Federico quedo gratamente impresionado con lo bien que se sentía al hablar con independencia, sin temor a ser juzgado o discriminado. Su flamante esposa era una muchacha sabia, de pocas palabras, con un semblante afable, fresco y divertido. El Emperador creía que podía leer sus expresiones como si fuese un libro abierto, eso le gustaba y por primera vez en mucho tiempo tenia la libertad de ver el futuro con esperanza.
La noche los sorprendió hablando de la naturaleza, de lo distinto y parecidos que eran sus mundos y vislumbro la perspectiva de que Amanda se quedaría para siempre. Esa sensación lo reconfortaba y le daba ilusión porque, después de todo, merecía ser feliz. Busco en la cocina un poco de queso, vino y frutas para preparar un refrigerio ligero. No solía cenar, en realidad era un hombre de poco comer, y le hubiera agradado agasajarla con un gran banquete pero Amanda estaba contenta con tan poco. Se veía muy sensual usando su camisa, descalza sobre el piso de madera, mordisqueando un trozo de queso mientras jugueteaba con el borde de la copa de vino. Federico experimento la felicidad de ser el mismo mientras observaba los sutiles ademanes de la mujer que lo había hechizado con tan solo una mirada.
_Me hubiera gustado ofrecerte algo mas pero no esperaba visitantes le dijo mientras rozaba la punta de sus dedos.
_No te preocupes, estuvo más que bien._ Le respondió con una sonrisa.
_ ¿No se preocuparan por nosotros? Digo, porque evidentemente este no era nuestro destino y tal vez nos estén buscando.
_No, ya le dije al chofer que nos quedaríamos aquí. Con esas heridas no sería una buena imagen para el personal del palacio, mas aun siendo tan reciente la boda. Maximiliano y Ryon se harán cargo de todo, ya saben lo que deben hacer, no es la primera vez que sucede. El único problema es que son personalidades opuestas, no coinciden en nada y si no fuera por mí…Espero que encuentren una pareja que los cuide y los entienda…y que se comporten como adultos, porque esos dos juntos son un desastre.
_Parece ser que los queres mucho.
_Si, por supuesto. Nos apoyamos mutuamente y formamos un buen equipo juntos. Maximiliano es un guerrero excepcional, no existe otro como él. Es valiente, intrépido, arriesgado aunque un tanto irresponsable a veces. Iría a cualquier batalla con los ojos cerrados porque sé que me protegería de la misma manera en que yo lo haría. Ryon es más correcto, aunque es un libertino, mujeriego como ninguno. Pero es muy hábil en lo suyo, muy diplomático, con una astucia brutal para los negocios, cosa que yo no tengo. ¿Te gusta este lugar?
_Si, por supuesto
_ Es tranquilo, no hay protocolos ni encuentros inesperados. Me parecía que te ibas a sentir más cómoda, como en tu casa, porque por lo que me contaste llevabas una vida bastante sencilla. No es que te considere una persona simple, sino que a mí también me gusta ser yo sin tener que aparentar, cumplir formalismos o normas de etiqueta. De todas formas se supone que esta es nuestra luna de miel y queremos estar solos.
Amanda se tenso por unos instantes, sorprendida por el último comentario, por lo que rápidamente Federico agrego:
_Con eso no quiero decir que voy a pedirte que…no, de ninguna manera. Yo jamás ejercería mis derechos conyugales sin tu consentimiento, eso está descartado. Lo que pretendo decir es que ellos creen que estamos…bueno…
_Te entiendo_ dijo Amanda aliviada_ No aclares más que oscurece. Me parece que han sido demasiadas cosas por un solo día: una boda, un esposo, una desilusión, mi padre, un susto, mis heridas, tu heroísmo. Creo que mejor me voy a descansar.
_Si, por supuesto. Vos te quedas en mi dormitorio y yo aquí_ le dijo tocando el respaldo del sofá_ Es muy cómodo y la verdad, no tengo sueño. Probablemente esté afuera, pensando y descansando porque, aunque no lo parezca, para mí también fue un día de sobresaltos. Un poco de aire fresco y tranquilidad me vendrá bien.
_En ese caso, buenas noches y muchas gracias por tu paciencia. No te preocupes, ya aprendí que no me conviene andar sola por ahí, en un mundo que no conozco. Lo que quisiera saber es como llegamos mi padre y yo aquí, porque recuerdo una nave, un viaje confuso y nada más. ¿Tenes alguna idea de eso?
_La verdad que no. Yo de eso no sé nada en absoluto y permitime decirte que tampoco creo que sea muy conveniente que regreses a un lugar en el que no sabes lo que te espera. No dejaron clavos sueltos, por lo que se debieron asegurar de que permanecerías junto a mí, en Faryas. Tu padre y mi madre habrán urdido un plan meticuloso y eso de viajar de dimensión en dimensión no es como subirte a un carruaje y alejarte de un pueblo. Eso es asunto de brujas, de personas que saben cómo fluye la energía en el universo, de aquellos que están al tanto la ubicación de portales y esas cosas. Sumado a esto, ya lo sabes por la experiencia de mis tíos, podes ir al lugar incorrecto y las consecuencias resultarían catastróficas. ¿Tan malo soy para que quieras irte? ¿Pensé que te estaba gustando mi compañía?
_No…no era eso lo que quería decir. Solo me preguntaba como hicieron para traerme porque no recuerdo nada. Extraño a mis amigos, la escuela, los profesores…yo poseía planes. Iba a ser maestra, educar a los niños, iba a tener la posibilidad de elegir, de equivocarme y nos robaron eso, a vos y a mí. Además, esto es lindo pero me siento un tanto perdida sin automóviles, electricidad, tecnología: para mí es un viaje en el tiempo.
_Nosotros tenemos otras formas de conseguir energía que ya te las voy a mostrar. Respecto a los vehículos, ya conocemos las consecuencias del uso del petróleo, la contaminación por plásticos, la basura tecnológica…no vivimos en una burbuja. Optamos por una vida más sustentable, más limpia, al menos aquí en Faryas. En cuanto a las posibilidades de elegir, yo no tengo muchas. Yo ya naci con esta responsabilidad y poco se de la libertad de la que vos hablas. Desde pequeño me educaron para ser regente y no conozco otra vida excepto esta. Este es mi lugar en el mundo porque lo construí con mis propias manos, elegí cada tronco, lo diseñe y también soñé tener algún día alguien con quien compartirlo. De vez en cuando me escapo, cuando creo que voy a colapsar, cuando mis instintos me pueden y las ansias de…_Federico se detuvo, temeroso de hablar más de la cuenta.
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Editado: 02.06.2025