Capítulo 17

Alessandro

Después de que Alessia despertará, le dijeron que se tenía que quedar internada por una semana en el hospital, por la avanzada desnutrición que presentaba.

Todo estaba bien, comía lo que le daban, hacía cada cosa que los médicos le decían, se fue rápido la semana, nos fuimos a la casa y ahí todo cambió.

-Alessia... No puedes estar así - No dijo nada, desde que le dieron el alta, se la pasaba en su cuarto sin querer hacer nada, no plática, no come, no sale.

-Alessia, habla conmigo, aquí estoy - Bajo la cabeza y rápidamente se la levanté

-Puedes confiar en mí

-Es algo infantil... Déjame sola

-Quiero saber qué es eso tan infantil que te atormenta

-No me siento a gusto viviendo, no me gusta verme al espejo, porque, aunque aumente de peso sigo siendo un asco.

-Y aquí vamos de nuevo, ¿Qué te dije la última vez, recuerdas lo que te dije?

-Se lo que dijiste, pero sé que es mentira para hacer sentir bien a una persona, sin gracia y horrible como yo.

-Yo no miento

-Claro que sí, a cualquier persona que le diga que me haga suya, me dirá que no, porque mi cuerpo no es aceptado, ya no soy la misma de antes.. Esa Alessia murió

-Cualquier persona que piense eso, es un idiota...

-Un idiota sincero....

-¿Estás tratando de decir que soy un mentiroso?

-Si no lo eres..... Entonces hazme tuya...

-No... Así no...

-Ves, ni tu quieres porque sabes que ya no soy la chica linda de antes

-No, no quiero porque no me gusta que quieras la aceptación de alguien, te deseo desde siempre y me muero por hacerlo, pero lo haré cuando tu quieras estar conmigo porque lo deseas, no para darte mi aceptación, porque eres perfecta...

-Ahora lo deseó...

-Alessia - Me puse serio.

-Al, de verdad, lo deseo

Me acerqué y la tomé de la nuca, atrayéndola a mi boca, fue un beso profundo.

Sin pausas y sin avisos, nos empezamos a desvestir, pero pare un poco, aún en mi cabeza estaba la idea de que ella no estaba preparada para algo así y que estaba mal hacerlo.

Pero otra parte de mí me decía que los dos lo necesitábamos.

-Alessia, siempre fui tierno contigo y comprensivo, pero en lo sexual jamás he sido así, no se si me pueda contener, no quiero lastimarte

-Me importa una mierda como seas, simplemente hazlo

Error, me tuvo que decir que no, que a ella no le gustaba.

No lo empece dos veces, entre en ella de una sola estocada, tan profundo, que me volvió loco en la manera en la que ella me recibió.

-Joder...., eres perfecta- Susurré en su oído

Me estaba volviendo loco, cada que miraba como lo disfrutaba, a cada minuto, me fijaba en sus expresión, para asegurarme de que estuviera bien, pero nunca hizo alguna mueca de dolor, todo en ella refleja lo que estaba sintiendo, "Placer"

Seguimos en diferentes posiciones, susurrándole cosas en su oído... "Dios, esto es el puto cielo", "Eres la más clara encarnación de la perfección', "Haría esto todos los jodidos días de mi vida y jamás me cansaría", "No se que haría sin ti", "Me vuelve loco ver como lo disfrutas y como te mojas cada que te toco o  cada que susurró algo en tu oído, mientras estoy dentro de ti"

En la habitación se escuchaba el eco de nuestras respiraciones irregulares, mezclado con nuestros gemidos, nos corrimos en sintonía, salí de ella y me acosté sobre mi espalda mirando al techo, estiré los brazos para atraerla a mi pecho...

Aún no podíamos controlar nuestras respiración, mi pecho y el de ella, subían y bajaban de una forma violenta, le acaricié el cabello, levantó su cabeza, haciendo que nuestras miradas se encontraran y entonces lo vi, algo estaba muy mal... ella....ella estaba llorando.