6. Pentágono

“Hola, dra. Me comunico desde Barcelona, trabajo para una prestigiosa universidad donde imparto clases de Matemáticas y quisiera hacerle saber que soy un ferviente seguidor de las teorías de Tesla. Los estudios que usted lleva a cabo respecto de la figura que apareció en vuestra ciudad son asombrosos, agradezco el hallazgo. Quisiera ponerme a su disposición en caso que requiera más investigaciones. Saludos desde Sitges.”

Mmm, okay.

Siguiente mensaje:

“Dra, mi nombre es Helena, pertenezco a…”

Siguiente:

“Buenas tardes, Dra. También soy estudiante no formal de Geometría Sagrada, es más bien una afición…”

Siguiente:

“Hola, doc. Me comunico desde Colombia, mi padre tiene campos y hace tiempo despertamos con figuras muy similares a las que hay en los cielos. Dicen que la ufología ya está a cargo de su estudio, pero papá me pidió que nadie diga nada porque el gobierno quemaría nuestros campos como ha sucedido a otras personas en distintas partes del mundo. Le comparto las imágenes que tomé desde una colina, pero le pido que no lo divulgue, solo eso, saludos.”

Los círculos de los campos, esos que se forman de manera extraña de la noche a la mañana como estas luces.

Eso puede ser una brújula.

Pero lo que este chico me dice en el mensaje lleva razón: la gente desprestigia esta clase de investigaciones, no sé si pueda ser un punto de referencia o comparativo válido, además que pudieron haberlo hecho ellos mismos en el marco de todo este caos y ahora me lo presentan como si fuese un hallazgo. Lo lamento mucho, pero no es una referencia en la que me pueda apoyar ahora.

Sigo mirando los mensajes que me han llegado a raíz de la comunicación que establecí en el video en vivo que sacó la tal NinaStrange que me sacó con su móvil y sus seguidores de este tipo de cosas vieron.

Esta gente son cazadores de fenómenos paranormales y están en todo el mundo, solo espero que no se me tilde de loca por haber participado de su canal, de ese modo jamás podré sacar mi doctorado si no cambio de enfoque mi tesis lo cual sería caótico. ¿Volver a empezar? Por todos los cielos, imposible, no puedo.

Nada más que un paso en falso en todo esto y todo habrá sido en vano. Me dicen “doctora” sin estar graduada del doctorado aún, pero si no hago las cosas bien, tampoco llegaré a estarlo y eso sí que sería un golpe duro en mi vida.

—Señorita.

—Oh, gracias.

Estoy en un café a un par de cuadras del Palacio de Elíseo, donde hay movilizaciones que marchan por las calles camino al punto señalado.

Guardo el móvil y saco mis notas a mano para hacerlo a la antigua (me gusta llevar un anotar ya que uno nunca sabe cuándo un aparato puede dejar de funcionar) y anoto “agroglifos” que es de la manera que se le llama a los círculos en los cultivos.

¿Debiera imprimir las fotos que me envió el chico en instagram? Puede ser, aunque no lo considero viable por el momento.

Bebo de mi café caliente y, cuando quiero caer en la sensatez, descubro que estoy completamente obstinada con el fenómeno, anotando fechas, hora, lugares en los que aparecieron y pruebo mi diapasón para dar con las notas que se supone que han quedado inscritas. Necesito viajar a Athenas para definir esta, no obstante, un montón de gente en el café comienza a agolparse alrededor de una pantalla grande que está encendida con un noticiario.

—Una cuarta figura acaba de aparecer, esta vez sobre el Pentágono estadounidense…

Inspiro profundamente.

Cuatro figuras.

Cuatro ya.

Trago grueso, anotando también otra información.

Torre Eiffel de París, Acrópolis de Atenas, Bases militares en el Ártico y ahora el Pentágono en Estados Unidos.

—¿Doctora Mercy?

Me vuelvo a la persona que acaba de hablarme.

Está justo delante de mí.

Es un hombre trajeado junto a otro que está un paso por detrás.

Me enseña una placa gubernamental. ¿Qué rayos?

—¿Sí?—murmuro—. ¿Quién es usted?

—Seguridad gubernamental. Tiene que acompañarnos.

—¿Qué? ¿Son de la policía? ¿Y ahora qué hice?

—Ha sido solicitada en el Palacio de Elíseo ahora mismo—. Creo que algunas personas alrededor están empezando a mirarnos de mala cara, notando algo raro en esto—. El presidente Vicente Cruz requiere verla ahora.