Capítulo Cuarenta y ocho

Tres meses después

Porque no hay plazo que no se cumpla ni deuda que no se pague, así dice el refrán. Y hoy ha llegado el libro de compartir mi nuevo libro con mis seguidores.

Después de tanto tiempo y de todo lo que ha pasado, es increíble que este día haya llegado. Lucy se quedó con Logan y Brian, porque yo tenía que adelantarme y llegar con los chicos de la editorial. Claire como siempre, ha sido fantástica en su trabajo.

Se ha conseguido el Raleigh Memorial Auditorium para la ocasión y se lo agradezco ya que, por resguardo he preferido no viajar a Nueva York, donde siempre hacemos mis lanzamientos. Mi embarazo ya está más avanzado y el vientre se me hace enorme y eso que aún no llego a la etapa final.

Las emociones están a flor de piel y se siente fantástico este reencuentro con mis lectores. Hay de todas las edades, adultos, jóvenes e incluso algunos niños acompañando a sus familias. Por mi parte, me acompaña toda la familia, Logan y los niños, Kendra y sus padres, además de Pam y los suyos.

Aún recuerdo cuando le hice llegar la invitación del lanzamiento a Annette, dijo que por nada del mundo se lo perdería. Ya que verificó que si había adquirido un par de mis novelas y que estaría encantada de comprar mi libro nuevo. Le prometí que no se iría de aquí sin una firma en mi libro y que los otros, podía ir a su casa a firmarlos cuando quisiera.

Se siente fantástico estar con todos aquí. El último lanzamiento que tuve solo fue con Pam, Max y las niñas acompañándome. Hoy me siento agradecida por todo lo bueno que me rodea.

―Esto se ve hermoso, Claire. Como siempre has hecho un gran trabajo.

―Es mi trabajo. Me debo preocupar hasta por el más mínimo detalle y debo confesar que el que me hayas pedido hacer el lanzamiento aquí fue un gran acierto. Este teatro es perfecto.

―Lo sé. Y yo agradezco que hayas aceptado. Estos bebés me tienen con demasiado cansancio y dudo que hubiera podido hacer un vuelo de larga distancia.

―Bueno, no es tanta, pero te comprendo. No debe ser fácil estar embarazada con dos bebés. ―Niego con la cabeza.

―La verdad ni yo sé cómo lo logro. Así que solo me queda por aguantar lo que me queda y disfrutar de mis pequeños.

―Lo mejor de todo es que pudiste terminar el libro con buen tiempo y así podemos hacerlo antes de que nazcan. No imagino cómo lo hubiéramos hecho si tocaba hacerlo después.

―Sí, es verdad. Tampoco lo visualizo.

―Ven, vamos, que ya casi es hora.

Vamos hacia el sector del escenario y miro por todos lados, pero no logro ver a mi gente, me pregunto dónde estarán. Me llega un mensaje de texto al teléfono, indicando que están llegando. Suspiro de alivio, no hubiese querido que se lo pierdan. Les tengo asientos reservados en primera fila.

―Ya regreso. ―le digo a Claire―. Mi familia ya está aquí.

―De acuerdo, pero no tardes. ―pide yendo con el resto del equipo.

En la entrada los recibo y llevo conmigo hacia el interior.

―Siéntense por aquí. En unos minutos comienza.

―Suerte, cariño. ¡Eres la mejor! ―Logan me besa para darme ánimos y los niños me dan un abrazo. Se acomodan y me quedo tranquila, porque fin ya están aquí. Les tiro un beso a todos y me retiro hacia el escenario.

―Querido público. ―comienza a hablar Claire―. Es para nosotros, un honor y un privilegio poder contar con su presencia el día de hoy. Sabemos que han venido de todas partes del país para acompañarnos a nosotros y a nuestra estrella de hoy, nuestra querida Lauren Collins, que lanza su más reciente trabajo “Amanecer de otoño”, que puedo adelantarles es como ninguna otra historia que hayan leído antes.

»Quizás se pregunten por qué esta vez hicimos el lanzamiento en la ciudad natal de nuestra Lauren. ¿Razones? Hay dos, la segunda es porque tanto Lauren como nosotros como editorial tenemos nuestro hogar aquí y la razón principal… porque no dejamos que ella misma se las cuente. Lauren, ven aquí.

Camino hacia el escenario, y la ovación que recibo es maravillosa, noto muchas caras conocidas que me acompañan en cada lanzamiento y a otras nuevas, les saludo extendiendo mi brazo y agitándolo para que todos me vean. No puedo creer que se hayan vendido todas las entradas, los asientos están con su capacidad completa e incluso hay muchos que han quedado de pie. Varios me apuntan y sé que están hablando de mi embarazo y no me molesta que lo hagan, ya es parte de mi vida de escritora, que mis seguidores hablen de mí y aunque quiera no puedo negarlo ni esconderlo, estoy feliz con esta nueva etapa en mi vida y quiero que lo sepan.

―Hola a todos. ¿Cómo están? ―hablo apenas llego al micrófono―. Gracias a todos por venir. Es una ocasión muy especial para mí. Como ven, tengo doble motivo para estar feliz el día de hoy. ―Sonrío tocando mi barriga―. Antes de hablarles de mí, quiero agradecerles nuevamente por estar aquí conmigo. La novela por la que estamos hoy reunidos es muy especial para mí ya que no es solo una historia romántica. Tiene vamos matices, en ella encontrarán drama, humor, penas y alegrías, renacimientos, en fin, encontrarán muchas emociones escondidas en estas páginas.