Capítulo 15. Si me desea

El ambiente festivo es una maravilla, la música, la comida, la decoración y los invitados, todos están conversando, comiendo y bailando. Los muebles habían sido reacomodados para dar espacio para los dotados bailarines. El bufet de comida está siendo atendido por dos jóvenes que fueron enviados por Federico junto con los alimentos dispuestos.

Johana y sus tres inseparables amigas habían organizado la decoración de la sala y como motivo el Kite Surf, la pasión de Juan Daniel. Siempre que puede va a la playa y navega todo lo que puede en su cometa amarillo, blanco y negro.

Lo mas sorprendente de la noche es la compañía de Javier, es una muchacha bastante delgada, de una piel trigueña hermosa, un cabello a media espalda en un color castaño claro que atrae miradas, pero no solo eso la hace llamativa a la vista de los presentes, su forma de ser y sobre todo la manera en que Javier la mira y hace cualquier cosa que ella pida hace que todos tenga la vista fija en ambos. Cualquiera esperaría que estuviesen pendientes de Juan Daniel o de Jacquie y Federico, pero la joven que ha logrado domar al insaciable mujeriego de Javier, se merece todas las ovaciones esta noche.

La presencia de Federico le ayuda a Jacquie a sentirse un poco más en su ambiente, aunque no es una vieja, tampoco se siente una universitaria revoltosa y con las hormonas alborotadas, aunque esto último se puede rebatir fácilmente.

Lía estuvo despierta una hora más de lo normal, fue muy llamativo para ella ver tantas cosas diferentes en su casa, pero el hábito bien formado y más de una hora en el trampolín, fueron suficientes motivos para noquearla y llevarla a estar entre las muchas almohadas que hay en su cama plácidamente dormida.

Una vez dormida, Jacquie se dedica a conversar con los padres de Juan Daniel y con los amigos de sus hermanos, aquellos con los que muy pocas veces ha compartido, pero de los que tienes referencias muy precisas, pues sus hermanos siempre encuentran temas donde sus amigos son protagonistas.

Después de bailar un rato y tomar unas cuantas bebidas va a darle vueltas a Lía, ella no está acostumbrada a tanta algarabía y podría despertarse, cosa que hasta el momento no ha sucedido.

Federico la acompaña a la habitación de la pequeña y la abraza sonriente, se imagina en una situación similar, pero viviendo juntos. De allí van a la habitación de Jacquie y por primera vez tiene el placer de mirar cada detalle de la misma, la amplia cama en color natural, que es acompañada por dos mesas de noche y un tocador a juego, las grandes puertas que indican que es un armario incrustado en la pared, algunas paredes tiene gigantescos rompecabezas enmarcados con paisajes espectaculares y una mesa donde hay uno de estos bastante grande recién comenzado.

─ ¿Cuantas veces lo has armado? Pregunta mientras se acerca a la mesa de apoyo donde está un despliegue de fichas que para él no tienen ningún sentido.

─ Como tres, más o menos, Lía me ha ayudado un poquito. ─ Sus palabras salen con un gesto de resignación. Años atrás ella podía armar un rompecabezas de mil piezas en una semana y eso la hacía sentirse extremadamente bien. El mismo Volker le había traído varios de Alemania en algunas ocasiones. Una vez Isabela le había regalado uno de diez mil piezas solo como reto y logró armarlo en solo dieciséis días, ese es el más grande de todos y está en la pared detrás de su cama.

─ Algo así me imaginé. ─ Toma una ficha y busca un lugar donde colocarla pero no tiene no idea de donde puede ir. Se queda viendo la ficha como si fuera lo más extraño de este mundo y se la entrega a Jacquie.

─ ¿Cuánto tiempo gastas en uno como este? ─ La mira con la ficha en la mano, buscando el lugar apropiado y ella casi de inmediato la ubica en el lugar apropiado ─ sin ayuda de Lía. ─ Aclara.

─ Invierto, ─ Cambia la palabra, para ella no es un gasto de tiempo, su placer es mas una inversión ─ como unas cinco semanas, sacando una hora diaria o menos, tal vez, ─ Mientras habla, va tomando algunas fichas y las va colocando en el sitio que les corresponde, algunas están agrupadas por colores, lo que muestra que ya le ha invertido algo de tiempo ─ aunque tengo como cuatro meses con este y cuando logro acomodar unas trescientas fichas, Lía me ayuda a comenzar de nuevo. ─ Nuevamente levanta el hombro como ha visto que lo hacen los tres hermanos y hasta la pequeña Lía en algunos momentos.

─ Yo soy pésimo para esto, me desespera, quiero hacer todo en un solo día. ─ trata de acomodar su cabello con los dedos, pero vuelven al lugar de antes. Él la mira concentrada entre las fichas mientras habla, parece que ella está en otro mundo.

─ Para mí es como una terapia, lo hago para relajarme, si veo que me atasco, paro y sigo después. ─ Federico solo la observa, se ve tan tranquila mientras toma otra ficha y la lleva hasta una orilla. Ella realmente disfruta su pasatiempo.

─ Yo no podría con uno tan grande, para mi uno de veinte fichas es suficiente. ─ Acaricia la cintura de Jacquie con pequeños círculos con su dedo pulgar y apoya la otra mano en la esquina de la mesa. Verla en esa posición, semi inclinada lo hace imaginársela así mismo, pero en otras circunstancias donde esos jeans y camisa estarían de más y su cuerpo comienza a reaccionar.

─ No lo puedo creer, encontré una cosa en la que no eres bueno. ─ dice distraída, mientas mira un grupo de fichas que encajan pero no están en el lugar que deberían. Al sentir la mano de él en su cintura Jacquie siente una oleada de calor recorrerla, solo que en este momento no quiere girarse para enfrentarlo y prefiere seguir en su tarea.

─ Por favor, si hay muchas cosas que no se hacer bien. ─ Camina dos pasos hacia el tocador, alejándose de ella, tratando de respirar más calmado a ver si su pantalón de lino gris oscuro vuelve a la forma que normalmente debería tener.

─ Dime tres y retiro lo dicho. ─ Ella se gira apoyando su cadera en la misma mesa y lo observa dándole la espalda, como si buscara algo. Trata de respirar con calma para que él no note que se siente excitada con él allí. Piensa en que ni siquiera se han besado, ¿será que solo ella lo está sintiendo y a él no le interesa ella más allá de la compañía?