Capítulo 32

Elizabeth

Después de ir a tomar un café y charlar sobre todas las cosas que Cameron hizo en el extranjero él y yo fuimos a dar un paseo por uno de los parques de la ciudad, todavía no me puedo creer que esté aquí, estoy tan emocionada

Cuando estabas con Alex no se te notaba mucho

Alex es una buena compañía, hace que me olvide del mundo a mi alrededor y es maravilloso porque no sé cómo lo hace pero es solo eso

Si claro, igual tú y él aún tienen problemas que resolver y lo sabes

Podríamos dejar de pensar en Alex, Cameron ha vuelto, ha vuelto por mí, ¿eso no es suficiente para que te des cuenta que me ama?

La persona que te ama no te abandona

No me abandono solo fue a resolver sus problemas

Si, tan ocupado estaba que ni siquiera te llamo en todo ese tiempo

Seguro que no tuvo la oportunidad

No me voy a meter ahí porque ya sé como termina todo, así que adelante, pero no te olvides que quién cuido de ti todo este tiempo, te acompaño y se preocupó por ti fue Alex

De alguna forma mi conciencia tiene razón , Alex estuvo a mi lado todo este tiempo y bueno Chistarían aunque no lo he visto mucho también fue una gran compañía.

- ¿Y, que has hecho durante el tiempo que no he estado aquí? - Cameron me saca de mis pensamientos

- Emm…, la verdad no mucho...

Mentirosa

Cállate

- Pues fuimos a tomar helado , salimos un para de veces e hicimos una pijamada en casa de…

- De Alex

- Si

- ¿Te lo pasaste bien?

- La verdad si, pero hubiese querido que estuvieras aquí - dije casi sonrojándome

Más mentiras, te lo pasaste fenomenal esa noche sin él

Podrías apoyarme por una vez en la vida

Lo siento no apoyo a mentirosas como tú

- ¿De verdad? - me preguntó con una ceja enarcada

- Sí ...yo…

- Podemos pasar más tiempo juntos si quieres

- Si - dicho este tomo mi mano y la entrelazó con la suya

No me lo creo, ¿esto está pasando de verdad? Que alguien me pellizque, ¿esto no será un sueño verdad? Porque si lo es no quiero despertar

Después del parque nos pasamos la tarde juntos haciendo bromas y compartiendo secretos prohibidos

- Es en serio no te rías! - me puso mala cara porque me reí de una de las travesuras que él me había contado que hacía en su juventud

- Yo nunca me escape de casa

- Pues que aburrida eras entonces

- ¿ Porque?

- Porque al menos un 75 porciento de los niños se escapa de sus casas

- Pues yo soy ese 25 porciento que prefiere quedarse segura en su casa, gracias - me mira y se ríe a carcajadas de mí y yo no puede evitar seguirle

- Sabes me divierto mucho cuando estoy contigo - me suelta de sopetón

- Yo también, ¿Sabes Nunca pensé que te fueras a fijar en mí ?

- ¿Porque?

- Porque soy una chica normal

- Pues eres una chica normal muy divertida y con gran sentido del humor sabes

- Gracias - dije sonrojándome

- Te voy a llevar a un lugar que solía ir de pequeño

- ¿Qué lugar? - pregunté con un poco de espanto

- Es un lugar oscuro y secreto - puse una muñeca de horror y este empezó a reírse de mi expresión

- Era broma, es sorpresa, ¿vamos?- me dijo levantándose y ofreciéndome la mano, la cual cogí con un poco de inseguridad

- Espero que te guste

- Si no es nada oscuro, alto o espantoso entonces si

- Oye sobre lo alto... lamento mucho verte hecho pasar por lo de la azotea …no fue mi intención lastimarte y...

- No te preocupes, no pasa nada - dije poniendo mi otra mano sobre la suya, lo que al parecer lo relajo un poco.

Creo que al fin mi sueño se hizo realidad, estoy con el amor de mi vida, pero ¿porque siento que me falta algo? Como si algo no estuviera completo, como si mi felicidad no fuera completamente sincera.