Los días pasan y me siento ansiosa, desde la última visita a Flor estoy pensando y pensando que hacer con mi vida. Esperando una señal del cielo que me anime a hacer algo decisivo. Trabajando y acompañando a los chicos llevo mis días. Por fin es viernes y mi jornada laboral termina. Hoy tengo ganas de salir a comer afuera, voy a ver si invito a mama así sale un rato de casa y se despeja de llevar y traer a los niños.
Mientras le escribo en el teléfono para ver si quiere salir y que consiga una niñera suena, el teléfono de la editorial.
Más tarde llego a casa para bañarme y ver que me pongo. Luciano ya me mando un mensaje con la dirección del restaurante, quería pasarme a buscar pero le dije que nos veíamos allí.
Entro a la cocina y veo a mama sentada leyendo un libro con su café de la tarde. Me arrimo y le doy un beso en la frente, me sirvo un café y me siento a su lado.
Como adoro a esta mujer, nunca me juzga por las cosas que hago ni por mis acciones. Incluso cuando me iba a casar a la edad de 21 años, creí que le iba a dar un ataque de ira y que me iba a reclamar que era muy joven. Siempre acepto mis decisiones.
Subo a ver a mis pequeños antes de ducharme, los veo haciendo tarea. Los lleno de besos y abrazos, le reviso sus cuadernos y les digo que voy a salir a comer con un colega, ya que no tienen que saber que es un hombre para que no haya ideas erróneas. Vuelvo a besarlos y me adentro al baño.
Me visto informal, un pantalón de gabardina negro y una camisa celeste mangas hasta el codo, y me llevo una campera negra por si refresca. Estoy bastante nerviosa, no había salido con otro hombre a solas en mucho tiempo. No soy tan grande pero han pasado años desde la última vez.
Llego a un pequeño establecimiento cerca del centro, a pocas cuadras esta la editorial conozco los alrededores. Es de color marrón con ventanales grandes y cortinas blancas atadas a los extremos de la ventana, veo en el cartel su nombre “Lenny’s”. Una vez adentro lo veo que esta cerca de la recepción con una campera de cuero y una gorra con una A mayúscula, de alguna banda supongo. Al verme llegar se levanta y me da un calido beso en la mejilla.
Va fluyendo bastante bien, me cuenta que su productora va bastante bien, tiene alquilado su estudio por todo el año, por lo poco que puedo observar es que en serio no es agrandado solo es de sonrisas reducidas. Aunque asumo que conmigo ha sonreído varias veces en los tres encuentros que hemos tenido, no se si porque soy muy chistosa que lo hago reir o por algo mas.