Capítulo 7

Amanda.

El mejor día de la semana para muchos. Un día como todos para mí, y lo siento si mi vida es algo monótona, pero para mí los viernes se resumen en lo mismo de siempre, clases la mayor parte del día, tareas por la tarde, cena “familiar” por la noche y descanso, claro que hoy podría decir mi itinerario ha cambiado un poco, ya que por la tarde fui con Mark por un café y conversamos hasta hace poco que me trajo a casa. Y por si alguien se pregunta desde el miércoles en la noche, desde esos besos, no hemos tocado el tema, ni lo hemos repetido, no sé si es lo correcto, sin embargo, prefiero evitar el riesgo de una confirmación o de una negación a nuestra situación y creo que Mark esta igual porque, aunque se ha vuelto más dulce y atento no aborda el tema. ¿Qué espero que pase? Quizá suene hipócrita porque también contribuí a la situación, pero me gustaría que comencemos una relación.

Tengo sus palabras en mente, es cierto que nos estamos reconociendo nuevamente, pero pienso que asumir mis ambiguos sentimientos es mi mayor deseo; seria ver realizada a la adolescente que fui, ver recuperarse a mi pasado corazón roto y de paso mantenerme cerca de una persona que ha tatuado su nombre en mi alma.

Luego de un rato divagando y aunque aún sea temprano decido darme una ducha caliente para relajarme, pero luego de ponerme el pijama el sonido de mi celular me hace dar un respingo, y al ver la pantalla veo que es Lucas《Por cierto no he sabido nada de él en estos días, me tenía desconcertada》

—Hola.

—Hola señorita, como ha estado sin mí estos días—Saluda animado, sin embargo, algo al final de su voz me confunde.

—La verdad algo extrañada, porque te he buscado y me han dicho que has faltado ¿ha sucedido algo? —digo preocupada.

—La verdad sí, pero no me gustaría hablar de eso por teléfono, por eso pensé que podría pasar por ti en unos ¿20 o 30 minutos? —propone y el que me oculte lo que sucedió me da un mal presentimiento.

—Debe ser grave para que quieras verme—Contesto preocupada.

—No tanto, pero prefiero hablar personalmente contigo, además hay alguien que quiere verte (¿Ya llamaste a Amy?) —escucho la voz de Valentina de fondo—Si, ya lo he hecho—le responde— (Y, ¿Vendrá?)

—Iré —respondo desde este lado de la línea.

—De acuerdo, entonces paso por ti en un rato—Acepta Lucas, pero antes de que cuelgue escucho como felicita a Valentina por haberle ayudado a convencerme.

Resignada a salir me arreglo un poco《 lo que 20 minutos me permiten 》antes de bajar a esperar a Lucas, aunque para mi sorpresa cuando salgo él ya está esperando por lo que rodeo su auto y subo antes de que el frio haga efecto en mí.

—Amy—Saluda sonriente apenas cierro la puerta.

—Lucas—Respondo correspondiendo al corto abrazo que me da— ¿Me dirás qué paso? —Cuestiono separándome suavemente para verlo a los ojos.

—Claro, pero primero vamos a casa, porque mamá y la enana quieren verte ¿sí? —Dice y gira levemente la cabeza en lo que parece ser un movimiento inconsciente, sin embargo, me causa ternura ya que su rizado cabello le cubre los ojos al hacerlo, por lo que asiento sin más.

—De acuerdo, vamos entonces—Acepto, sin embargo, me conmueve la pequeña pelea que comienza con su cabello para que este deje de caer en su rostro; y mientras pone en marcha el auto pienso que sin duda tiene el alma de un niño, aunque uno algo gruñón.

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Cuando llegamos a su casa literalmente “me cae una niña encima” porque Valentina apenas me ve corre hacia mí y no me suelta por nada, incluso la tengo que llevar de la mano a todas partes, aunque en realidad no es problema, sin embargo, al llegar a la sala Lucas nos deja solas para ir en busca de Mary.

—¿Te puedo contar un secreto? —pregunta susurrando Valentina.

—Claro, me puedes contar lo que quieras—Acepto con una ceja arriba ante su tonito y expresión—¿Qué sucedió? —Inquiero, a lo que ella me ve dudosa durante un par de segundos antes de continuar.

—Pero no se lo contaras a Lucas ¿Cierto? —Pregunta preocupada.

《Con que por ahí va 》

—No se lo diré—La tranquilizo a lo que asiente pegándose aún más y revisando los alrededores antes de comenzar a hablar.

—Es que él tiene una colección de figuras en miniatura—comienza despacio aparentemente probando terreno— Y las puso en una repisa muy alta con llave—explica y sonríe ante la aparente travesura—Y como no me las ha querido prestar las he tomado yo sola, pero aún no se ha dado cuenta porque son muchas.

— ¿Y qué piensas hacer con ellas? — la cuestiono, imaginando por dónde va la situación.

—Quiero devolverlas, pero no puedo porque mamá le ha prestado la escalera a la vecina de enfrente y yo sola no alcanzo a la repisa—explica, sin embargo, sospecho que algo no cuadra.

—Quieres que te ayude ¿No es cierto? —Pregunto a lo que asiente repetidas veces—Y ¿Cómo se supone que lo haga?

—Te ayudare a entrar en su habitación y tu pondrás las figuras— dice segura y antes de que pueda refutar llega Mary.

—Amanda cariño ¿Cómo estás? —saluda llegando con Lucas a su espalda.

—Bien gracias—digo y veo que Valentina sale corriendo hacia la planta de arriba《 ha empezado su plan supongo 》—¿Y usted?

—Un poco preocupada cariño—Comenta tomando asiento a mi lado.

—Pero ¿Por qué? —cuestione, pero no contesta volteando a ver a Lucas.

—¿No se lo has contado? —Le pregunta a lo que él niega— Valentina ha sufrido un accidente—explica dirigiendo toda su atención hacia mí, sin embargo, la información recibida me desconcierta.

—Pero, la acabo de ver.

—Si, está mejor, ayer salió de la clínica—comenta 《pero ¿Por qué Lucas no me ha dicho nada?》

—¿Qué le sucedió?

—Se cayo de la escalera, aunque aún no sabemos por qué se subió y cómo se resbalo—explica haciéndome comprender el favor que me pidió Valentina《pequeña mentirosa por eso quieres que te ayude a devolver las figuras》pienso.