La llamada

-¡Qué! ¿Qué quiere que me presente a una entrevista mañana temprano?, pero yo solo deje mi hoja de vida en Modas Thomson –Señorita Williams, me complace informarle que hemos revisado su hoja de vida y sus diseños nos han parecido bastante buenos, debido a ello la esperó mañana a las ocho treinta en 61 old forest Hill Rd. ¿Conoce?, La chica duda un segundo –Sí claro que sí, estaré en esa dirección a las ocho treinta, disculpe ¿con quién tengo el gusto? -La saluda Lucas Thomson-, los bellos del cuello de Crystal se erizan y se queda callada sin saber que más decir, al parecer Lucas se da cuenta –la esperó mañana señorita Williams- y termina la llamada,  Crystal sigue en shock con el móvil en la mano y los ojos muy abiertos, aún está procesando que la hayan llamado porque sus diseños les gustaron, pero lo que más la había desorientado era recibir la llamada de nada menos que de -¡LUCAS THOMSON! Grita,  Ese hombre tan codiciado por las mujeres, ese papacito que antes le había parecido nada fuera de lo común –he hablado con Lucas Thomson- ahora Crystal tenía una entrevista mañana a las ocho treinta en una dirección que no conocía, pero no pensaba que fuera un impedimento para ella, tomaría un taxi y llegaría más temprano debía dejar una buena impresión desde el primer momento, ella había visto a Lucas solo por televisión…o al menos eso creía, debía preparar su ropa y zapatos tenía que estar impecable para mañana, Crystal sale corriendo de su habitación como una chica de quince años a la que un capullo ha invitado a salir por primera vez, con nervios y emoción a contarle a su madre,- mañana será un Gran día- se dice.   

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-Bueno eso ha sido un poco extraño, no habla mucho, pero ya está hecho mañana veré a ver si es tan brillante, y sí ella acepta y cumple con lo que busco a partir del lunes trabajará en Modas Thomson, pero antes debo presentarla a mi padre, estará orgulloso- se dice él joven con una sonrisa de satisfacción, y se mete a su cama muerto de cansancio.

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Crystal salió muy de mañana, para la importante ocasión ella opto por usar un vestido azul negro tallado y a la mitad de la pierna con medias y zapatos de tacón nivel ejecutivo sobre su vestido que por cierto no tenía mangas se puso un sobretodo que ella misma había hecho era negro y de tela trasparente, tenía un listón para atarlo y la hacía parecer una ejecutiva bancaria o por lo menos eso le dijo su madre cuando la vio, ahora se encontraba en un taxi, esperaba por el amor de Dios que no hubiera tráfico y que el tiempo le fuera suficiente para llegar a aquel lugar desconocido, ya había escuchado mencionarlo en las noticias, es uno de los lugares donde vive la gente Rica, mientras guardaba silencio y le dirigía con reojo una mirada al conductor, oraba para que no fuese a ser un secuestrador que la terminara, violando y matando, pensar en eso la había aterrado, mientras veía muchos árboles en la carretera y el taxi se alejaba de todo lo que conocía amenazaba fuertemente con llover iban a dar las ocho y Crystal se estaba impacientando  -mal día, para una entrevista Crystal- se dijo así misma en voz baja- vio su móvil una vez más las ocho con diez minutos de pronto el taxi doblo en una esquina y un portón negro quedo frente a ellos –es aquí señorita- dijo el taxista, Crystal le pago y agradeció por todo. Al bajarse agradeció a Dios porque la había protegido y se quedó un poco idiotizada ante tal portón, donde ella vivía no había ni una casa que fuera ni la mitad de lo que hoy tenía enfrente, toco un botón y una cámara enfoco su rostro -¿Qué desea? Pregunto una voz femenina muy cordial –Buenos días tengo una entrevista con el señor Lucas Thomson- dijo la joven –espere un momento por favor- le respondió aquella voz,  Crystal saco su espejo y arreglo su cabello vio que todo estuviera en orden –puede pasar Señorita-  la voz la asusto un poco –muchas gracias- dijo y vio como aquel portón se abría ante ella, cuando entro vio una mansión enorme camino hacia la puerta y una bella joven le abrió Crystal supuso que era ella la de la voz en el portón –Buenos días, Señorita Williams soy Julieth, pase adelante- dijo la joven muy elegante era una rubia de pelo recogido estaba usando un traje gris y unos tacones negros, sus ojos eran azules, muy linda (pensó Crystal), -acompáñeme señorita- dijo y camino muy elegante Crystal la siguió. –siéntese y espere el señor Thomson la atenderá en un momento- dijo y se marchó dejando a Crystal sentada en aquella enorme sala.

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Esa mañana Lucas se había despertado muy temprano, había dormido como rey y tenía muchísima energía para este día, tanta que había decidido ponerse su sudadera y tenis y salir a correr un poco, se había alejado de su mansión así que decidido volver en una hora tendría que atender asuntos laborales y debía estar presentable, Lucas sabía que él siempre se veía bien y presumía de su bien trabajado cuerpo, en su mansión tenía su cuarto de entrenamiento  disponible para el las 24 horas del día, al volver a su mansión pensó en hacer un poco de ejercicio pero su reloj le indico que ya no le quedaba el tiempo suficiente, así que siguió su camino hacia la ducha cuando termino fue hacia su ropa que estaba perfectamente organizada por colores y escogió una camisa manga larga gris de botones con un pantalón negro, zapatillas, su loción y uno de sus Rolex, esta vez tomo una cadena con una “L” y la puso en su cuello peino su cabello un poco rebelde y escucho toc,toc,toc.-Sí- dijo Lucas –Su desayuno está listo señor puede bajar al comedor cuando usted guste-terminó una voz femenina –Perfecto Julieth- contesto Lucas, Julieth era la asistente personal de Lucas en su mansión se encargaba de todo lo que tenía que ver con Lucas, desde que su ropa estuviera limpia y correctamente doblada y ordenada, hasta su alimentación y visitas que de vez en cuando Lucas recibía, era su ser humano de confianza, Lucas la respetaba muchísimo ya que se trataba de la nieta de su nana.