Capítulo 5

<<-Wolf va a recibirnos, ya viene.>> 

-¿Te pasa algo? -Alex había preguntado a Cris cuando vio la expresión de su rostro, mezcla de diversión e incredulidad.

Y después miró a Theo, parecía a punto de vomitar y decidido a mantenerse alejado de Cris y éste último tal vez inconscientemente tenía una mano hacia él. 

-¿Les -se corrigió- pasa algo?

Theo lo miró como si fuera obvio y todo fuera su culpa.

Alex mordió su labio inferior para no sonreír. Sí, había sido extraño cruzar ese portal, su estómago se sintió raro y hubo una pequeña opresión en su pecho, pero nada más. Theo estaba exagerando. 

Pero no alcanzó a decir nada de eso porque un movimiento de Cris le indicó que Darren Wolf se acercaba.

Darren Wolf seguía justo como Alex recordaba, era un hombre alto, guapo, y oscuro. Había algo en su cabello y ojos oscuros, una mirada penetrante y dura, y esa piel acaramelada que atraía inevitablemente.
No era el caso de Alejandro. Si bien, objetivamente hablando, Wolf era guapo, para él no hubo nadie antes que Michael Owl que despertara ese interés, y no habría otro nunca más. 

Justo por eso estaban aquí.

Alex se acercó a él, pero Cris apartó su mano y su mirada de Theo y se le adelantó. -¿Darren Wolf?

-Sí -la mano del multimillonario se detuvo en la reja, su ceño fruncido mientras miraba de Alejandro a Cris, hubo una fugaz mueca que casi parecía de dolor cuando sus ojos se cruzaron con los de Alex.

-De verdad lo siento, Wolf -Alex comenzó a hablar apresuradamente y se acercó a ellos-, perdona la molestia. Pero es de vida o muerte.

Wolf soltó una risita y murmuró algo como "Últimamente todo es de vida o muerte", Alex sintió su propio ceño fruncirse. Wolf parecía casi herido, no había sonado acusador o incrédulo, más bien como si comprendiera la situación y la cercanía a la muerte, pero Alejandro no pudo preguntar porque el hombre ya estaba abriendo la puerta y preguntando a Theo si estaba bien. 

Theo miró a Wolf, se aclaró la garganta y quitó un mechón de su frente mientras decía que sí y volvía a insistir en que era importante y por eso no habían podido esperar.

Wolf asintió y comenzó a caminar, Alex se apresuró tras él, comenzando un parloteo nervioso en cuanto estuvieron en el estudio del hombre: -A Theo ya lo conoces. Y él es Cris, Cris Rey es... Un...amigo. Amigo de mi novio. Es por mi novio que estamos aquí. Michael Owl. Necesito rescatarlo. 

Wolf estaba rebuscando algo entre sus cajones cuando Alex, después de mirar a Cris y ver el asentimiento de éste, mencionó los dos compuestos que necesitaban.
Y entonces Wolf derribó sus esperanzas: -¿Perdón? Yo no puedo darte eso, Alejandro. Lo siento. Es un delito comercializar con eso fuera de la producción en mi empresa.

A Alejandro se le escapó un gemido lastimero. ¡Wolf era su última esperanza! Él no podía perder a Michael para siempre. ¡No podía! 

-¿Por favor? -Alex sentía sus ojos húmedos mientras suplicaba a Wolf, pero no podía evitarlo cuando su corazón se sentía roto y no iba a disculparse por ello o intentar ocultarlo.

-¿Para qué lo necesitas?

-Para salvar a Michael, ya te dije...

Wolf volvió a negar y ofreció conseguir el medicamento que necesitaran, explicando que podía perder su Licencia por darle los compuestos... ¡Él no entendía!

-¡Por favor! -Alejandro se sentía ya a punto de llorar, la desesperación al saber que tenían sólo una hora y el recuerdo del momento en que había perdido a Michael desgarrándolo-. Necesitamos los compuestos, sin mezclarse con otros. No es un medicamento lo que necesito. Son los compuestos. ¡Y no tengo días! Michael no volverá si no lo hacemos hoy...

Y la sola idea de no lograrlo... 

No. No iba a pensar en eso. Michael tenía que volver.

-¿Volver de dónde?
Y esa era la pregunta que Alex temía, ¿cómo explicarlo de modo que le creyera?

Miró a Cris. Michael le había dicho que la existencia de ellos, de los brujos, era un secreto.

-Alejandro -Wolf parecía agotado-, no puedo ayudarte aunque quiera, y menos si no me dices...

Y entonces, ¡al diablo!, ¿por qué guardar el secreto si eso no ayudaba a Michael?

-¡Michael está muerto! 

Alejandro vio la sorpresa en los ojos oscuros de Wolf, pero se recuperó demasiado rápido, diciendo que nada podría regresarlo de la muerte.

Alex casi resopló. Wolf no entendía, él no sabía, no conocía esa parte del mundo en el que él mismo acababa de entrar.

-Tú no entiendes. Sólo eso necesito. Nunca lo diré, nadie sabrá que fuiste tú quien me lo dio. Y cuando Michael regrese, él puede regresarte este favor. Lo que tú quieras...

Eso pareció romper un poco las dudas de Wolf, entonces él preguntó algo que hizo reír a Alejandro: -¿Michael es un... ángel?