Ilusiones destrozadas

No puedo creer que imbécil resultó ser Vlard, a que le tiene tanto miedo si yo estoy dispuesta a dejar todo por él... Ah nunca me sentí así por nadie más y ni siquiera entiendo por qué estoy dispuesta a llegar tan lejos por un hombre al que no conozco tan bien.

Como se atreve a decir que soy una calentura del momento, tendría que haberlo golpeado más fuerte para que no le sirva aunque quiera.

- Ja ja ja ja.

- ¿Estás bien Ayla?

- Ayúdame a elegir el vestido más lindo y sexy que encontremos Ross.

- Porque de repente.

- Porque le quiero mostrar una lección a alguien que jugó con mis sentimientos.

- Cuando estás enojada das miedo.

- Elige algo lindo para ti también porque serás mi acompañante.

- Sabes que esto solo le da más alas a nuestros padres.

- Si fracasó está noche no me quedará de otra que casarme contigo.

- Y lo dices como si no fuera nada.

- Yo sé que aunque no te guste la idea de todas formas lo vas a hacer por tu deber hacia tu familia y yo prefiero que seas tú alguien a quien conozco muy bien a alguien que no conozco en lo absoluto.

- ¿De verdad estarías dispuesta a casarte conmigo?

- Si tú quieres.

Entonces deseo que todo salga mal está noche, porque mi secreto más profundo es que te amo Ayla y nada me haría más feliz que ser tu pareja por el resto de mi vida. No sé contra quien estoy compitiendo, pero no me importa porque ya voy ganando y todo porque de seguro ese animal es un idiota incapaz de ver la grandiosa mujer que eres mi bella Ayla.

- En que piensas tanto.

- En lo contentos que van a estar todos con la noticia.

- Hey dije que si fracasó me casaría contigo.

- Sé que no estás acostumbrada a fracasar, pero hay veces en que es inevitable y no puedes forzar a las personas a quedarse cuando se quieren ir.

Este tonto tiene razón, si es verdad que yo no significó nada para Vlard es estúpido de mi parte aferrarme a él cuando quiere irse lejos de mí. Esta noche definirá nuestros destinos si Vlard me rechaza nuevamente entonces lo dejaré ser feliz y yo volveré a mi vida habitual.

Una vida solitaria, aburrida siguiendo la voluntad de los demás olvidandome de mi misma, pero no puedo ser egoísta no porque mo vida sea así puedo obligar a otra persona a sufrir a mi lado.

- Quiero este vestido.

- ¿De verdad?

- Tú llevate ese así vamos a juego.

- Tus papas también van a estar presentes.

- Y me van a recordar que me quedan pocos meses antes de volver.

Es verdad el año casi acaba y con el mi última oportunidad de libertad, no importa si lo hago grandioso en las eliminatorias de todas formas no podré seguir en el Instituto aunque si lo pienso bien es mejor así porque me dolerá mucho seguir viendolo todo los días. Esa sería la peor tortura..

Con el salón finamente decorado llegó del brazo de Ross mientras las chicas se apresuran a saludar al apuesto chico que me acompaña.

- Ayla incluso es más lindo que el profe Moors. Te lo tenías bien escondido mala amiga.

- ¿Más apuesto que el profesor Moors?

- Bueno nadie es mal lindo que él, pero ya nos destrozo las soluciones a todas. Mira vino acompañado con una hermosa mujer y no deja de sonreír.

Volteo mientras mi corazón se acelera, él también me observa en el preciso momento y me da una sonrisa de triunfo absoluto. ¿De verdad no te importo en lo más mínimo?



La mujer a su lado es la misma de aquella vez, esa que dijo no significar nada para él, esa que juro no importarle y aquí están juntos nuevamente como en esa ocasión. Ella tomada de su brazo como una perfecta pareja mientras yo estoy en el otro rincón apartada.

Veo como esa mujer lo toma del cuello y le deja un beso en sus labios, labios que ni siquiera yo me atreví a besar. Esta claro la que no significa nada para Vlard soy yo.

Salgo corriendo con mis ilusiones rotas, con mi alma hecha añicos y mi corazón destrozado. Nunca más volveré a amar, nunca más dejaré que alguien me lastime de esta forma tan ruin y miserable. Corro hasta que mis pies duelen y me dejó caer al piso mientras no puedo evitar llorar desesperada.

Porque tiene que doler tanto, siento como el aire no llega a mis pulmones y todo gira a mi alrededor mientras no dejo de pensar en ese beso que no fue mío. Nunca va a ser mío y duele, quema, lástima tanto que siento que muero.

Ni siquiera mis poderes hacen que el dolor desaparezca, al contrario, es como si estuviera desangrándome aquí mismo. Porque Vlard, porque tenías que hacerme tan miserable, porque tenías que lastimarme tanto si yo lo único que quería era amarte y estar siempre a tu lado. Porque...