Capítulo 3
Riley
Al ser abandonada por mi mejor amiga decido tomar rumbo hacia mi auto, en cuanto llego a donde se encuentra lo pongo en marcha para llegar a mi departamento, y mientras voy escuchando un poco de música.
En pocos minutos llego al edificio, me aparco y subo directamente a mi piso. Decido cocinar algo mientras llamoa mis padres y en milesima de segundos me contestan.
- ¡Hola preciosa! – veo el varonil rostro de mi padre en pantalla. -¿Cómo has estado amor? . -pregunta cariñosamente.
-Hola papi, he estado bien- contesto. -mami y tu como han estado ¿Cómo le está yendo en singapur?
Desde que tengo uso de razón mis padres son diplomáticos, por lo cual tienden a no estar en un lugar fijo por mucho tiempo. He vivido por poco tiempo en muchos lugares del mundo. Cuando cumplir mis dieciséis años vinimos a Italia por dos meses y quede enamorada de la preciosa ciudad por lo cual decidí quedarme a vivir en ella, fue una decisión dura para mis padres ya que dejar a su hija en una ciudad como Italia, pero al final estuvieron de acuerdo con que continuara mis estudios y parte de mi carrera aquí en Italia.
Al no tener un lugar fijo para vivir con una vida adolescente normal evitaba hacer amigos o conocer personas, pero cuando llegamos a Italia a las primeras personas que conocí fue a la familia de camil. Los padres de camil y sus hermanos, al ver que camil y yo teníamos la misma pasión por la danza y nos atraían las mismas cosas, nos convertimos en mejores amigas y hoy a mis 21 año lo seguimos siendo.
Alessandro, bernardo y camil son los hermanos que nunca tuve, y sus padres también son de gran ayuda me ven como a una hija mas y estoy muy agradecida por ello.
-Toda marcha de maravilla aquí, pero extrañamos a nuestra princesa-. Expresa mi padre con evidente tristeza.
Cabe destacar que soy su única hija. Por el estilo de vida que llevan mis adre decidieron no tener mas hijos aparte de mí.
-Yo también los extraño a montones- logro decir apoyando mis brazos en la encimera.
- ¿Y mi madre donde se encuentra?
-Ah si ella se encuentra en una reunión, pero cuando concluya le dijo para que te marque.
-Bien, dile que la extraño.
Papa ríe, y solo puedo pensar en lo mucho que quisiera tenerlos cerca y poder darle un fuerte abrazo.
- ¿Tus clases de ballet como están yendo? – pregunta mi padre cambiando de tema.
-Todo bien, en poco tendremos una presentación importante.
-Me alegra escuchar eso- papa habla mientras mira algo en su ordenador. -un día te sorprenderé y te visitaremos.
-Si por favor quiero tenerlo cerca.
-Nosotros también amor. - se queda en silencio por varios segundos, y vuelve a hablar. - ¿amor tienes novio ya?
Cuando mi padre suelta esa palabra me encuentro tomando un poco de agua y por lo repentino de su pregunta logro ahogarme, empiezo a toser como loca.
No se de donde se le ocurre esa idea a mi padre ni siquiera yo podría pensar en eso ahora mismo.
- ¡Claro que no papá! – exclamo a un tosiendo.
-Que alivio escuchar eso princesa. - suelta papa relajado. -pero por que casi te ahogas con el agua hija. Puedes contarme no soy celoso.
Veo la gran sonrisa en rostro de mi padre.
¡Oh no, claro que no!
Nos quedamos mirándonos fijamente a través de la pantalla.
Mentiría si dijera que físicamente no soy igual a mi padre. Herede los mejores rasgos de él, por parte paterna cuento con los ojos de el y sus redondas mejillas, también herede el color de piel de mi padre que es un tono blanco y por parte maternal cuento con el bello cuerpo de mi madre, su genética supo como distribuir bien en mi cuerpo y no me quejo por ello, también cuento con el cabello de mamá, un negro azabache un poco ondulado y largo.
-Papi, si ya tuviese novio, creo que ya estuvieras enterado ahora mismo estoy concentrada en mi carrera-. Contesto luego de un largo rato en silencio.
-Sabes que quiero ser el primero en enterarme cuando tengas un pretendienta-. A todo esto, que dice mi padre solo puedo mostrarle una linda sonrisa. Pobre del alma del chico que le toque ser mi novio. -quiero saber en que momento empezare a compartir a mi bella hija.
-Tenlo por segura papa. Serás el primero.
Continúo hablando con mi padre sobre cosas triviales y sin importancia, después de diez minutos me despido de él, termino mi cena y decidí tomar un baño.
Voy directamente a preparar un baño con sales y jabones especiales, en lo que estoy tomando mi baño leo un libro y recuerdo lo que dijo Isabelle sobre la presentación privada para la F1.
Tomo mi iPad y rápidamente tecleo el nombre de la escudería Ferrari. En segundos tengo miles de información sobre ellos, algunas son de las carreras ganadas para esta temporada, otras de loa equipos rivales para la escudería. Llevo más de cinco minutos leyendo y visitando link, hasta que entro en una pagina en donde se encuentra una foto de Alessandro y otro chico y lo que logra captar mi atención de inmediatos es el encabezado.