Llegan a casa de su madre, se bajan del auto y van a tocar el timbre. Sale Mary, una mujer anciana de unos 75 años pero con energía de una joven. -Abuela- dicen los dos al verla. La abrazan y entran.
-¡Mamá, te traje una sorpresa!- grita Josh.
-Hola hijo, ya salgo en un momento que termine de preparar la cena- También grita Meck, la madre de Josh.
Los visitantes se sentaron en el sillón junto a su abuela a conversar, hasta que salió Meck y dice -¡Hijo mío!- sale corriendo a abrazar a Fernando. Las lágrimas de felicidad en los ojos de la señora no podían faltar. -¿Cuándo llegaste y por qué no nos avisaste para haberte ido a recoger al aeropuerto?- Pregunta la madre.
-¡Ay mamá, quería ahorrarles el viaje! Me vine directo a donde estaba Josh y que él me traiga- responde Fernando.
-Es verdad, me cayó de sorpresa en la universidad- dice Josh.
-Vengan, vamos a comer- dice Meck.
Todos van a la mesa y se sientan. Meck sirve la comida. -Y ¿cómo te va en la escuela por allá? Pregunta Mary.
-¡Abuelita, es muy difícil! Aparte no tengo familia por allá- dice Fernando.
-Pero...¿y tu padre?- pregunta Meck.
-Él sólo pasa trabajando, es muy ocupado. Cuando me levanto sólo encuentro dinero en la mesa para la escuela y no lo veo cuando se va y peor cuando llega- cuenta Fernando.
-Sabes que él trabaja para darte el mejor estudio y tienes que aprovecharlo. Papá no hizo lo mismo por mí, así que aprovecha- Dice Josh.
-¡Es verdad hijo! Aprovecha la oportunidad. Mira a tu hermano, él sólo se está esforzando por salir adelante. A pesar de los problemas que hemos tenido- Dice Meck.
-¡Lo sé mamá! Pero es muy difícil estar sólo en un país donde no conoces a nadie y saber que las personas que amas están muy lejos. Además, les quiero decir que he tomado la decisión de….- Fernando se queda en silencio unos segundo. -acabar la escuela aquí en Carima-
-¿¡Qué!? Claro que no, terminan tus vacaciones y te regresas a Europa a terminar tus estudios- Dice Meck un poco exaltada.
-¡Mamá, por favor comprende! Quiero estar con ustedes aquí es donde pertenezco- dice Fernando.
-Lo siento hijo pero no te estoy pidiendo de favor que te regreses, ¡Es una orden!- dice Meck.
-¡Ya se calman todos!- dice Mary tratando de apaciguar todo.