Capítulo 27

Elizabeth

Subimos un par de escaleras, entramos como en tres salones, la verdad que está casa es enorme, no sé cómo Alex no se pierde aquí dentro, bueno después de seguir cruzando habitaciones, llegamos a lo que yo suponía que era la sala, hay una gran pantalla para ver películas, unos sofás enormes, una mesita con una golosinas y refrescos, un círculo de cojines frente a la pantalla y unas decoraciones menos importantes.

- Pónganse cómodos - nos dijo Álex

- ¿Y qué vamos a ver? - Pregunté

- Una peli de terror - ante eso abro mis ojos como platos lo que causa la risa de todos

- A ella no le agradan mucho esas cosas

- ¿Tienes miedo pequeña?

- No, no es eso es que...

- Le teme a la oscuridad

- Patrick - lo amenazó con la mirada

- Ya, me callo - me dijo con los brazos en alto en señal de rendición

- ¿Qué les parece si jugamos a verdad o atrevimiento? - nos dice Camila rompiendo la conversación porque sabía que si Patrick seguía lo Iba a matar

- Pero...-yo no estaba muy segura de querer jugar est...

- Por mí no hay problema - dice Alex mirándome de reojo

- Por mí tampoco - dice Jeim

- Pero solo si después vemos la película - dijo Álex cruzándose de brazos como un niño pequeño

- Está bien después de todo eres el anfitrión

- Oigan y mi opinión no cuenta - digo mirando a los traidores de mis amigos

- No, en este caso no - dijo Álex encogiéndose de hombros

Con eso le dediqué una mirada asesina y nos sentamos en los cojines y empezamos a jugar

- Empiezo yo - Camila tomo una botella de plástico vacía que le dio Alex y la giró, pero por supuesto que me tocó a mí de primera

- ¿Verdad o atrevimiento?- me preguntó Alex

- Verdad - digo un poco nerviosa por su mirada

- mmmm…¿Cuáles son tus mayores fobias?

- Es en serio - me quejo

- Vamos responde - me dice Camila aguantando la risa

- Le temo a…a la oscuridad, a las alturas y a …

- ¿A qué pequeña?

- A los payasos

- ¿A los payasos?

- Si, sé que suena bobo, pero me aterran - él no dijo nada, siguió el juego después de unas rondas ya solo se escogía atrevimiento

Oh no, no, no, nos toca, nos toca

Dios no me hagas esto a mí

- Vamos Eli te toca - me dice Alex con una sonrisa pícara

- Ok, que quieres que haga - digo con un poco de nervios

- Quiero que...me digas al oído algo que estés deseando hacer y que lo hagas

- He... yo- lo pienso un poco, pero al final me lanzo, no puedo desaprovechar está oportunidad

Esa es mi chica

Me arrodilló y me estiró hacia delante hasta llegar al oído de Alex para susurrarle mi deseo, en cuanto me separo de el todos se quedan mirándome, pero solo él sonríe, mientras que Camila y Patrick me miran con curiosidad
Alex y yo nos levantamos, me tienes su mano y yo la tomo.

Unos minutos después estamos entrando a una de las habitaciones, Alex se gira y cierra la puerta a sus espaldas, me mira y por un momento me recorrió un escalofrío por la columna, nunca había estado tan a solas con él.

Que emoción, estamos jugando al depredador y la presa

Esto no es un juego, es un reto que voy a cumplir

Álex sin previo aviso se empieza a quitar el pulover, dejándome ver sus pechos y abdomen bien marcados

Dios porque me hace esto

Oh, cállate

Claro tú disfrutando y los demás que se jodan

Esa es la actitud

Una vez termina de quitársela me ofrece su mano y me acerca a él

- Álex que haces...

- Cumplir tus deseos - puso mis manos en su pecho

- Alex...

- Shhhh, no hables solamente déjate llevar - seguí su consejo y empecé a delinear sus tatuajes a la perfección, y sin poderlo evitar seguí uno de ellos hasta su abdomen, en ese momento sentí la tensión en sus músculos, pero no me detuve y él no me pidió que parara.

- ¿Te gustan?

- Creo que nada me gusta más en el mundo

- Me alegro, pero ahora me toca a mí

- He… ¿Qué?

- Vamos seguro que tienes alguno

- Bueno si, pero es que...

- ¿Están feos?

- No, no es eso, es que no son visibles y tendría que quitarme parte de la ropa para que los vieras y me da vergüenza

- Está bien si no quieres no pasa nada

- No, si quiero que los veas, es solo que…no importa luego te los enseño

- Claro, si quieres ya podemos irnos con los demás

- Espera un poquito más, ¿si?

- Está bien - y con eso empecé a acariciar su cuerpo nuevamente, hasta llegar al tatuaje de su cuello y volver a bajar hasta su abdomen

Luego de un rato ya estábamos en la sala con Camila y Patrick, me miraron con una cara de que me harían millones de preguntas, pero no dijeron nada, gracias a Dios. Alex se fue un momento a ponerse su pijama, y nos enseñó donde podíamos cambiarnos para luego ver la película.

- Aquí puedes cambiarte, está es la habitación donde dormiremos tú y yo, si te parece una buena idea clara

- Si por mí está bien

- Es solo que vi a Camila y a Patrick muy unidos que quise dejar que pasarán la noche juntos

- Si tienes razón - le dije y me gire a verlo, estaba recostado a la pared de la habitación
- ¿puedes ayudarme? - le di la espalda y le señale el broche del vestido, no escuché respuesta de su parte, solo sentí como sus dedos bajaban lentamente el broche y no pude evitar que unos escalofríos me erizara la piel en cuanto sus dedos tocaron mi piel desnuda

- Es hermoso - me susurro en el oído y sabía que se refería al tatuaje que tengo en la espalda, este es el más grande que tengo, pero como casi nunca me pongo ropa descubierta en es parte nadie se había dado cuenta, es un tatuaje sencillo y fino que va desde el comienzo de la espalda hasta la parte baja de la misma.

Alex empezó a acariciar mi tatuaje de arriba hacia abajo con lentitud asiendo que pequeñas descargas recorrieran mi cuerpo