Poniendolo en su lugar

No entiendo que pasó de repente, pensé que todo estaba bien entre nosotros y ahora se comporta como un cretino. Odio estar llorando por esto, pero me lastima tanto que siento que me falta el aire. Vlard Moors si piensas que con esto me vas a detener pues déjame decirte que tú tampoco me conoces lo suficiente.

Lavo mi rostro, arreglo mi cabello y salgo dispuesta a demostrar lo fuerte que soy, si así quiere comportarse pues yo también puedo ser una perra egoísta.



Los días siguientes cada mañana dejo un bombón en su escritorio y una pequeña nota, esperaba que al menos siguiéramos con las clases nocturnas, pero obviamente me cortó de lleno. Que bueno que soy una flor silvestre, esa que florece incluso en sequía.

- Veo que tienes una admiradora secreta, todos los días tienes un presente. Que envidia aunque de seguro es una alumna y es mejor no buscar problemas.

- No sé quién es y no me importa saberlo.

- Pero tampoco es para que lo arrojes a la basura. Me lo hubiera comido yo.

- Déjate de tonterías Betty tú misma lo dijiste lo mejor es no buscar problemas.

Ayla por favor detente, no sigas haciendo esto más difícil y simplemente ríndete así como lo hice yo. Mientras camino por el patio de la escuela siento que alguien me jala con gran fuerza hacia un rincón, es idéntico a ese día en la calle.

- Que crees que estás haciendo ahora.

- Tenemos que hablar.

- Ya hablamos y hacer esto es una falta de respeto a tu superior.

- El problema es que mi superior me está volviendo loca porque es el hombre más guapo que jamás volveré a ver en mi vida. El problema es que ese superior me dio falsas esperanzas confesando sus sentimientos y luego huyendo como un cobarde dejándome confundida y dolida. ¿Quieres más?

- Nunca dije que estaba dispuesto a estar contigo Ayla. Fue un momento de debilidad ante una alumna y la tentación que eso implicaba, pero tengo una buena vida, sueños y metas que no voy a tirar por una calentura del momento.

Siento la fuerte cachetada que me da y claro que me la merezco, incluso se quedó corta y manejo su fuerza para no lastimarme mucho.

- Eres un desgraciado.

- Soy sincero.

- No lo eres, nunca lo fuiste y nunca lo serás porque a la persona que le estás mintiendo no es a mí sino a ti mismo.

- Puedes pensar lo que quieras Ayla si eso te ayuda a asimilar el rechazo.

Veo como alza su mano y cierro los ojos esperando el segundo golpe, pero me sorprende al sentir un fuerte dolor en mi ingle, Ayla no me dio una bofetada, me dio un rodillazo que me deja de rodillas.

- Perdón profesor, pero alguien me enseñó donde duele más y quería poner en práctica sus buenas enseñanzas.

- Tú....

La veo darme la espalda mientras se va y yo me quedo tirado intentando recuperar el aire. Ja ja ja creo que está vez si la hice enojar demasiado, me lo merecía eso no lo voy a negar. Espero que con esto Ayla se aleje definitivamente de mí.

Camino despacio hasta llegar a mi oficina y me desplomo en mi silla recordando el rostro de Ayla al escuchar todas mis mentiras y ella tiene razón me estoy mintiendo a mi mismo porque la amo con locura y hacerla sufrir me está matando a mí más que a ella.

- Que te pasa Vlard tienes una cara como que alguien te dio un golpe bajo.

Mi cara de asombro me delata de inmediato. ¿Acaso Betty vio todo lo ocurrido? No, eso es imposible.

- Que quieres Betty.

- Aquí te traigo la invitación a la fiesta del Instituto y desde ya te digo que es obligación de todos los profesores asistir. Este año no vas a poder escapar.

- Lo odio.

- Tienes que asistir ya sabes que los altos mandos están presentes.

- Nos obligan a vestir de gala como si fuéramos pingüinos.

- Oye es lindo vestir como si fuéramos millonarios al menos una vez al año.

- Como digas.

- Porque no llevas a mi amiga como tu acompañante, ella me dijo que se quiere disculpar contigo, pero no le das la oportunidad.

No quiero saber nada más de esa mujer, pero Ayla al igual que todos los estudiantes estarán presentes también así que lo mejor para matar todas sus esperanzas es que me vea con alguien más.

- Bien dile que si está disponible, pero Betty no quiero que ella malinterprete esto.

- No entiendo que te cuesta darle una oportunidad al amor, no digo que sea justamente con ella, pero sabes no es tan mal tener a alguien quien te quiera y te abrace. Que este para ti.

Después de lo sucedido ya no quiero saber nada más del amor, si no es con Ayla no quiero estar con nadie. Solo la quiero a ella en mi vida y si eso no es posible entonces significa que mi destino es terminar solo.

- Lo tomaré en cuenta, gracias por tus palabras Betty.

- Me alegra ayudar, ahora ve que tus estudiantes ya tienen que estar todos en el salón.

Solo quedan pocos meses para las competencias y después de eso el siglo electivo terminará. Ya no la voy a volver a ver cuando eso suceda.

Camino por los pasillos mientras observo a través del cristal, Ayla al notar mi mirada me da la espalda y sigue en sus cosas, no sé dé que me quejo si yo mismo provoque todo esto.