Capítulo 12
Riley
Me encuentro frente al espejo y tengo una pela interna ahora mismo, ya estoy vestida peinada y maquillada… bueno no tan maquillada ya que faltan mis labios.
Veo la hora en mi teléfono y falta poco para que el chico de las carreras venga por mí.
Me vestí de lo más casual ya que no se a dónde iremos, anoche mientras me traía a mi residencia quise saber a qué lugar me llevaría, pero digo que sería una sorpresa y no me permitió investigar más. Mi vestuario consiste en una en una suerte abrigada con mangas que cubre todo mis brazos en color blanco, una falda tipo ballerina en color negro, medias gruesa que cubren mis piernas del frío, también en color negro y unas botas de tacón en forradas en cuero negro.
Vestimenta casual
Resopló.
El gran dilema es que no sé qué labial colocare en mis labios, tengo dos opciones. Una es un labial en tono chocolate y otro en tono rojo pasión.
Lo peor de todo es que mi problema para elegir el labial es culpa de Colin. Anoche en la fiesta de camil me dejo en claro el deseo que tenía por besar mis labios. Dos veces…. Dos veces lo intento, y admito que en un momento determinado yo quería que el chico de las carreras me besara.
si me coloco un brillo labial, es de noche y me vendría bien algo de brillo en mi rostro.
Pienso mientras veo mi reflejo en el espejo frente a m.
No Riley, usa un labial… cual sea no importa
Escucho la vos de mi subconsciente. cual sea no importa.
Tomo el labial y con sumo cuidado pinto mis labios rellenos, miro el resultado y sonrió para mis adentros, el color chocolate le sienta bien a mi pálida tez, vuelvo a mirar mi reflejo en el espejo y recuerdo las palabras de Colin.
—No olvido el labial rojo que tenías…. Y estoy debes saber que estoy obsesionado con el color.
—Si te pidiera un beso… me complacerías
Idiota. Si no me hubiera dado esa información, tal vez hoy hubiera disfrutado del color en mis labios.
Soy sacada de mis pensamientos al escuchar el sonido de la notificación de un mensaje en mi teléfono y rápidamente lo abro.
Chat: el chico de las carreras
Ya estoy aquí.
Yo:
Bien, ya bajo.
Me apresuro a salir y tomo mi cartera cruzada Prada y me encamino al lobby de la residencia. Cuando llego veo al Mateo boquiabierto y casi babeando. Paso una de mis manos frente a su cara y este no reacciona, así que decido seguir su vista y choco con la creíble imagen que le brinda Colin a Mateo. El chico de las carreras se encuentra vestido casualmente, va con una suerte de lana en mangas larga color gris, jeans negros y unas zapatillas van. Está recostado en su Ferrari mientras mira distraídamente su teléfono.
Me he quedado peor que mateo al verlo. Esto muy guapo cómo está, pero no lo voy a admitir en voz alta.
—Ese Ferrari es muy exclusivo, solo existe cinco en el mundo. —susurra Mateo a mi lado.
Giro mis ojos. Es solo un carro no es para tanto.
Colin levanta la mirada y me sonríe cuando se percata de que lo observo. Oigo a Mateo soltar un pequeño chillido y me sobre salto.
—pero…
—¿Sales con un piloto de fórmula uno? — Pregunta con indignación —. Te lo tenías muy callado Riley.
—¿Qué…? No salgo con nadie mateo. — Informó.
—umm. — Mateo se toca la barbilla y continúa. —. ¿Y cómo explica que lo primero que hizo cuando bajo de su increíble coche, fue llegar hasta mí y preguntar por ti?—Me hace saber mateo.
Trato de explicar que Colin es solo mi amigo y no puedo por que escucho la voz del chico de la carrera detrás mío.
—Hola.
Siento su toque en uno de mis brazos. Giro para estar frente a él.
—Hola. Sonrió y acomodó un poco mi cabello. —¿Cómo estás?
—Bien… supongo— Se toca la nuca. —¿Podemos irnos?
Señala su auto. asiento y me despido de Mateo. Camino al lado de Colin hasta llegar a su auto, el habré la puerta del copiloto para mí y me ofrece su mano para ayudarme a subir. Entro al auto con su ayuda y por el cristal lo veo rodear su auto hasta llega a la puerta del piloto y entrar en el interior. A brocha su cinturón y enciende el auto.
Me tomo un segundo para inhalar el dulce aroma que me ofrece el interior del auto.
Sonrío al saber que es el mismo aroma que encontré la primera vez que me subí a su carro.
Él se dispone al poner en marcha el carro y yo me mantengo en silencio, el ambiente silencioso se mantiene por varios minutos hasta que el decir hablar.
—Estás muy bella hoy— Lo escucho decir mientras gira en una curva de la carretera. —Quiero decir… tú siempre estás linda Riley. — Me mira por cortos segundos.
—Gracias. Susurro.
Unos minutos más tarde llegamos a nuestro destino, Colin se estaciona y me abre la puerta de su coche para baja. Me sorprendo a ver qué trago a un teatro, de todos los lugares que pensé que podíamos visitar esta noche, decidió un teatro.
—No me gusta el teatro ni la danza— Informa mientras se posiciona a mi lado.
Arrugo mis cejas.
—¿Y si no te gusta, porque estamos aquí? No en primer lugar Colin ¿se puede saber por qué no te gusta el teatro o la danza. —Pregunto con indignación.
No contesta me invita a seguirlo, lo hago en silencio y me deleito con las decoraciones que posee el teatro en su interior. Llegamos a la sala donde se dará la obra, el cisne negro. Es unas de la obrar más importante en la danza, puedo decir que el interpretar al Cisne negro es el sueño de toda ballerina.
Voy delante de colin en una de las filas para tomar asiento, la sala se encuentra con más personas, desde que se percataron de nuestra presencia no deja de mirarnos, algunos le piden foto y autógrafo a colin o simplemente le preguntan sobres las demás carreras.
Le doy su espacio para que interactúe con los interesados en el deporte y espero a que la presentación comience. Miro varias veces a colin detrás mío y rio internamente al ver que mantiene su mirada en mí, de vez en cuando mira a la persona con la que mantiene la conversación. Aparto mi vista de el y me dedico a observar el teatro desde mi posición, se siente extraño el apreciar la obra desde aquí y no desde el escenario.
—Soy todo tuyo ahora— Me toma desprevenida cuando me susurra cerca de mi oreja, me sobresalto y giro mi cabeza a su dirección logrando quedar muy cerca de sus labios.
Ambos miramos los labios del otro por largos segundos, hasta quien es el que decide volver a hablar.
—¿Te siente cómoda con esto?, no pensé que tendría tanta atención… —lo veo tragar grueso y no deja de mirar mis labios. -. No sabía que tendría fanático en el teatro. Lo siento.
Niego suavemente.
—Descuida, no me molesta que interactúes con ellos— Soy sincera.
Colin tratar de hablar, pero interrumpido por un hermoso Niño. El pequeño le hablo y No entiendo nada de lo que el pequeño le dice ya que hablan en italiano, solo veo a Colin sonreír y asistir.
—Me pido una foto. — El chico de la carrera vuelve a mi dirección.
—Okey — Río —, hazlo te dije que no me molesta y aparte es un niño. —Señaló al pequeño quien me sonríe genuinamente.
—Sí, pero él quiere que salga mi novia. —me dice.
Pestañeo varias veces con dirección al niño y este me sonríe.
—Yo— toco mi pecho y veo al niño sonreír.