Sigo rebanándome los sesos pensando en porque el Doctor Scott actúa como si no hubiese estado en mi casa hace solo unos días cuidándome. Al día siguiente cuando desperté él ya se había marchado, dejo una nota en la cual decía que no debía olvidarme de tomar mis medicamentos y que tomara la sopa que dejo.
Eso removió algo en mi que preferí ignorar, hice lo que me dijo y me quede a descansar ese día. Ayer volví al hospital y pensé en traerle algo como agradecimiento, como no sabía que sería lo más adecuado agarre uno de esos chocolates que él había dicho que le gustaban a alguien, no sabía si se refería a él mismo o a alguien más pero aun así lo compre y le puse una nota de agradecimiento "Gracias" Ni siquiera le puse mi firma aunque solo lo deje en su mesa de trabajo al llegar a la sala, no tenía la cara para entregárselo de frente, lo estuve observando hasta que por fin entro en su oficina pero al salir y verme no me dijo nada ¿A caso no lo vio? O no le gustan esos chocolates... el transcurso del día fue normal... digo no esperaba que habláramos de ese día pero tampoco pensé que sería como si nada hubiese pasado.
Niego con la cabeza, no es que pasará "algo" agh, esto es tan confuso.
—Adhara ¿Me estás escuchando? —La voz de Lily me saca de mis pensamientos—. Hay una llamada urgente nos están esperando en la entrada.
Me ajusto la bata volviendo a mi rol profesional y camino junto a ella. Al llegar el doctor Scott está ahí de pie junto a la ambulancia hablando con uno de los paramédicos. Su expresión es seria y me pregunto que fue lo que paso.
Nos mira apenas llegamos y comienza a relatar lo sucedido.
—Cinco jóvenes. Accidente automovilístico —Comienza a decir acercándose—. Dos inconscientes, una con posible trauma, otra con fractura expuesta y la conductora con lesión en la pierna y todas en estado de ebriedad —Su mirada se posa en Lily y en mí—. Ustedes se encargan de la paciente con fractura y de la conductora. Lo demás estará a nuestro cargo pero también estaré supervisándolas así que no duden en su trabajo —Se da la vuelta para irse pero antes añade—. Confío en ustedes —Dicho esto se va a la ambulancia que llego.
¿Confía?
Me trago la sorpresa y asiento con firmeza. El doctor Scott tiene razón, este no es momento de dudar ya aprendí de mis errores pasados no pienso volver a regarla el día de hoy. La ambulancia llega, observo a Lily que parece estar serena por lo que doy una respiración profunda justo cuando las puertas de la ambulancia se abren de golpe y el caos se forma.
—¡Cuidado con su cabeza! —Grita Lily ya con los guantes puestos mientras ayudamos a bajar a la chica del asiento trasero. El hueso sobresale de su brazo y ella llora de forma descontrolada.
—Tranquila ya estás a salvo, aqui vamos a ayudarte —Le murmuro tomando su mano libre mientras la acomodamos sobre la camilla. Corro hacia la otra paciente que me explican que es la conductora y observo su pierna mientras recibo el informe del paramedico.
Veo que en eso Scott coordina con otro equipo la paciente inconsciente con traumatismo. Sus ojos se deslizan fugazmente hacia mí y aunque no dice nada está diciendo todo porque parecer ser un "Concéntrate" y eso hago.
Giro hacia la conductora y noto que aprieta los dientes con fuerza mientras intentamos movilizar su pierna.
—No puedo... no puedo moverla... —Dice con los dientes apretados.
—Fractura posible en el fémur izquierdo —Digo automáticamente levantando la cabeza hacia el doctor que no está lejos y en respuesta Scott asiente desde el otro lado sin intervenir—. Doctora Lily, necesito que me ayudes con el soporte para la pierna.
—Listo —Responde mientras se coloca del otro lado de la camilla.
La paciente sigue quejándose, su aliento apesta a alcohol y apenas mantiene los ojos abiertos parece que no entiende lo que le digo y solo se queja de que quiere vomitar cuando la camilla se mueve.
—Respira hondo —Digo una vez que llegamos y debemos trabajar con ella. No es la primera vez que veo un caso así por lo que el trabajo es casi en automático. La dificultad más que nada es ella en su estado, no me permito pensar de más ni tampoco pensar en que el doctor Scott está observándome desde algún lugar solo hago lo que sé y una vez que la pierna esta estabilizada y la paciente sedada la pueden trasladar a rayos X.
Ayudo a la enfermera a traerla de vuelta, mientras empujo la camilla me cruzó con Scott quien al verme no dice nada pero nuevamente solo me fijo en sus ojos que parecen hacerme un pequeño gesto de aprobación que logra enderezar mi postura. Sonrío por inercia y al percatarme de ello oculto mi sonrisa.
Al regresar a la sala Lily ya está con la otra chica, la de la fractura expuesta. La están preparando para cirugía pero hay algo que no me gusta en sus signos vitales.
—¿La presión bajó? —Pregunto mientras reviso el monitor.
—Sí, el doctor Scott viene para acá.
—Podría estar perdiendo más sangre de la que aparenta —Murmuro y ella asiente.
Scott aparece al instante como si hubiese escuchado mis pensamientos.
—¿Qué ves? —pregunta sin interrumpir.
—Sospecho de una hemorragia interna —respondo sin titubear.
Sorprendido asiente.
—Bingo. Pasante uno mantenla estabilizada y prepárala para una evaluación más profunda —Lily mueve su cuerpo por inercia actuando rápido—. Pasante dos te cubro mientras coordinas con cirugía —Asiento y me acerco para agarrar las hojas del informe, en eso siento que Scott se acerca y susurra—, buen ojo.
¿Buen ojo?
Mi corazón late con fuerza... ¿Está validando mi trabajo? Luego de esa vez que no fui capaz de hacer mi trabajo como es debido y titubee... esto se siente como una pequeña victoria. Más aún porque viene de él, alguien a quien admiro, volteo para ir al área de cirugía pero está vez sin ocultar mi sonrisa, creo que está vez ya será imposible hacerlo.
Cuando finalmente dejamos a las dos pacientes en manos de cirugía, nos detenemos un segundo en la sala de descanso. Lily se deja caer en una silla.