Valentina
La mirada de mi amiga recorrió mi cara y su expresión cambio a una de horror, hice una mueca porque ver esa expresión una y otra vez en el hospital fue bastante fastidioso aunque comprensible, supongo, la verdad es que nisiquiera me había visto en un espejo, no quise, las caras de todo el que me veía me decía bastante
- santo cielo, Valentina ¿ Qué te sucedió mujer? Pero mira como tienes la cara, dios, estábamos tan preocupadas por ti ¿ Por que no contestabas el teléfono?
Mi amiga hablaba al mil por hora y estaba haciendo que el dolor de cabeza regresará, iba a contestarle pero hizo algo que me dejo aún más sorprendía de lo que ya estaba
- tú sabías y no me dijiste nada
De entrada pensé que se lo había dicho a Neithan y mi mirada cayó un segundo a él quien pensó lo mismo porque estaba a punto de contestar, pero Alejandra no miraba a mi compañero, no, ella se había girado a hacia mi papá.
La mirada de mi progenitor recayó por pocos segundos en nosotros, miro a mi amiga y se aclaró la garganta
- disculpa jovencita, no tenía idea de lo que había sucedido, cómo te dije, ella no aparecía y no contestaba el celular y le pido de favor que me hable de usted
La voz de mi padre sonó bastante seria, casi rasando lo molesto, eso era más normal aunque no tanto cuando se trataba de otras personas, supongo que el exceso de confianza no es lo suyo, aunque por mucho que no me guste admitirlo, escuchar eso me tranquilizó un poco
- lo siento señor, es sólo que me impacto ver a su hija así
Ale se escuchaba bastante apenada y arrepentida lo cual me calmó por completo, era entendible que reaccionara así después de ver mi cara, mi padre alzó su cabeza con ese aire de superioridad que era natural en el y nos miro a Neithan y a mi por varios segundos, alternando entre los dos
- ¿podrías decirme que fue lo que te sucedió?
La voz se escuchaba tranquila pero preocupado y en alerta para alguien que no lo conocía pero para mí fue una amenaza clara y directa, fue como si me hubiese dicho en clave "me dirás qué es lo que le has dicho" y sin evitarlo y como cada vez que pasaba algo similar, el miedo me invadió por completo y podía jurar que estaba pálida porque al tener a mi amiga de frente vi como frunció su seño, me sentí rígida por un momento, el miedo era algo que no sabía manejar a pesar de que me habia acompañado por años.
Comenzaba a temblar al imaginar la golpiza que mi padre me daría y tratando de adivinar que tanto iba a resistir mi cuerpo cuando sentí una presión en mi mano, baje mi mirada hacia ese lugar y vi que Neithan me había tomado la mano y la apretaba de modo reconfortante, recordándome que ya no estaba sola y que lo tenía a él conmigo y sabía que mi padre no me haría daño con el cerca, no podría quedar mal delante del que aseguraba un crecimiento para lo único que realmente le importa: su empresa
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4/5