Capítulo 41: Nuestro hermoso final

Tanto Less como los demás habían estado en la cocina durante un buen rato, todos estaban allí, excepto una, Catriona. Ella había ido a hablar con Blair, tal como las otras le habian aconsejado. Se detuvo en la entrada que daba al patio, donde Blair entrenaba con los demás hombres. Se quedó un momento pensando, sin saber qué hacer ni qué decir ¿debia realmentehacer eso? Tenia tanto miedo, pero recordo las palabras de Less y de las las demás y se armó de valor vara ir a donde estaba él.

- ¿Necesitas algo? -preguntó uno de los hombres.

-Necesito hablar con Blair.

Duncan los miró, sonriendo al darse cuenta de lo que pasaba allí. Les ordenaron a los demás que los dejaran solos, tanto Blair como Catriona se quedaron donde estaban, sin saber qué decir. Blair cogió un trapo para secarse el sudor del cuello mientras la observaba.

-¿Que necesitas? Si es algo que ver con...

-Es sobre nosotros.

Balair se quedo mirando ¿que le iba a decir?

-¿Nosotros? Catriona, no te estoy en...

-¿Qué es lo que no has entendido? -preguntó,con voz temblorosa-. Te estoy intentando confesar mis sentimientos.

-¿Cómo? Cat...

Ella dio un paso hacia él, al ver que estaba a punto de decir algo que quizás no le gustaría oír.

-Lo sé... -dijo, con la voz temblorosa, con miedo a mirarle a los ojos-. Sé que dirás que estoy soñando, que soy solo una criada. Pero yo... -agachó la cabeza algo avergonza. Se sentia tan inutil en ese momento.

-catriona, dejame decirte que...

-Por favor... no digas nada que me lastime -le pidió en voz baja.

Sin esperar más, se giró y salió corriendo, con el corazón roto. Aunque este le pidió detenerse, esta no lo oyo, ni lo que dijo despues.

-Yo también siento lo mismo...

Las demás la vieron entrar con la cabeza agachada, sabian que algo andaba mal. pero se sintieron aliviadas al verla sonreír, como si nada hubiera pasado, mientras les ayudaba a terminar la cena.
La señora Gab le pidió a Less que llevara el pan y luego que se sentara, asegurándole que ellas se encargarían de lo demás. Less quiso negarse, sintiendo que debía seguir ayudando, pero la mujer no la dejó.

-Ve tranquila -le dijo sonriendo-. Nosotras nos ocupamos de lo demás.

En ese momento entro Ian llamándola y Less le dio la cesta de pan para que la ayudará, dejaron el pan en la mesa y ayudo al niño a sentarse.

-¿Y los demás?-preguntó refiriéndose a Blair y Duncan.

-están entrenando, ahora vendrán.

Justo en ese momento, entraron, y por lo que Less pudo oír, Duncan parecía algo molesto con Blair. Sin embargo, ambos dejaron de hablar tan pronto como se sentaron. Less miró a Blair, pero él simplemente evitó su mirada ¿Que pasaba ? Las demás comenzaron a preparar la mesa en silencio. Cuando todo estuvo listo, se sentaron todos, incluidos los abuelos de Blair. Less los miró, sonriendo, realmente estaba muy contenta de tenerlos ahí.

-Bueno, que aproveche -dijo sonriendo.

Less los observó uno a uno, sintiendose tan tranquila. Estaba tan feliz de ver a todos bien y ahi reunidos junto a ella. Pudo disfrutar de la tranquilidad de ese momento, de poder comer en paz con quienes más quería sin sentir miedo alguno a que algo pasara.

Su mirada se cruzó con la de Alec, que la estaba mirando en silencio. Él puso su mano sobre la suya y le sonrió, realmente le agradecia ese bonito gesto, era el mejor hombre que jamás había conocido en si vida

-¿Estás feliz?

-Sí, soy la más feliz.

-Mamá, ¿cuándo se casarán? -preguntó Ian inocentemente mientras comía.

-¿Cómo? ¿Matrimonio? -respondió Less nerviosa.

-Ian ¿quieres que nos casemos?-pregunto Alec sonriendo a su hijo y este simplemente asintió sonriendo.

-¿Qué dices? -preguntó Alec, mirando a Less.

Less se quedó paralizada en su sitio ¿Le estaba pidiendo matrimonio? ¿Ahí mismo? Sacudió la cabeza, sonriendo ¿Qué esperaba? ¿Una propuesta bajo la luna, con champán y un hermoso anillo? No le importaba nada de eso ya que estaba rodeada de las personas que más quería, y eso era más que suficiente.

-Sí, me encantaría ser tu esposa -respondió, sintiendo cómo sus mejillas ardian, estaba muerta de vergüenza.

-¡Felicidades, mi señora! -dijo la señora Gab.

-Serás la mejor novia -dijo Catriona, seguida de las otras, quienes también la felicitaron.

Blair se levantó pidiendo permiso para ir a por más agua a la cocina. Less notó la mirada triste de Catriona y lo siguio para saber lo que pasaba.

-¿Qué pasó entre vosotros dos?‐preguntó
Less.

-¿A qué te refieres? Yo...

-Blair, sabes que te considero... no -hizo una pequeña pausa pesnando en que decir-. Eres como un hermano y te quiero mucho, por eso siempre te desearé siempre lo mejor -dijo, acercándose a él y agarrando sus manos-. Ella te dijo sus sentimientos, ¿verdad?

-Asi es, yo realmente... -Blair maldijo en voz baja-. No sé qué hacer.

-Lo entiendo, no puedo obligarte a que la correspondas. Ella ya encontrará a alguien que la ame, y tú también...—le dijo está.

-¡No! -maldijo alejandose-. ¿Crees que voy a dejar que ame a otro? ¡eso nunca pasará!

Less estaba confundida, sin saber qué pensar. -Pero tú la rechazaste.

-No me dejó ni hablar. Ella simplemente dijo lo que dijo y se marchó ¿Por qué las mujeres sois tan difíciles?—dijo enojado.

-Bueno, no sé. Pero lo que sí entendí es que tú también la amas ¿verdad?.

Blair la miró, pensativo. -Less, ¿crees que funcione?

Less sonrió con confianza. -Claro que sí, ¿por qué no?

-Porque temo no ser un buen esposo para ella.

Less puso su mano sobre su hombro y negó con la cabeza. -No digas tonterías. Eres un buen hombre ¿olvidas que tú le enseñaste a luchar? Juntos serán un gran equipo.

-Sí, tal vez tenagas razón.

-Vamos -dijo, tomándolo de la mano-. Ven conmigo.

-¿Adónde? -preguntó desconcertado.

-¿Pues para que va a ser? Obviamente ayudarte.