Él es Aragón Jael, un conocido joven de 24 años de familia adinerada y ella es Cherryl Villasanta, una estudiante universitaria de 19 años. Se la pasaban muy bien juntos y siempre demostraron su amor el uno por el otro, incluso cuando las circunstancias los obligaron a estar separados por
un tiempo.
Las verdaderas complicaciones comenzaron cuando Anahi, la directora general de la importante productora de vinos y licores Cherryel, descubrió a través de su asistente personal que su hijo Aragón estaba en una relación con una chica, su pensamiento era que su hijo no podría estar con cualquier mujer porque era el heredero todo lo que ha trabajado durante de los años.
Han pasado 3 meses desde que Cherryl empezó a visitar la casa de Aragón y las cosas se complicaron mucho entre ellos porque él creyó en todas las cosas que su madre le decía y le hizo creer que quien mentía era ella.
A medida que aumentan los problemas, todavía cree que su madre y sus propios
rumores inventados sobre Cherryl.
La madre de Aragón finalmente le presenta a Mia, a quien elige como su futura nuera. Tiene claro que ya tiene novia, pero a Anahí no le agrada.
Aragón decidió mudarse lejos de su familia y formar una con Cherryl. Dos meses después de que ella tomó la decisión de separarse de él porque había permitido que su madre interfiriera en su relación, pero el destino les dio una gran sorpresa de convertirse en padres y se regocijaron con
la noticia. Sin embargo, cuando la madre de él se enteró de la situación decidió intervenir porque no creía que esa mujer mereciera tener a su hijo y su futuro nieto.
Paso un tiempo, Cherryl tiene 5 meses de embarazo y una salida con sus amigas como habían acordado, esperando en el lugar a ella la secuestran haciendo que se desmayara. Pasan unos días y despierta en una casa desconocida, en el último momento ella se desmaya nuevamente y al despertar estaba en el hospital donde le informan que había perdido a su bebé y Aragón no está con ella.
Amelia no podía comprender lo que estaba sucediendo, se pregunta ¿Por qué Aragón no estaba con ella en ese momento? Ella lo llama a su teléfono, pero él simplemente la menosprecia, le pregunta ¿cómo pudo haber hecho tal cosa?, le dice que no lo busque más y lo deja en paz.
Amelia queda sorprendida por aquellas palabras dichas con odio y rencor, hizo que su corazón se fragmentara y solo pudiera sentir desprecio por aquel hombre que la dejo sola en ese momento tan difícil de su vida, lo que aumentaba el dolor por la perdida de su bebé hizo que quedara en un silencio absoluto.
Aunque pasa el tiempo, ella no ha podido olvidar aquel desprecio hecho por el hombre que consideraba el amor de su vida y llevaba muchas historias juntos, además del dolor por el hijo que no pudo conocer y tener en sus brazos.