AHMED
—o sea que es lo mismo que hizo su padre —todos nos miramos mientras estamos en la parte subterránea de la biblioteca, el frio y el silencio comenzó a entrar bajo mis dedos sobre la mesa.
—no, este es más… especifico—sigo mirando el pergamino sobre la mesa de madera, con una mano acariciando mi cristal sobre mi cuello, necesito leer estas palabras ya que todos saben leerlas, pero unos símbolos en ella me hicieron en primer lugar buscar mi grimorio.
En ella está escrito referencias de unas cuantas de mis vidas pasadas, y recuerdo exactamente esta, puedo ir en cualquier punto del tiempo y no solo observar; en una esquina del pergamino hay un mensaje, es un idioma similar al inglés, pero sus palabras están tan cruzadas como alguien con TDAH.
—¿Qué tanto? —pregunto de brazos cruzados Elliot del otro lado de la mesa frente a mí.
—le está mandando un mensaje a ella desde aquí —hablo Damián intentando explicar lo que implicaba este nuevo plan.
—¿a quién? —cuestiono Leire sentada sobre la mesa inclinada para mirar el pergamino.
—a mi… —ellos se veían confundidos, pero Lou fue la que suspiro pesadamente.
—solo quiero saber ¿tenemos que preocuparnos por que nos noten? —ella señalo hacia arriba con su dedo índice.
—no, este portal requiere discreción por lo que solo dos irán allí y no será hoy —Damián sentencio con una mano apoyada sobre la mesa mirando a todos con cautela como si alguno lo fuéramos a desobedecer.
—necesitamos preparar a esas dos personas para el viaje —Elliot dejo la mesa y comenzó a buscar entre los pergaminos.
—obviamente tengo que ir—afirme suspirando y subiendo las mangas de mi suéter hasta mis codos.
—yo iré, después de todo, es mejor mantener perfil bajo —todos levantamos la mirada para ver a Leire
¿ella de voluntaria?
Ni en mis más locos sueños lo imagine. Y eso que casi nunca sueño.
—¿estas… segura? —Leo le toco el hombro mirándola con la misma expresión de incredulidad y cautela, no llevamos mucho conociéndonos como para ir en una misión juntas, puede ser mi nueva cuñada, pero eso no implica que nos llevemos bien.
—sí, creo que será bueno —no mentiré al decir que esas palabras no me causan un poco de ansiedad.
Mis ojos rápidamente buscan a Sam y este tiene una de esas sonrisas traviesas, genial esto le causa gracia.
—bien, entonces ¿Qué tenemos que hacer? —doy un aplauso frotando mis manos en busca de calor, no sé porque aquí el frio es más fuerte. Tal vez por las paredes de piedra al estar bajo tierra.
—necesitamos varias cosas, Chloe y Lou podrán con ello —Elliot tomo una pluma anotando las cosas que faltaban para este viaje.
En mis notas no hay nada sobre ir con nuestros cuerpos humanos, así que tal vez esta preparación es lo que necesitamos más que nada.
≫ ──── ≪•◦ ❈ ◦•≫ ──── ≪
—¿un baño? —no es que el agua oliera mal, pero sin duda no es esto lo que esperaba
—necesitas limpiar tu cuerpo antes de colocar la protección
—pre-protección —Chloe asintió intentando no reírse, estamos en una tina mucho más grande y frente a mi esta Leire, estamos solo nosotras cuatro pues Lou la está ayudando a limpiar como Chloe me ayuda a mí.
—oh, vamos, deja de mirarme así —la mujer me regaño poniendo sus ojos en blanco.
—bueno. Es que… es extraño —frote mis brazos con una de las piedras que Chloe trajo, su color negro hacia que mi piel se sintiera estar pelándose y poniéndose roja.
—lo sé, pero tu hermano dijo que intentara llevarme bien contigo —la mire con sorpresa, mis ojos están demasiado abiertos y no puedo procesar bien lo que acabo de escuchar.
—no creo que ir a una misión a otra dimensión sea de lo que hablaba. —regaño Louise y yo asentí.
—pues no cambiare de opinión, puedo manejar este asunto por si se sale de control —ella está muy segura por lo que mejor no objetar su decisión.
Luego de casi una hora en la tina y con mis dedos casi a punto de ser pasas salimos del agua con una ligera bata.
Según Chloe tenemos que hacer esto durante varias noches hasta estar seguros de que es buena idea.
Los baños siguieron con una cobertura pintura sobre nuestros cuerpos, marcando toda la piel con símbolos que al terminar tendríamos que recitar siete veces hasta que el cuerpo se adapte a los sellos y para eso los viejos sellos que tenía puestos fueron removidos, no sentí gran cosa al dejarlos, solo más ligera.
Cuando los días pasaron el resto del grupo estaba tenso; con las barreras altas y la mía para cubrir mi posición si alguien me buscaba no sería fácil encontrarme.
Respire hondo de pie en la orilla de la caverna donde casi estúpidamente morí ahogada, si no fuera por Theo.
—bien, este es el mejor lugar, solo sentirán la presión del agua de la cascada cayendo en sus cuerpos. —nos quedamos de pie a un costado, teníamos que caminar sobre las rocas que rodeaban el costado de la pequeña cascada, que a pesar de ser pequeña esa caída podía dejar marcas en la piel.