirada y ¡oh por dios! ¡No lleva camisa!
Sacudo mi cabeza borrando las imágenes que vinieron a mi mente.
_¿Disfrutando la vista?_ sonríe arrogante.
Me sonrojo, pero después de verlo mirándome de la misma manera, que por cierto no le dio nada de vergüenza, mi cara debe de ser lo más parecida a un tomate.
Mi piyama consistía en un pantalón corto blanco y una camisa negra, bastante grande, de los Simpson.
_Nop.
Me dirijo al sofá que se encuentra junto a la ventana que da al jardín.
La habitación es hermosa, tiene paredes color blanco, los muebles son celestes, pero tienen un toque rústico. El sofá es gris, la cama es grande con sábanas blancas con motivos negros, frente a la cama hay un televisor.
Comienzo a sacar algunos almohadones para acostarme cuando siento que alguien toma mis manos, las deja a los costados de mi cuerpo y me dice al oído:
_ Dormirás conmigo, en ese cama...
Editado: 05.07.2020