04. ATAQUE

Para que no hubiera dudas o malentendidos  decidieron elaborar un contrato; bueno, en realidad era para tener una manera de evitar que Edward Pitt se quisiera pasar de listo. Eso era lo que en realidad pensaba Angelinna.

— " Chak", hay que terminar lo más pronto posible con esto— dijo el señor Pitt mientras hacía un ademan con la mano al pelirrojo para indicar que se acercara.

Este, al llegar a su lado, chasqueo los dedos, al instante apareció frente a ellos una mesa de cedro fino con todo lo necesario para la elaboración y firma del acuerdo, chasqueo de nuevo y esta vez llegaron dos sillas, en una se sentó él y en la otra Edward.

Como desconfiaba un poco de los otros tres presentes, pidió a "Chak" que les lanzara un encantamiento burbuja. 

— ¡Afrizo!— murmuro "Chak" entre dientes y con un tercer chasquido lanzó sobre los otros una burbuja gigante que cuando los toco, en lugar de reventarse los jalo hacia adentro dejándolos encerrados en ella sin ser capaces de oír y sentir nada.

Una vez hecho esto, el señor Pitt empezó a dictarle los puntos del acuerdo, Angelinna algunas veces lo paraba para decir que no estaba de acuerdo en algunas partes. Ya listo el documento quedo de la siguiente manera:

ACUERDO:

Parte A: EDWARD PITT

Parte B: ANGELINNA BROWN

1. La Parte A se compromete mediante este conducto, a devolverle a la Parte B toda su herencia. (Dinero en efectivo, cuentas bancarias y propiedades).

2.- Así mismo, para que la Parte B tenga el acceso a todos sus bienes, está en la obligación de entregarle en un plazo máximo de  1 mes una esmeralda con las siguientes características a la Parte A. 

CARACTERISTICAS: ESMERALDA 

Tipo: Gema 

Peso (quilates) 3.71 cst

Talla (forma) Perilla 

Firma  Parte A                                                                        Firma Parte B
 

Cuando las partes estuvieron conformes procedieron a la firma.

— ¡Listo!— dijo un tanto fastidiado el señor Pitt, quien no se imaginó que el negociar con Angelinna fuera tan difícil. Le pasó todos los papeles a "Chak" para que los guardara y se dispuso a pararse para irse, de aquel asqueroso sitio que no le causaba más que repugnancia.

—Encárgate que todo este desastre quede listo antes de irte, "Chak"—, le ordeno Edward a este en tono autoritario mientras se iba acercando con aire imponente a la salida—. Ah y algo más, recuerda que también tienes que hacer que la "Operación T" salga sin contratiempos— dicho esto abrió la puerta y desapareció tras esta.

En lo que Edward le daba órdenes a "Chark", Angelinna, se preguntaba si por fin podría salir de allí, ser libre y pensar en un plan que le ayudara a cumplir con el acuerdo que acababa de firmar.

— ¡Sputare!— grito "Chak" chasqueando en dirección a la burbuja, al decir eso la esfera dejo escapar uno a uno a sus prisioneros; eso saco a Angelinna de sus pensamientos y no pudo más que admirar fijamente a ese extraño pelirrojo.

No lograba entender como a pesar de ver que era capaz de hacer lo que quisiera tan solo con un chasquido, no le tenía miedo, al contrario solo quería seguir viéndolo.

— ¡"Lince", ve a la "ruta S", asegúrate que nadie te vea, recuerda lo que paso la última vez!— en cuanto termino de hablar "Chak", "Lince", que mientras escuchaba no podía dejar de mostrar su desagrado ante estar recibiendo ordenes de alguien a quien odiaba, se dio media vuelta patio al aire y desapareció.

— ¡Chale, "Lince" todavía sigue enojado, desde que paso aquello no te perdona!— exclamo "Snake", una vez que "Lince" desapareció.

-JA, JA, JA—, empezó a reír "Chak"— el sonido de su risa causo que Angelinna por primera vez desde que había muerto su padre se sintiera contenta—. ¿Perdonarme, él a mí?, "el que debería estar diciendo eso soy yo y no al revés—; la manera en que hizo aquel comentario le advirtió a "Snake" que no debería seguir hablando de ese tema si quería mantener su cuerpo completo.

—Basta de estar perdiendo el tiempo, volvamos a cosas útiles—, continuo este— "Snake", te encargaras de la "ruta F".

—Cuenta con eso— respondió "Snake fuerte y claro y simplemente se esfumo sin más.

De los tres hombres que estuvieron con Angelinna desde el principio ya solo quedaba el "Gordo", eso de alguna manera la ponía nerviosa, no comprendía porque, pero así era.

—"Gordo", desátala, limpia este desastre y cuando termines reúnete con "Snake" y recuérdale que no se le debe pasar la mano con los desgraciados esos—, para ese punto "Chak" se veía cansado, ya que se la pasaba mirando al suelo y masajeándose la sien con los dedos.

Cuando termino de dar las ordenes al "Gordo", "Chak" dio un largo suspiro y con un último chasquido desapareció.

"Gordo", se acercó para desamarrar a Angelinna, esta no podía estar más confundida, por un lado estaba feliz de poder irse por fin de ahí, pero por otro sentía un hueco en el estómago que no sabía a qué se debía.

— ¡Lárgate de aquí, sino quieres que de verdad te dé un motivo para que no te puedas mover en un buen tiempo!— debió de haberse quedado un buen rato parada como tonta después de que el "Gordo" la desatara, para que este le dijera eso.

Antes de que el "Gordo" tuviera oportunidad de agregar otra frase más a su amenaza, Angelinna salió corriendo de ahí lo más rápido que pudo.

Era libre, sentía el aire fresco, la luna brillaba de manera excepcional en el cielo, al mirarla tan radiante desde su cautiverio, pensó que nunca fue verdaderamente consiente de su hermosura hasta ahora.

Aunque, a causa de todo el tiempo que paso atada sus movimientos eran torpes y varias veces estuvo a punto de caerse, eso no impidió que siguiera sin detenerse. Estaba tan feliz de estar disfrutando del bosque que caminaba sin mirar a donde iba.