Almas carmesí

[ Proemio ]

Soy Mel. Y soy un alma.

Anhelo saber algo. ¿Por qué se cree que las almas son inmortales? La mía muere de a poco.

A cada año, cada mes... a cada orden. Muere porque ellos la asesinan; no les vale. Me destrozan y lo saben, siempre lo han notado. Escuchan mis gritos de agonía y los acallan. Los ángeles sienten mis señales y las ignoran.

He tratado de soltarme de las cadenas que me mantienen aquí, en esta prisión de huesos. Pero no importa, he fracasado.

Y cuando lo note, el día en que no escuche ni sienta, ya no existiré más; será muy tarde, estará vacío este cuerpo, esta cárcel, está alma se irá, y finalmente no quedará nada de mí.

¿Mis alas?
Parece que han sido cortadas. Ahora no es más que la pérdida del simbolismo de mi libertad.

Y mis ojos.
Verdosos ante el dolor, ahora permanecen inyectados de sufrimiento, guardando la rabia que lentamente fue depositada en mí hasta debilitarme por completo.

¿Habré merecido todo?

Porque de esa forma, tal como una flor al marchitarse, apagada, tenue, igualmente mi corazón, sin que pudiese evitarlo...

...al final fue corrompido.



#2123 en Fantasía
#1060 en Personajes sobrenaturales
#6531 en Novela romántica

En el texto hay: lucifer, demonio, infierno

Editado: 14.11.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.