Al ojo de la tertulia

1.

Grabación 001A-Primer encuentro (Runy)

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"- ¡Hola amigos! ¿Cómo me les trata la vida? Aquí estoy con mi mejor amigo ¡Albert! Saluda pedazo de macaco.

- Wayne, si yo soy un pedazo de macaco ¿Qué serias tú? ¿Un mono capuchino?

Sus risas resonaban junto al ruido de autos y personas pasar a la lejanía, debían estar en la calle rumbo a un lugar o su café favorito. Su voz dicta tranquilidad y alegría, cero preocupaciones; un niño entrando en la adolescencia, ese era Wayne antes de ser juzgado por todos.

"- Wayne, ¿Ese no es tú papá?

-¡Rayos! Nos veremos en casa de Hugo en 30 minutos, espérame ahí."

Largos minutos con sonido distorsionado y con pisadas fuertes, la grabación seguía sin intención de parar. Y quizás ese era su fin, que el recordará cada detalle de todo y ahora yo poder saber cada detalle de lo que le atormenta.

Cerré mis ojos tratando de imaginar su rostro, ser adivino de sus pensamientos rotos y confusos. Su respiración agitada da entender la desesperación de querer llegar a donde fuera que corría.

Su garganta debía estar seca y rasposa, ¿Por qué corres? ¿Qué buscas?

Wayne... ¿A quién sigues?

De fondo se escucha una especie de queja de que tenía prohibido el acceso

"- ¡Papá! Prometiste dejar esto ¿Qué rayos tienes en la cabeza? ¡Esto no es lo que mamá quisiera para ti!

- Deja de joder niño ¿Te crees mejor que yo? ¿Más inteligente? O ¿Más perfecto? Mamá nos abandonó. ¿Y tú de dónde crees que comes? Hagas lo que hagas todo es malo y siempre te culparán de algo"

La voz del hombre era pausada y rosca, llena de amargura o tristeza. Alguien despechado por la vida...

"- ¡Aun así no es justo! Regresemos a casa, papá ¿Vender drogas es lo que quieres hacer por el resto de tu vida?"

Una botella rompiéndose, una chica gritar y un sonido seco de golpe, así termina la grabación...

La puerta de la habitación se abrió, y su rechinar me alerto. Ahí estaba él con una sonrisa triste.

- Yo...

- Desde antes, Foster. Yo era juzgado...

- Pero eso no te impidió amar,- Lo observe en silencio remarcando cada detalle de su rostro, un niño que ha domado mi corazón.

- Solo me dio el valor de hacerlo aun más,- se acerca a mi, y con delicadeza me abraza recostando su cabeza en mi hombro,- Y me juzgaron, me juzgan y seguirán haciéndolo... Pero por las personas correctas vale la pena.

★★★

 




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