Doña Olga: pues que se diviertan y no manejes muy recio.
Piyi: No se preocupe Doña Olga, Yo no soy de esos, además no voy solo, así que tampoco pondría en peligro a mi compañía y no se preocupen por Antonela que la voy a cuidar bien.
Estela: de eso no hay duda.
Estefanía: Adiós, espero volver a verte pronto.
Piyi: así será, pues nos vamos, adiós...
Antonela: adiós.
Todos: Adiós.
••••••••••
Horas después.
Culiacán Sinaloa, México. Casa de seguridad.
Piyi: llegamos.
Antonela: ¿aquí vives?
Piyi: no siempre, pero sí.
Antonela: Ah, cierto que la gente como tú, vive cambiando de casa todo el tiempo.
Piyi: esta será la casa en donde nos quedaremos.
Antonela: ¿y es seguro estar aquí?
Piyi: por supuesto, si no no te hubiese traído.
Antonela: okay.
Piyi: ven que te enseño Cuál será tu cuarto.
Antonela: okay.
Piyi: este será tu cuarto, Está al lado del mío por cualquier cosa.
Antonela: Muchas gracias.
Piyi: tú acomódate si quieres, mientras yo voy a comprar para comer.
Antonela: ¿me vas a dejar sola aquí?
Piyi: Sí, pero voy y vuelvo rápido, No te preocupes.
Antonela: está bien, dije no muy convencida.
cuando Jesús se fue a comprar, yo me puse a acomodar mis cosas y cuando terminé, bajé a la cocina para ver si había algo para comer...
Nini: buenas.
Antonela: Hola, dije con timidez.
Nini: ¿Qué haces aquí?
Antonela: vine con Jesús.
Nini: ¿Jesús? Ah, el Piyi, ya me había olvidado que se llamaba así el cabrón ¿entonces tú debes de ser la famosa Antonela no?
Antonela: sí, Antonela Gomez, mucho gusto.
Nini: ¡lo consiguió nomás el cabrón!
Antonela: ¿Cómo dice?
Nini: Eh... que primero me hables de tú, yo soy Néstor, uno de los compas o mejores amigos de Jesús, mucho gusto.
Antonela: igualmente.
Nini: ¿y en dónde anda ese wey?
Antonela: fue a comprar comida, yo estaba buscando aquí en la cocina algo para comer, pero no hay, solo botellas de alcohol.
Nini: ¡Ay qué vergüenza contigo! vas a pensar que somos todos alcohólicos, pero no, es que tuvimos una fiestecilla hace poquito aquí en la casa de Jesús, pero chsss, no le digas nada, Es un secreto.
Antonela: Jajaja No le diré nada, no te preocupes.
Nini: definitivamente nos vamos a llevar muy bien tú y yo.
Piyi: ¿Qué haces aquí wey?
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