DOS

-iQue no lo encuentro zyran! No sé dónde se metio.- Gritaba en teléfono un alterade Owen Bennett a un pobre zyran scott que deberá aguantarse siempre los mismos gritos que pegata su mejor amigo. Lo misma cada vez que el menor de les hermanos desaparecía por x razones.

-Owen, sabes que va a aparecer de nuevo.- Suspira un agotado zyran, después de haber dicho por lo menos unas cien veces la misma frase a su mejor amigo, sin conseguir que el castaño se tranquilizase ni siquiera un poco.- Cuantas veces ha pasado esto eh?

-Esto... Unas cuantas.... Tampoco es para tanto...- confeso Owen en un leve Susurro, a la vez que comenzaba a sentirse un poco avergonzado al recordar que esta escena pasaba prácticamente de seis a siete días de la semana, olvidando por leves segundos que estaba pasando justo en este misma momento.

-Venga Owen. Tranquilo esi? Sabes que debe andar en algún lugar fumando quien sabe que cosa junto con ese grandote amigo suyo.- aclaro zyran tratando de calmar más a su amigo al otro lado de la línea telefónica.

-¿Te refieres a Marcos o algún otro de los tremendos grandotes de los que es "amigo?.- Pregunto con un tono claramente agotado mientras se tiraba sobre el sillon que estaba en su despacho, para asi tratar de relajarse un poco, ya que el otro chico al teléfono no lo dejaba salir de casa para buscar a su hermanito, con la excusa de dale su espacio, aún no pasa un dia completo ¿un día? ¿¡un día!? ¿Que clase de loco espera que pase todo un dia para ir en busca de su hermano inestable mentalmente?.- Zyran... ¿Y si esta vez no vuelve?... ¿Que haré si le pasa algo?... Ya han pasado horas y no se nada de el.- Dije suspirando.

-No te martirices por eso amigo, lo vas a encontrar igual que siempre. Usaras tu don de super hermano mayor para olfatear a esa rarito, así que, levanta ese bello trasero tuyo de ese sillón y ven a abrirme la puerta.- Le dice comensando a tocar el tiembre de la casa de su amigo como un loco desquiciado.- Ya ven, Owen!lji Romeo te está esperando!!!.

-¡Eres un escandalose Zyran Scott!.- Grito owen riendo levemente mientras se levantaba con rapidez para ir corriendo hasta la puerta de la entrada y abrirla, dejando ver a un sonriente zyran sosteniendo con uno de sus brazos los hombros de davian en un leve abrazo, mientras este mira el suelo con una cara un poco apenada por haber dejado a su hermano histérico todo el tiempo que desapareció.

-Un davian a domicilio. Ahora me debes una rica cena, preparada con tus lindas manitos.- Sentencio con una sonrisa zyran, a la vez que le daba un leve empujón al menor para que entrara en la gigantesca casa, lo cual hizo pasar rápidamente por el lado de un impresionado owen, ya que nose sentia preparado para la "charla" y la cara de decepción que le daría su hermano mayor.- No me gusta que te alteres, tu bella cara con estrés hace que me preocupe... Ya esta en casa, sano y salvo. ¿Ya todo está bien?.- Zyran comento acariciando la mejilla de owen.

-No me dejabas salir a buscarlo porque lo estabas buscando tu...- Sonrie acercándose a él un poco más para poder abrazarlo fuertemente.- Gracias, Zyran..... Muchisimas gracias....

-No viene tan drogado, pero tampoco esperas un noventa por ciento de lucidez en su cerebra.- comento zyran junto con un suspiro mientras entraba en la casa abrazando fuertemate al mayor, aprovechando el momento que cada vez se hacía más escaso ente los dos.- Lo encontré en el parque que está como a media hora de aqui.- Aclaró sintiendose apenado cuando el mayor lo dejo de abrazar para ir corriendo tras su hermano menor y poder verificar su estado actual.

Horas antes, cuando Davian se fue de la casa

-No estoy loco..... Estoy bien... No me pasa nada malo.- Murmuraba Davian tranquilamente mientras caminaba lentamente por la calle, sin rumbo alguno, pateando piedras y fumando hierta para tratar de irse de este mundo, para tratar de olvidarse de lo que pasa a su alrededor y no pensar en nada que lo pusiera de malas. Después de mucho tiempo caminando lejos de su casa, que en realidad no era tan asi y sin dejar de repetir las palabras que se habían convertido en su credo, encontró un pequeño parque que gracias a las drogas, lo veía como todo un paraíso, estaba tan perdido, que viendo como es que habían unos lindos pajaritos sobre un arbol seco, se sento bajo este arbol, comodamente a pensar en todo y nada a la vez, sintiendose libre aunque sea por solo unos minutos.

-¿Será que si estoy loco?...- Se pregunto a si mismo al ver como es que se escondía lentamente el sol, notando recién que llevaba horas ahi, horas en las que su mente trabaja en imagenes borrosas para él, imágenes que parecían torbellinos frente a el.

Luna mujer bien vestida.

una chica baja y tiema

Eu hermano mayor

un hombre gritando

Muchas chicas con caras catrañas.

Riendo levemente, se comenzó a abrazar las piernas mientras negaba una y otra vez con la cabeza, manteniendose sentado bajo el "bello" arbol, que en realidad, si se veía sin los efectos de la droga, con suerte tenía unas cuantas hojas.

-¿Quieres matar a tu hermano de un susto?.- Al escuchar la leve y calmada voz a su izquierda, Davian alzó levemente la cabeza para poder ver una figura alta y de cabello castaño anaranjado que se le acerca a paso lento para sentarse a su lado. Para ser sinceros, davian no estaba seguro si este zyran Scott era real o solo un producto más de su estropeada mente, pero aún así, no se contuvo de hablarle..