CAPÍTULO 4

Así paso un mes, Ian solo se limitaba a darme los buenos días, a evitarme todo el día, y los ratos libres que teníamos los pasaba fuera de la casa mientras yo entrenaba o leía libros, nunca cenábamos juntos… o… siempre estábamos peleando.

Los Akumas ya no se habían presentado más en estas tierras y todos estábamos alertas por si cualquier cosa pasaba, hacía una semana nos habían dicho que habían descubierto varios Akumas muertos poco más lejos de estas tierras pero no sabían quién o que los había asesinado y todo se quedó como un enigma.

En nuestro día 31  iríamos a una excursión fuera de estas tierras a una parte muy profunda del bosque. Al igual que todas las mañanas Ian me esperaba y caminamos en silencio hasta la hoguera…

⸺ Bien muchachos todos saben bien que esta es una de las pruebas más difíciles tanto para ustedes como para nosotros y su familia, esta prueba es de supervivencia en la intemperie además de que necesitamos tener el campamento seguro… en esta prueba deberán confiar en todo lo que han aprendido pero sobretodo en su compañero, será su apoyo para terminar la prueba… sin más… mucha suerte⸺. Nos despidió el Mayor Ladse.

⸺ Bueno Laila, andando⸺. Asentí y comencé a caminar.

Mientras nos íbamos adentrando más en el bosque todo era más hermoso, se escuchaban el cantar de las aves, algunos ruidos extraños pero era tranquilizador estar en este lugar, siempre me había gustado la naturaleza y había aprendido muchas cosas de sobrevivencia durante el tiempo que solo éramos mi familia y yo. Ya habíamos caminado alrededor de cinco horas así que empezamos a buscar un lugar para dormir.

⸺Te recuerda viejos tiempos, ¿no es cierto? ⸺. Dijo Ian volteando a ver hacia los lados.

⸺ Un poco, sí⸺. Conteste sin interés.

En realidad me recordaba aquellas frías noches en los cerros donde buscábamos pequeñas cuevas donde refugiarnos del frio y la intemperie… vimos a muchas personas morir de hambre, sed y de heridas…

⸺ Acamparemos aquí⸺. Bajó su mochila y comenzó a buscar ramas secas.

El lugar era bueno, había dos grandes troncos tirados y los frondosos árboles nos cubrían, bajé mi mochila y empecé a desempacar el sleeping.

⸺Con esto tenemos⸺. Dijo bajando un montón grande de leños y comenzó a preparar la fogata.

⸺Te ayudo con tu sleeping⸺. Desempaque el suyo y lo acomode a unos cinco pasos del mío.

⸺No sé para qué preparaste eso…  no creo que durmamos mucho⸺. Se sentó cerca de la fogata sin mirarme, como siempre.

⸺Lo poco que podamos dormir hay que hacerlo cómodamente ¿no crees? ⸺. Me miró y se encogió de hombros.

Era tan desesperante la actitud que había tomado durante este mes, no sabía que decirle o como tratarlo… quería llevar las cosas en paz pero a él parecía no importarle en absoluto.

⸺Seré la primera en vigilar… tu duerme⸺. Le dije secamente levantándome, si él quería que me portara así con él, lo iba a hacer.

No objetó, simplemente se acostó en su sleeping y se quedó profundamente dormido, por mi parte tome una pequeña daga. Durante la primera hora no había sucedido nada fuera de lo normal, los típicos ruidos del bosque, alrededor de la segunda hora empezaron a escucharse sonidos extraños, no sabría cómo describirlos pero no eran del bosque.

⸺Ian…Ian despierta⸺. Él se despertó de golpe, me tomó del cuello y estrello contra el suelo subiéndose arriba de mí.

⸺ ¿Ian? ⸺. Dije con miedo.

Seguía con los ojos grandes, dilatados...asustados.

⸺Dios… Laila⸺ Quitó sus manos y las puso a un lado de mi cuello⸺ No vuelvas a hacer eso⸺. Se dió cuenta de la situación y se quitó de encima de mí ayudándome a levantar⸺. ¿Estas bien?

⸺Me duele un poco el cuello pero creo que se pasara en un rato⸺. Dije molesta.

⸺Tú tienes la culpa para que me despiertas así en una situación de peligro⸺. ¡No lo podía creer! Me estaba culpando a mí que me estrellara contra el suelo.

⸺Cállate y escucha⸺. Ian iba a decir algo pero…

⸺Mira que tenemos aquí…⸺. dijo un joven muy alto y fornido a otro igual que él.

⸺Qué bonito una parejita… me preguntó ¿Qué andarán haciendo por aquí? ⸺. El otro me miró de pies a cabeza descaradamente, provoco en mi repulsión y asco.

⸺Simón, ella puede divertirnos un poco….⸺.Dijo el primer grandulón.

⸺Concuerdo contigo hermano, a él no lo necesitamos⸺. Señalo a Ian.

Ian rápidamente me tomó de la cintura y me pasó detrás de él de forma protectora dejándome extrañada por su reacción.

Los dos se abalanzaron hacia nosotros, eran muy grandes y de un golpe Ian estaba tendido en el suelo tratando de levantarse, yo no era muy fuerte pero era rápida, así que tomé una de las cuchillas que tenía en la parte de atrás de mi pantalón y quise defenderme con eso, pero ¡Dios! Eran muy fuertes y rápidos no pude hacer ni dos movimientos cuando ya estaba igual que Ian.