Almas Destinadas (la tentación de un gran amor)

CAPITULO UNO: SUEÑOS QUE NO SON SUEÑOS...

—Lo siento pero tienes que entenderlo Eva. Han pasado diez años de que tu madre ya no está.  

—Que no papá. No quiero ni puedo entenderlo.

—Pues lo siento mucho cariño porque quieras o no me casare igual.

 

Marta:

—Evaaa. Despierta mi niña.

Eva:

—Hola Marta, pero que ha pasado? Vaya sacudones que me has dado. Que me has asustado.

Marta:

—Y a mi me han asustado tus gestos chiquilla. Que era eso tan horrible con lo que soñabais?

Eva:

—Nada Marta, solo era una enorme tontería…

Marta:

—Segura Eva?

—Pequeña tu sabes que eres como la hija que no tuve, que puedes contar conmigo siempre!

Eva:
—Ya Marta claro que lo se y yo también te quiero mucho pero quédate tranquila que no hay nada de que preocuparse.

Marta:

—Vaaale, si tu lo dices pues esta bien!

Eva:

—Bueno y que es lo que ha pasado que me estais levantando tan temprano?

Marta;

—Pues la verdad es que no lo se…

—Me ha enviado tu padre.

Eva:

—Mi padre?

—Pero que hace aquí mi padre? No tenia hoy una reunión muy impotante?

Marta:

—Si que la tenia pero al parecer la ha cancelado…

—Me ha dicho que necesita hablar contigo, por la forma en que me lo dijo parece ser muy importante…

Eva:

—Vale, gracias Marta. Ahora mismo me levanto.

Eva no entendia que podía estar sucediendo para que su padre haya cancelado una reunión para hablar con ella. Esto le generaba mucha intriga y al mismo tiempo le asustaba un poco…

Eva bajo las escaleras y se dirigio a la cocina. Alli se encotraba su padre, sentado en la punta de la meza esperándola con el desayuno.

Tal vez algo muy normal para muchos pero no para ella ya que nunca desayunaban juntos debido a que Hector se iba muy temprano al trabajo y Eva se despertaba muy tarde. Por lo tanto no solian compartir algo tan común como el desayuno, excepto cuando alguno de los dos cumplia años.

Esto es algo que confundio aun  mas a Eva porque su padre ya había cumplido años hace meses y el cumpleaños de ella era mañana.

Eva:

—Que pasa papá?

Hector:

—Primero que nada buenos días hija, no?

Eva:

—Vale perdón es que aun sigo muy dormida.

Hector:

—Pues despierta porque tengo algo muy importante que decirte y espero que podáis entenderlo.

Hector sono muy serio al decir eso y la mirada de Eva cambio al instante. ¿Que era eso tan importante que tenia que entender?

Hector:

—Cariño he conocido a una mujer.

—Hace seis meses atrás tuve que viajar a otra ciudad debido a una reunión. Alli fue que conoci a Raquel.

—No te lo he contado antes porque se lo que has sufrido y sufres con la partida de tu madre, pero creo que ya es momento de que lo sepáis.

—Raquel es una gran mujer, es viuda hace ya 3 años. Es realmente una gran compañera para mi. Me hace  sentir bien, me hace sentir muy feliz. Me hace sentir vivo y es por eso que me casare con ella.

 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.