CAPITULO 4

Narra Aarón

Tomo una de las fotografías de Lexa, para llevarla a la delegación, quisiera abarcar todo los lugares y encontrar a Lexa, cada hora que pasa se hace una eternidad sin ella, Nathan no ha parado de llorar, se qué extraña a su mamá como yo la extraño, nunca se habían separado desde que nació, abro el armario para tomar una playera, mi padre me ha dicho que me tome el tiempo que necesite para buscar a Lexa sin preocuparme por el trabajo y aunque no me lo hubiera dicho no me importaría nada.

El llanto de Nathan se escucha de nuevo, camino hacia su cuna, lo tomo en brazos y lo empiezo arrullar, mi pequeño solo me observa pero vuelve a llorar, agarro una de sus sonajas, lo recuesto en la cama, me acuesto a su lado moviendo la sonaja, se mueve incomodo en la cama, deja de llorar cuando toma con su manita la almohada de Lexa, el olor que tiene de ella lo ha calmado. Camino hacia el armario saco una blusa de Lexa y la pongo a su lado. Pongo su chupete acaricio su mejilla.

-Iré a buscar a mamá, Pilar te cuidara mientras regreso- me mira atento aunque sé que no entiende.

Pilar entra a la habitación diciendo que Damián ha llegado, Damián ha sido mi amigo desde la universidad ha demostrado que puedo confiar en él, se ha ofrecido ayudarme a buscar a Lexa, ahora mismo necesito toda ayuda posible.

-Cuídalo mucho- digo hacia Pilar- Espero no tardar mucho

-Claro señor, no se preocupe- asiento, salgo de la habitación hacia el living.

-Hermano- saluda Damián, realmente no tengo ánimos de nada

-Gracias por ayudarme- aprecio mucho su ayuda

-No tienes nada que agradecer, yo se que tu harías lo mismo por mi- dice, asiento, también lo haría sin pensarlo

-Vamos, que nos espera un día muy largo- caminamos hacia mi coche hacia Daly City

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-Adelante señor Cooper- dice el comandante encargado del caso de Lexa

-¿Alguna noticia?- pregunto inmediatamente

-Lamentablemente no-suspiro decepcionado- Las investigaciones siguen, no pararemos hasta encontrarla

-Eso espero-saco de mi saco la fotografía de Lexa- He traído su fotografía para hacer volantes y pegarlos en todos los lugares posibles.

-Claro, señor Cooper- llama a una persona quien se encargará de hacer los volantes- Necesito que nos diga el porqué su esposa viajaba, cualquier pista, señal, ahora mismo puede ser fundamental para encontrar a la señora- cuestiona, Damián ha tenido que salir para poder dar mi declaración aunque solo se lo que me dijo Pilar y el mensaje de voz de Lexa.

-Sus padres tuvieron un accidente su hermana menor le llamo avisándole- recuerdo, tampoco sé cómo están ellos- Lexa se angustio y decidió viajar sola, solo se eso

- Esta bien señor Cooper, dentro de 15 minutos mis hombres irán a hacer un chequeo a la zona del accidente, necesitamos descartar esa zona.

-Voy con ellos- digo rápidamente

-Señor Cooper no es....- lo interrumpo

-Es mi mujer la que está desaparecida, iré quiera o no, le aseguro que si fuera su esposa usted haría lo mismo- asiente

-Tiene razón

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Narra Luciano

Termino de acomodar mi ropa en el armario, aun falta acomodar la ropa de Hayden en su habitación, después de la mudanza a la casa de la playa, he pedido vacaciones en el trabajo para poder ordenar la casa, hacía tiempo que nadie la ocupaba. Entro al cuarto donde está la chica, aun dormida, acomodo algunas cosas que compre para ella, abro la persiana para que entre un poco de luz. Un quejido hace que voltee a verla, ha abierto los ojos, aunque los vuelve a cerrar, hasta adaptarse a la luz, cierro de nuevo la persiana, no me muevo, no sé qué hacer, solo observa la habitación, el miedo de que recuerde algo me asusta. Intenta moverse, pero se queja, su mirada conecta con la mía, se inquieta, me acerco más a la cama

-No- murmura asustada

-Tranquila- sigue mirando toda la habitación

-¿Dónde estoy? ¿Quién eres?- pregunta sin dejar de observar todo

-Debes descansar- digo- Has sufrido un accidente- explico

-¿Accidente?- cuestiona

-Si, por eso no recuerdas nada, debes de estar tranquila- no sé como sobrellevar esta situación, digo las cosas sin pensarlo

-No recuerdo nada- pone su mano en su cabeza-¿Que paso?

-No debes forzarte

-¿Quién soy?- cuestiona, es la pregunta la más difícil, ni yo sé quien es

-Debes de tranquilizarte y recuperarte después aclarare tus dudas, ahora descansa- me acerco hacia ella.

-No me toques- dice asustada

-Está bien- me aparto de ella- Iré hacer la comida, necesitas alimentarte

Salgo de la habitación, necesito planear todo lo que le voy a decir, no sé cómo reaccionara ante esto, pero ya empecé con esto y lo seguiré.

Narra Aarón

Hace una hora hemos vuelto a la delegación, con ninguna pista, la zona ha quedado descartada, no se ha encontrado ninguna pertenecía fuera del área, ahora mismo está declarada como supuesto secuestro.

-Lo más extraño es en ningún hospital de la cuidad o de las ciudades vecinas no han reportado a ninguna persona con las características de la señora Alexandra, la zona ha sido resguardada desde el accidente no hay ninguna pista o señal de que la señora haya salido del coche- dice el comandante- No hay opciones se puede tratar de un secuestro o algún cobro de cuentas han tenido problemas con alguien

- No nunca

-¿Esta seguro?- vuelve a cuestionar

-Completamente, cree que se hayan ido del país- me aterra esa idea

-Podría ser posible, pero no dejaremos de buscar dentro y fuera del país

-Deberíamos de ir a descansar- dice Damián, asiento, tiene razón- Hay que conducir de vuelta- le paso las llaves del coche no tengo ánimos de conducir, solo quiero llegar con mi pequeño.-Volveremos todos los días, si es necesario hasta encontrarla- anima Damián