Amor con aroma a café

LA ESPERA

 TOMÁS 

He estado contando los días para la venida del  bebé, mi padre está muy feliz por el próximo nacimiento de su nieto o nieta y ha preparado una habitación especial en la casa, también ha contratado una enfermera para que cuide de él.

Durante estos días me he puesto al corriente de la administración de la finca, él ha hecho un estupendo trabajo, sin embargo por su avanzada edad, el trabajo le produce mucho cansancio, por lo que ya me encuentro un 100% de tiempo involucrado con el tema.  

Mi padre ama las flores, por lo que ahora comprendo las razones por las que estamos rodeados de tantas diversas flores, él tiene un jardinero, especialmente contratado para mantener su jardin en estas condiciones. Me indica que si hubiese tenido una hija le hubiese puesto de nombre Margarita como una de sus flores favoritas; por lo que lo tomaré muy en cuenta. 

Durante este tiempo, he pasado por varios estados emocionales, primero una profunda tristeza, luego mucho enojo por la traición de Rose, pero ahora, siento una terrible necesidad de estar cerca de ella, si ella se arrepintiera de haberme dejado por John, yo no dudaria en volver con ella, estar cerca en el nacimiento de nuestro bebé, pero ahora eso no depende solo de mí. Por las noches me duermo pensando en ella, recordando los momentos que vivimos juntos y tratando de entender, en que momento se terminó su amor por mí. 

Sin embargo, no puedo hacer nada al respecto, más que enfocarme en cuidar de mi padre y del bebé que pronto llegará a nuestras vidas. 

Mi padre ha hablado con mi madre de mudarse con nosotros a la finca, sin embargo ella se ha negado, también quiere estar cerca de mis hermanas y sobrinos, además nos ha dicho que necesitamos estar a solas para ponernos al día, por todos estos años que no estuvimos juntos. Mi padre, aunque no me lo ha dicho, sé que le ha proporcionado algunas cosas para hacer su vida más cómoda.  Ha enviado a reparar su casa, contratado una señora que cuide de ella y quincenalmente las abastece de alimentos.  Ella al principio se negó rotundamente, pero por la insistencia de mi padre, finalmente ha accedido. Todo eso me llena de mucha tranquilidad. 

Todo estos cambios en mi vida me han tenido muy ocupado, sin embargo no dejo de contar los días para el nacimiento del bebé y he planificado un viaje a Ataco para este fin de semana, quiero conversar con Julita y que me informé del estado de salud de Rose.




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