LORENA
No pude dormir en casi toda la noche, se me fui muy dificil conciliar el sueño creo que recién al amanecer cai rendida a los brazos de Morfeo. La verdad me siento fatal, triste, agobiaday no sé que hacer, pero me encuentro acorralada por un lado el deseo de ver a mi madre y luchar con ella por su salud y por otro que deba venderme a el tal Ferreti.
Así que decidí ir a verlo y tomar al toro por los cuernos, no perdía nada al contrario ganaba algo. No me interesa su dinero ni su posición, sé trabajar. Me puse un vestido negro hasta la rodilla, unos tacos del mismo color y me aplique muy poco maquillaje solo lo necesario para ocultar mis ojeras.
Al llegar me asombró el imponente edificio, todo los muebles eran de color negro o blanco. Alguien tenía obsesión con esos tonos. La recepcionista fue muy amable al indicarme el piso donde podía encontrar las oficinas de Ferreti. Al llegar a su piso tuve que lidiar con la secretaria que mas que una empleada parecía ser la mujer rechazada y amargada que no dejaria que se acerquen a su amor perdido.
-Buenos dias necesito ver al señor Ferreti
- ¿Tiene cita con él?
- No
-Entonces no podrá pasar, el señor se halla muy ocupado como para atender a personas inesperadas pero si viene por el trabajo de limpieza no es necesario entrevistarse con él puede ir directo a recursos humanos.
- ¿disculpe? creo que me está confundiendo.
- No lo creo, ya le indiqué que él señor está ocupado y la solicitud de empleos es en recursos humanos, claro si tiene alguna preparación.
Esta mujer ya me tenía harta desde que entré me miró de pies a cabeza y ahora trata de humillarme pero no sabe con quien esta hablando
-Lo siento pero entiendo que crea que yo no tenga preparación, pues seguro fue su caso y le costo llegar demasiado a este puesto pues ser una mujer bonita pero tonta no ayuda y dejeme decirle que la entiendo pero todos tenemos derecho a superarnos. Es un gran ejemplo a seguir se lo aseguro.
- ¿qué le pasa? Usted no me falte al respeto.
- Usted empezó a creerse la reina del lugar y dejeme decirle que existe gente más preparada que usted y con más valores.
-Le pido que se retire sino llamaré a seguridad para sacarla.
-Creo que usted no es la dueña de todo esto como para hacerlo
- Soy la secretaria de presidencia y si noto que existe alguien que puede generar disturbios puedo hacerlo.
-Hágalo.
ALEXIS
Estaba tan absorto en este proyecto que pedí que nadie me moleste. De repente empecé a escuchar que alguien hablaba con mi secretaria y lo dejé pasar pero luego se escucharon gritos que perturbaron mi paz , así que decidi salir y ver que pasaba.
-Que demonios pasa aquí
Las dos mujeres que discutían me miraron, no lo podía creer que hacía aqui la hija de Soliz.
-Exigi una explicación
-Señor esta señorita no entiende que usted está muy ocupado y no puede recibirla sin previa cita.
- ¿y por eso debe armar un escándalo?
-Es que la señorita se puso impertinente
- Disculpe el escándalo pero aqui la versión de los hechos está distorsionada. Aquí su empleada si bien es cierto que me indicó sus obligaciones me faltó al respeto indicándome que las vacantes de limpieza se solicitaban en recursos humanos y que quizas me falte preparación.
- Me quede mirando su postura a pesar de que se notaba que estaba enojada no dejaba de ser una dama, no sabía que me había hecho esta mujer que me tenía hipnotizado
¿es cierto lo que la señorita dice?
- señor...
¿es cierto? levante la voz
- Sí señor. pero es que a veces viene mucha gente oportunista y...
- Y usted se tomo atribuciones que no le competian.
- pero la señorita no tenía cita.
-le pregunto siquiera su nombre, lo consultó conmigo.
-No señor , lo siento, solo que usted me dijo que no queria ser molestado
-Ahora decide por mi. Discúlpese ahora.
-Lo siento señorita acepte mis disculpas.
-Adelante señorita Soliz. Y espero que no vuelva a ocurrir otro incidente como este
-No señor y disculpe otra ves señorita.
Y sin decir palabra paso cerca mio dejándome sentir su perfume embriagador.
-Tome asiento señorita Soliz y digame en que le puedo ayudar.
- Primero disculpe usted que vine a verlo sin previa cita. Pero necesito hablar con usted de manera urgente.
- M e sorprende verla pues la última vez dejo claro que no aguantaba mi presencia.
- Mucho no ha cambiado mi opinión respecto a ello
- ¿ entonces que hace aqui? ¿ le falto decirme algo más?
- Entiendo su molestia, sé que me porte grosera cuando lo único que hiso fue ayudarme y le agradezco que lo hiciera y que sobretodo me permitiera que su chofer me lleve a casa sana y salva.
Verla en esa actitud de sumisión hiso que me hirviera la sangre tal parece que es una excelente actriz y no pienso caer en su juego
- Listo ya escuche sus disculpas si eso era todo tengo mucho trabajo.
-Dejeme seguir por favor.
Al verla parecía que por arte de magia su sumisión habia desaparecido y una fiera había despertado.
- Bueno que desea, sea puntual por favor
- Necesito que se case conmigo
¿perdón?
- Sé que mi padre hablo con usted y le ofreció un trato. Hoy vengo a pedirle por favor que acepte.
- Ahora le entiendo. Usted viene porque no acepte las llamadas de su padre ni sus visitas. Son personas muy insistentes. Y es una gran estrategia mandar a su bella hija
- No se a que se refiere.
-Quitemonos las máscaras señorita Soliz ya su padre me indicó el fin que tendría nuestra sociedad y que usted sería así como el premio de consuelo. Que dejeme decirle no está tan mal.
- Mire usted puede opinar lo que desee de mi, no puedo esperar nada más de un patán, ya veo porque mi pádre lo eligio son iguales. Dejeme decirle que lamento haber hecho que pierda su tiempo al recibirme y olvide lo que le dije. Con permiso.