Capítulo XLII

-¡No, jaja mi cuerpo no es como el suyo! - dice Josh esquivando las manos de Bend para que no le alce la camisa. De pronto, Bend lo abraza por la espalda y Josh se queda quieto. Sintiendo el respirar de su profesor en su cuello. Se empiezan a mover como en un baile de vals. Los dos sonríen y Bend lo pone de frente a Josh. Le agarra la cara y le acaricia la mejilla izquierda. Josh estaba nervioso. Bend le sonríe y poco a poco se acerca para besarlo, pero Josh se aleja. - ¿Qué pasó, no te gusto? - pregunta Bend arrugando la cara.

-Profesor, es que… - Josh se queda pensando con su cabeza agachada. De repente Bend le alza la mirada y lo calla con un beso. El joven sólo abrió los ojos de la impresión, pero no se quitó y simplemente se dejó. Bend lo deja de besar y lo ve sonriente a Josh. - Gracias - dice Bend.

-¿Por qué? Pregunta el joven.

-Por haberme dejado probar tus labios- responde Bend.

En ese momento Josh lo besa muy rápidamente y no lo suelta. Ahora el sorprendido era Bend, quien sin dudarlo continuó besándolo. Poco a poco Bend le saca la camisa a Josh, para acariciarle su abdomen. Josh desliza sus manos muy lentamente por la espalda del profesor. El momento se estaba tornando romántico y candente, hasta que Bend empieza a sacar sus colmillos de vampiro y sus ojos se hacen rojos. Josh se da cuenta y se asusta, pero Bend lo ve directo a los ojos y le dice que no le tema, que sólo se deje llevar y que nada malo le va a pasar. Josh se queda totalmente quieto y Bend empieza a descubrir que puede hipnotizar a las personas para que hagan su voluntad.

Josh y Bend se siguen besando como dos amantes destinados. Se sacan el pantalón y quedan en bóxer, mirándose fijamente Bend lo lleva hasta su habitación y lo acuesta en la cama. Se le tira encima y lo sigue besando, poco a poco va bajando sus labios por el abdomen de Josh, quien sólo acariciaba el cabello de Bend. Le saca el bóxer y empieza a satisfacerlo oralmente a su chico. Josh se agarraba de la cama del placer y remordía sus labios con los cerrados. Bend se levanta y alza las piernas de Josh y despacio va entrando en él. Gemidos se escuchan y el placer invadía el lugar. Josh hala a Bend mientras él seguía con el va y ven de sus cuerpos. El tiempo en ese lugar era eterno, Bend acaba con su excitación y Josh también. Los dos acostados en la cama abrazados, pensando, pero lo más loco de esto es que pensaban en Denise. Como si sus mentes estuvieran unidas por alguna conexión psíquica. Pero lo que en realidad pasaba es que los dos estaban enamorados del mismo hombre.