Amo de Todo

27. ¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos?

No sé qué clase de lugar sea este, pero está claro que lo hicieron ellos. ¿Cómo es posible? Me figuraba que esta gente resultaría ser solo un grupo de rebeldes escasos de recursos y con espíritu guerrillero quienes se aliaron con científicos para velar por la verdad y por la justicia contra los gobernantes que mentían descaradamente a la población.

La estructura parece estar muy bien realizada, me da seguridad de que no se nos vendrá encima la tierra que hay en la superficie. Hay personas trabajando por todas partes y la dimensión que hay entre un espacio y otro podría ser probablemente una habitación del Palacio de Elíseo.

Avanzo hasta un sector de alta seguridad donde me esperan otras dos personas que están armadas hasta los dientes. La artillería pesada no ha sido algo gratis, claro está.

En cuanto me recibe una de las chicas que venía conmigo cuando me sacaron de la reunión con Hassan.

—Mi nombre es Tryna, soy parte del equipo de agentes especiales y permaneceré con usted en todo momento, doctora. 

—¿Algún motivo en particular por el que debas secundar mis pasos, Tyana?

No contesta. Solo ingresa una clave de alta confidencialidad, empuja puertas, y tenemos acceso a una habitación diferente.

Hay luces vagas titilando por todas partes, tubos de ensayo y personas trabajando como si fuese uno de los laboratorios de Grinberg.

—¿De qué se trata esto?—pregunto—. Han improvisado un…

—Sí.

Claro. Probablemente haya sido luego de la participación de Alice y Chloè en la privacidad del gobierno francés.

Como sea, desestimo ahora las opciones y descubro algo.

Una cabina.

Ella me dirige hacia este lugar una vez que lo veo y entro sola.

—Doctora—me advierte ella—: puede salir cuando sea necesario.

Asiento.

Sé qué va a suceder, no sé si estoy del todo lista, pero creo que es el momento idóneo para intentarlo finalmente.

Una vez que estoy dentro de la cabina, cierra la puerta pesada al otro lado y tomo asiento.

Solo hay una silla.

Está muy oscuro aquí dentro.

No entra nada de luz en absoluto.

Al sentarme, la vibración es tenue, pero familiar.

Rítmica.

Como las vibraciones que provienen desde las figuras en el cielo. Luego se vuelen más intensas. Marcan un ritmo diferente. Cierro los ojos, me aferro a la silla, la habitación parece estar al borde de sacudirse, la vibración aumenta en intensidad e intento mantener mis pensamientos totalmente fuera como si fuesen una pantalla sin bordes, sin principio ni final, solo donde los pensamientos se proyectan y desaparecen.

Esta modalidad de investigación la descubrí cuando estudiaba las vibraciones de geometría sagrada, por algún motivo en el palacio no tenían un ápice de sentido común como para dignarse a detenerse un momento para conseguir la tranquilidad que se puede tener acá a fin de dejar pasar los pensamientos.

Esa gente vive y morirá intranquila, esa no es la manera de poder…conectar.

Boom.

Mi cabeza se queda en un silencio profundo.

La oscuridad ya no me deja discernir si estoy con los ojos abiertos o cerrados, simplemente la vibración me mantiene en un trance hipnótico mientras un destello de luz en medio de la nada misma aparece dentro de mi cabeza y es la señal que necesito para poder preguntar en mi estado meditativo.

Ellos encontraron el patrón, los rebeldes dieron con el patrón de vibraciones para la conexión y trabajan en otras combinaciones, pero este es el mensaje recibido.

Doctora Mercy, si pudiera establecer conexiones con realidades de otros planos, ¿de qué manera lo haría si no comprende el lenguaje?

Imágenes y sonidos.

Aparecen en mi cabeza esa conversación que mantuve antes con dirigentes y personas de los laboratorios de Grinberg.

No sé por qué, tampoco es alusión a la razón para saberlo, pero me conmueve ya que los sentimientos vibran también en mí y siento a flor de piel la emoción de saber que estaba en lo correcto.

Chispas.

Es lo nuevo que aparece.

Chispazos por todas partes.

Como cuando presionas fuerte los ojos.

Miro al suelo

Los chispazos ensucian una suerte de superficie agrietada. ¿Y esto?

Vuelvo la mirada hacia arriba y hay estrellas.

Chispazos.

Caray, ¿qué es esto?

¿Me siento acaso, en el mismísimo espacio exterior? ¿No? ¿Pero…?

La base lunar.

Las milicias en la base lunar.

Han establecido el contacto y están haciendo daño, pero ¿quiénes? ¿Nosotros? ¿Los humanos?

Apenas formulo las preguntas, puedo percibir en mis mejillas lágrimas que caen.

No.

Nosotros no estamos invadiendo otros planos.

Nosotros somos los invasores, tenemos este lugar prestado y andamos de forasteros sin encontrar nuestro sitio preciso. ¿Existe?

Una mirada.

Un par de ojos se posan en mí.

Son los de un hombre.

No lo reconozco, pero a su alrededor sí veo rostros conocidos, o al menos, veo máscaras. Veo…

…la fiesta de mascarada con los grandes líderes.

Posiblemente algunos de ellos ni siquiera son humanos y está dirigiendo el curso de nuestra propia humanidad.

Las respuestas me impactan como bofetadas.

Hay que detenerlos.

La base lunar solo tiene interés de uan guerra espacial para conseguir lo que buscan. Hay dirigentes que no pertenecen a este plano, montando el curso de nuestra especie. Y nuestra especie misma es una suerte de forastera en este planeta.

Las vibraciones alrededor comienzan a disminuir.

No tengo idea con qué he establecido contacto, pero he obtenido las respuestas.

La puerta se abre.

Mis párpados comienzan lentamente a despegarse y Tryna se aparece delante de mí, extendiédome sus manos para tener en qué afirmarme para ponerme de pie.




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