Ahora que la guerra ya acabó

Capítulo 1: Ramón Alcántara

- Central… No puedo salir hay un E-1 en el perímetro y me impide moverme, afortunadamente aun no me ha visto pero temo que si me muevo me descubra y mi muerte llegue antes de que yo lo quiera.
- Tranquilo Ra, hemos mandado refuerzos deberían estar allí en aproximadamente 10 minutos, mantén la posición y por nada del mundo hagas movimientos que vayas a lamentar, sabes que es imposible vencer a un E.
Vaya forma de iniciar una narración, ¿No? Pues sí, me toco la mala suerte de estar haciendo tonterías en un momento realmente inoportuno y no soy imprudente, ¡Como rayos iba a saber que ese maldito E-1 aparecería frente a mí!; Mi nombre es Ramón y pues es probable que vaya a morir en este momento por lo que si escuchan mis gritos espero al menos me recuerden como un soldado heroico y valiente.
No es mi culpa estar en esta situación… Me mandaron a recolectar información sobre esta área y nadie pensó que aparecería un monstruo clase E por aquí, aunque bueno… Si apenas estábamos reconociendo el lugar quizás debieron haber esperado algo inesperado valga la redundancia. Estoy completamente atascado en esta maldita estructura, parece ser un edificio de hace muchísimos años realmente maltratado, y la escena no me da mucha esperanza, allí afuera hay un jodido monstruo esperando a que salga para convertirme en su desayuno y aquí dentro de este lugar estoy acompañado por decenas de esqueletos que no tengo idea como demonios llegaron aquí…
- ¿Ra?, ¿Sigue con vida? – Dijo una voz femenina por el radio.
- Si, capitana. Aun no me descubre el E-1.
- ¿Puede asomarse y decirme que sucede con el E-1?
A veces hay órdenes que por más que sean de un directivo no me dan ganas de obedecer…
- Mmm, de acuerdo. – Dije mientras por mi cabeza transcurrían innumerables escenas sobre mi muerte sangrienta y realmente dolorosa.
Cuando me asome, aquel pequeño monstruo no se veía por algún lado… Pero no podía cantar victoria esa cosa definitivamente no se había ido, simplemente podía estar oculto en algún sitio y dado su tamaño encontrarlo no sería tan sencillo, me eche al suelo y comencé a moverme lentamente intentando hacer el menor ruido posible mirando todo a mi alrededor, el edificio había quedado detrás mío y delante solo se veía una montaña partida por la mitad y un terreno completamente de arena, quise moverme al edificio que estaba al lado de donde yo estaba, se veía más estable y más alto, si logro entra e irme hasta la cima quizás pueda ver al monstruo con más facilidad.
Mientras me movía, todo estaba en completo silencio y siendo sincero me daba muchísimo miedo, soy un buen soldado y un buen luchador pero he visto desde primera fila lo que un clase D hace con sus presas no quiero ni imaginar a un clase E… Antes solía tener un compañero y pues sí, antes. Murió de una forma horrible al haber entrado de más al territorio de un clase D, lamentablemente no pude hacer algo para ayudarle lo tomo desprevenido y lo hizo trizas, cuando lo vi corrí lo más que pude para ayudarlo pero cuando llegue ya había sido muy tarde, aun a la fecha me lastima su partida pero jure vivir para honrar su memoria así que no importa que suceda no moriré hoy, o al menos eso espero; después de algunos minutos llegue al otro edificio y aquel monstruo no se vio por algún sitio, entre al edificio y subí un piso de los 3 que había y todo aquellos ruidos que no escuche afuera empezaron a escucharse aquí dentro… Esa aberrante criatura estaba dentro del edificio.
- Escuadrón Z, Es probable que no aguante mucho tiempo, estoy en peligro inminente la criatura seguramente me descubrirá pronto… - Dije por el radio con voz baja.
- Estamos cerca, ¡No muera! – Me respondieron, pero pues eso no me dio muchas esperanzas.
Di vuelta atrás y comencé a caminar hacia afuera bajando de nuevo al piso inferior, pero pues la buena suerte en algún momento tiene que acabarse. El peso de la criatura había debilitado las estructuras más débiles del techo y esto hizo que una parte del techo cayera dejando un hueco enorme y pues si por ese hueco se veía perfectamente la criatura, era como un perro aunque más grande su cuerpo carecía completamente de pelo y en cambio tenia esas estúpidas escamas antibalas… Por fortuna parecía ser uno ciego ya que estaba completamente mirándome y a la vez no me veía porque no se movía simplemente intentaba olfatear. No me moví y justo cuando pensé que estaría a salvo esa cosa comenzó a correr hacia las escaleras para bajar, me había detectado; al correr rugía con fuerza y lejos de asustarme me ayudo a calmarme puesto que gracias a eso podía saber su ubicación exacta, sin pensarlo dos veces lance una granada a las escaleras y por un segundo mi suerte volvió conmigo, la granada exploto y le dio por completo al clase E estrellándolo contra la pared contraria y sacándolo del edificio, yo corrí hacia afuera y me dirigí hacia el sur que es donde el campamento Hasex se encuentra, rezaba que mis aliados llegaran antes de que ese clase E recobrara el sentido pues si lo hacía no me sería muy sencillo escapar.
Yo estaba muy cansado y en mi inventario solo tenía dos granadas más, una bengala un cuchillo de diamante reforzado, mi pistola de balas especiales y varias trampas expansivas, mientras pensaba que hacer con mis armas un rugido se escuchó a lo lejos, esa maldita cosa me estaba avisando que ya venía… Coloque rápidamente las dos trampas expansivas y me coloque detrás de ambas, esa cosa venia corriendo hacia mí y con la pistola dispare para dirigirlo hacia las trampas; no por presumir pero entre los Hasex no existe nadie con mejor puntería… Y agradecía que así fuera, no fue muy difícil lograr redirigirlo y cayo por completo en la primera trampa, era una trampa eléctrica pero no le haría mucho daño a lo más, lograría frenarlo por unos segundos, intente dispararle de lo más cerca posible pero aun con las balas especiales no pude hacerle daño, y por si no fuera poco la bala reboto en sus escamas y dio de lleno en la segunda trama haciendo que explotara y dejándome un poco desorientado, la primer trampa no duraría mucho más tiempo entonces con la poca orientación que tenía me acerque al monstruo y le di el golpe más fuerte que pude con mi cuchillo logrando enterrárselo pero como estaba desorientado no le pude dar en un lugar vital y aunque así fuera poco haría… estos monstruos por eso se clasifican como E, una simple herida por más “mortal” que parezca no los asesina… Todos los clase E poseen una estúpida regeneración que aunque es lenta les hace sobrevivir y es por ello que se requiere grupos grandes que le hagan más daño del que pueden soportar, logre recuperar un poco más la orientación y lo primero que pensé fue: “¡10 minutos mis pelotas!”, estos idiotas llevan más de 20 y aun no llegan, me enoje un poco y aprovechando los últimos segundos de la trampa le metí ambas granadas en el hocico a la bestia y corrí lo más que pude para alejarme, ambas granadas explotar destruyéndole por completo el hocico y la onda expansiva me hizo caer, la bestia como han de suponer seguía viva y se abalanzó hacia mí, cayéndome encima e intentando comerme, pero pues su boca estaba completamente destruida… ahora solo era tiempo, o esos idiotas llegaban a salvarme o la boca de esta cosa se reconstruye y me devora, yo intente golpearlo lo más fuerte que pude pero sus escamas eran realmente duras y no podía tomar mi cuchillo, el monstruo se regenero e hizo que este quedara atascado dentro. Poco a poco veía como su boca se reconstruía y la luz al final del túnel se convirtió en esperanza… Los tarados que me habían mentido con sus estúpidos 10 minutos por fin llegaron, se le echaron encima al monstruo y terminaron con su vida y aunque eran más de 7 personas tardaron 20 minutos más en poder exterminarlo. Antes de quedarme dormido por el cansancio extremo de mi cuerpo alcance a escuchar:
- Maldito loco… lograste sobrevivir. – Y me dormí…




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.