Amor entre Deidades

12. Akira

Los días iban pasando y el embarazo de Caillech se hacía más notable, cuando los demás familiares se enteraron del estado de Caillech todos fueron a verla con una alegría. Emocionados con la noticia mientras que toda su familia reía ella tenía los nervios de punta, pronto llegaría Cefíro con Arán y temía que se hiciera un escándalo  

—¿Te encuentra bien? —escucho a su esposo —. Pareces ansiosa ¿Tienes algún malestar?  

—No, solo quiero pedirte un favor  

—Si —dijo con una sonrisa  

—Prométeme que no cometerás una locura hoy  

—Parece que no me conoces yo no… 

—Hola hermano  

Escucharon la voz de Cefíro al mismo tiempo que el silencio reinó en la sala. Eliseos volteó con una sonrisa que se le borró al verla  

—¡Te voy a matar!  

Grito Eliseos la ver el vientre abultado de su hermana 

—Eliseos, por favor —pido entre lágrimas su hermana —. Esto… 

—Lo siento Eliseos, pero ya no hay marcha atrás  

Dijo impidiendo que ella soltara algo que no debía, mientras Caillech trataba de que su esposo no se agarrara a golpes con su tío  

—Eliseos, por favor prometiste  

—Yo no he prometido nada  

—¡Basta! —grito el rey —. ¡Eliseos, Arán! Al despacho ahora  

Ellos se alejaron mientras Cefíro empezaba a llorar mientras su cuñada la abrazaba  

—Tranquila, mi abuelo lo resolverá  

En eso Reluminium y su hermana hicieron acto presencia, cuando de la nada el pequeño Ryu estaba parado frente de ellos mostrando sus ojos centellan en un rojizo escarlata. Caillech pensó que era por sus hijos ya que lo mismo había pasado cuando se enteró. Pero no por que solo miro a su cuñada antes deponer sus manitas en su vientre  

—Akira —susurro en un tono tan bajo que apenas lograron escuchar  

—Ah —se quejó Cefíro al sentir como su bebé se removió ante aquella voz  

—¿Estas bien? —pregunto Caillech preocupada 

—Si, solo ¡ah! —se volvió a quejar con una sonrisa cuando volvió a moverse  —, solo se esta moviendo. Y solo pasa cuando él habla  

Miro al niño con una sonrisa y el niño le devolvió la sonrisa  

—Es que ella me reconoce —dijo aún sin quitar su mano de su vientre donde el bebé volvió a moverse  

—¿Ella?  

—Si, Akira —sonrió  

—Felicidades —la felicitó Perséfone —, por tu luz brillante 

—Gracias, ¿A que se refiere con que lo reconoce?  

—Son cosas que aún no me son reveladas, pero no te preocupes… no es nada malo —sonrió mientras acariciaba el pelo de su hijo —. Ya Ryu, déjala descansar 

—Pero mamá, está feliz de sentirme —sonrió —, será muy hermosa 

—Mi amor también tiene que descansar  

—Esta bien –poso nuevamente sus manos en su vientre —, luego vendré a verte —le dijo mientras ella se movía se acerco y susurró sobre el vientre —. Yo te protegeré serás mi amada reina  

Con eso de alejo dejando una sonrisa en los labios de su madre. Mientras que en el despacho Eliseos trataba de no perder los estribos con quien sería su cuñado eso si antes no la dejaba viuda  

—Enserio Eliseos, te prometo que los cuidare con mi propia vida, ella y mi bebé estarán a salvo a mi lado  

—En eso si puedo afirmarlo —hablo Reluminium recargado en la pared  

—¿Cuándo llegaste? —pregunto Arán  

—Desde que empezó la discusión  

—Podías haber intervenido —lo vio negar  

—Que mi esposa pueda predecir el futuro no quiere decir que podamos involucrarnos —se acerco a ello y miro a Eliseos —. Cuando evitas lo que ya está escrito, cosas  terribles pueden pasar  

Tanto Eliseos y Arán pudieron notar el dolor en su voz pero no imaginaban la magnitud mientras que el rey suspiraba sabiendo perfectamente de lo que él hablaba  

—Me gustaría hablar contigo Arán 

Reluminium y el rey se dieron miradas fugaces y tras un asentimiento el rey se llevo a Eliseos dejándolos solos  

—¿De que querías hablarme? 

—Tienes que dejarla —fue lo único que fijo  

—No lo haré  

No había necesidad de decir de quien hablaba, ellos sabían perfectamente  

—No será feliz aquí  

—Mientes  

Reluminium tomo la nota que estaba en el escritorio de Eliseos  

—Fue escrito por su puño y letras  

Él tomó aquel pesado de hoja mientras reconocía la letras y negaba con cada párrafo que leía  

—Tu lo escribiste —negó —, no hay manera que sea verdad… no sería capaz y menos después… 

—Es la verdad, esta escrito por su puño y letra no puedes negarlo menos después de tu compromiso  

—Tu sabes por que me caso con Cefíro puedes explicarle… 

—No, uno no puede interferir en lo que esta escrito  

—¡Entonces esta escrito que ella me deje! —golpeo la mesa —. Entonces que caso tiene que me haya enamorado de ella, para que luego me abandone. ¡Me niego!  

—Aunque no quieras, y intentes evitarlo se ir de tu lado —afirmó —, no se lo hagas más difícil y solo déjala ir  

Salió dejándolo con lágrimas saliendo de sus ojos, mientras que estruja la hoja contras su pecho  

Hola mis queridos lectores siento estar desaparecida estos días, pero aquí les traigo otro capítulo. Se que puede ser que hay puntos que se pirden por ejemplo sobre la hermana de Eliseos pero eso se aclara en el siguiente libro que llevara por nombre "Amor entre cenizas " 

Sin más espero que el capítulo se de su agrado, hasta la próxima 




 




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