Corín y Noah
“Regreso al pasado: enfrentando a la familia”
La noticia del éxito de Corín y su relación con Noah había llegado hasta sus padres y familiares más cercanos.
Un día, cuando menos lo esperaba, recibí una llamada inesperada.
—Corín, queremos hablar contigo —dijo la voz fría y distante de mi madre.
Noah me acompañó ese día, dándome la fuerza que sentía flaquear.
La reunión fue tensa.
Mis padres no ocultaron su sorpresa y molestia al verme triunfar sin su apoyo, y peor aún, con alguien que ellos consideraban “por encima de mí”.
—Pensamos que te habías perdido —dijo mi padre con dureza—. Pero parece que has cambiado demasiado.
Yo respiré hondo, con el corazón apretado, pero firme.
—He cambiado para mejor —respondí—. No necesito su aprobación para ser feliz ni para lograr mis sueños.
Noah sostuvo mi mano, y con voz calmada agregó:
—Corín es una mujer valiente, trabajadora y talentosa. Y yo estoy orgulloso de ella.
Mi familia no lo aceptó con facilidad, pero yo sabía que ese momento era necesario.
Para cerrar viejas heridas y empezar a construir mi propio camino, sin cargas ni cadenas del pasado.
Salí de ahí con una mezcla de tristeza y alivio, pero sobre todo con la convicción de que ahora tenía mi propia familia: Noah y el equipo que me apoyaba.