"Greg"
- Sophia -
Luego de instalarme en la casa de mis vecinos, después de una larga charla con la madre de Chris y ver como su lastima se reflejaba en su cara me negué ante esto pero ella no aceptaría un no por respuesta así que... Como decía ya estoy instalada aquí me dirijo a la cocina para ayudar pero saliendo de mi habitación, veo como Joshua cierra la puerta molesto y se dirige al patio trasero.
Me detengo unos segundos donde su supone es la habitación de Chris, sé que no debo pero ya que lo estoy haciendo, escucho a través de la puerta una conversación que no me incumbe. Volteo a los lados en caso de que alguien venga pero no hay nadie y sigo espiando pero escucho algo que me dejo helada.
— ¿Te gusta alguien Chris?
Lo que siguió como respuesta me dio en el pecho en serio a Él le gustaba alguien y yo fui como si nada y lo bese quizás hasta sienta lastima de mi por enamorarme de él. Tras aquello baje rápido a la cocina ayudando a la señora Elizabeth ella noto mi rareza creo por que no duro mucho para que me preguntara
— ¿Te sucede algo pequeña? —me miro preocupada.
— Em no señora solo... no es nada me da gusto estar aquí.
— Vale avísale por favor a los chicos que esta lista la cena ¿sí?
—Claro.
Subí rápido toque la puerta y aun con ese extraño sentimiento en mí. Les dije que bajaran a comer en toda la cena fue entretenida Joshua el menor trataba de jugar conmigo diciendo cosas que eran muy fácil de voltearlas a mi favor así que no dudaba en hacerlo.
A pesar de estar jugando seguía pensando en lo irrespetuosa que fui con el beso así que definitiva iría a pedirle perdón, cuando Chris se levantó de la mesa lo seguí disculpándome por tener algo que hacer lo cual en cierta forma ¡era cierto!
Lo alcance en las escaleras tomándole de la mano y pidiéndole perdón, sé que me entendería seguí directo a la habitación encerrándome en esta y recostándome en el suelo tenía mucho que pensar... lo primero sería en como eliminar mis sentimientos sobre él no es bueno que tenga a una chica problemática cerca.
***
Desperté temprano como es de costumbre hoy era martes y tendría que trabajar me bañe y arregle para salir cuando un olor a tocino inundo mis fosas nasales, parada aun en el final de la escalera alguien me abrazo por la espalda la verdad me sentí confundida hasta que alguien río en mi oreja y me voltee bruscamente para ver a Zacary Johns
— Hola — estoy segura que estaba más roja que un tomate.
— Hola bonita, no vas a comer —señalo el bolso y las llaves en mis manos.
—Em la verdad no creo yo...
— ¡SOPHIA! ¡CHICOS! ¡PARENSE A DESAYUNAR!
— ¡YA VAMOS MAMÁ! — Grito Zac.
— Creo que tendrás que venir te guste o no — sonrío con maldad para luego marcharse.
Que pasaba por las mentes de estos chicos? a veces me daba miedo imaginarme en la misma casa junto a ellos luego recordaba que eso estaba pasando y se me olvidaba todo, mientras mi cerebro procesaba un primer abrazo aun parada en las escaleras un segundo abrazo me fue dado esta vez por Joshua y un — Hola cuñada — saliendo de su boca y marchándose a la cocina! ok si, estos chicos me dan miedo.
Tome asiento y desayune lo más rápido que pude me disculpe por ello a lo que Eliza me dijo que no importaba pero lo importante era que debía comer y tan rápido como pude salí corriendo de la casa antes de que Josh me matara esta vez.
Al llegar mi sorpresa fue extraña! Josh me veía con una sonrisa de oreja a oreja tire mis cosas al piso y levante las manos en forma de rendida este me vio y se echó a reír.
— No sabes por qué estoy tan feliz ¿cierto?
— No, ¿que hice? ¿Me vas a despedir?
— No tarada —se carcajeo un rato hasta que se cansó.
— Me entere de que la señorita soledad vive con unos chicos guapos y populares — sonrío aún más.
— Eres extraño, pero me extraña más que sepas eso, ¿cómo es qué? — este me interrumpió.
— Digamos que tengo mis contactos —me guiño el ojo.
— No me jodas dime Josh como te enteraste — tome mis cosas y me fui a cambiar.
— Vale, está bien hace unos días vino uno de ellos y me hablo de que te quedarías a cuidar a tu nov... digo a su hermano — lo mire entre cerrando los ojos y este solo me sonrío ampliamente.
— Qué raro, ¿cuál fue?
— ¿Cuál fue qué? —me miro riendo.
— ¿Cuál fue el que te vino a decir que me quedaría en su casa?
— A eso, pues uno hay creo que está en el instituto de deportes — se encogió de hombros.
— Mmm — lo pensé un rato pero no me llegaba ninguno — Puf no se cual es
Toda la tarde estaba completa y aburrida iba de lado a lado cumpliendo los pedidos hasta que de una mesa me llamaron un grupo de estudiante seguro estaban en el último año me acerque a pedir la orden y uno de ellos me sonría como el gato de país de la maravillas y fue cuando me gire a ver a el que tenía detrás.
— Hola cuñada — me susurro, me voltee bruscamente para ver a Joshua más alegre que nunca.
— Chicos — poso su brazo sobre mis hombros — esta de aquí, — me señalo — ¡es mi cuñada Sophia!
Lo mire con cara de — Que mierdas estas diciendo? — y el muy sin vergüenza solo se echó a reír tomando asiento de lado a una rubia que lo miraba divertido, ya estaba que golpeaba a Joshua solo por su cara de estúpido.
Para completar mi día, vi en la puerta como Zac y Chris se adentraban al local y desde la mesa Joshua los llamo para que tomaran asiento con ellos.
— Bien ahora que estamos todos podemos hacer el pedido ya que Sophia está aquí — dijo el burlón al que posiblemente mataría si no hubiese tantas personas cerca.
Zac se echó a reír mientras Chris mordía su labio inferior con fuerza ignore todo y a todos e hice lo de siempre — Muy bien, ¿que desean ordenar? — dije con una sonrisa forzada, anote todos los pedidos y cuando estaba por marcharme Josh me vio con cara de — Mierda — desde unos centímetros que nos dividían, no entendía muy bien que le pasaba pensé por un momento, ¿llegaría el jefe? ¿Me van a botar? ¿La policía? o hasta lo peor para mí, ¿Josh se enamoró de alguno de los chicos?