Una noche de diciembre, como me era costumbre, los visité a altas horas de la noche, pues como sabrán los vampiros no podemos salir a la luz del sol; me encontraba aun a muchos metros de distancia cuando un aroma a sangre hizo detener mi paso, me pareció extraño pues el aroma era fuerte, concentre mis sentidos para buscar el origen, y me alarme al descubrir que venía de la casa de Henry, corrí lo más veloz que pude y al llegar me cruce con una escena que aun hoy en día, no puedo olvidar.
Henry se había convertido en un gran amigo, casi un padre para mí, los consideraba familia, y el verlo ahí, tirado en la nieve, me dejo en shock; no pude pronunciar palabra ante tal escena, su cuerpo estaba inerte en el suelo y una gran mancha de sangre había teñido la nieve en un rojo carmesí; solo pude sentir como Emily corrió a mis brazos buscando consuelo, su llanto era terrible y el dolor en su corazón era casi tan grande como el mío, me atrevo a decir que incluso mayor, pues yo mejor que nadie se lo doloroso que es perder a las personas que amas: intente calmarla pues no entendía nada de lo que había pasado, y un poco más recupera comenzó a explicar los sucesos que llevaron a tal acontecimiento, sus palabras eran torpes y entrecortadas, lo que me dijo fue devastador.
Esa noche Henry como de costumbre se encerró en su alcoba para estudiar algunos remedios, unas horas después Emily entro para llamarlo a cenar, pero el insistía en que no podía tomar descanso alguno, estaba a punto de un gran progreso, Emily conocía bien a su marido, una vez que se le metía algo en la cabeza no existía fuerza en este mundo que lo hiciera cambiar de opinión, así que solo salió y se dedicó a alimentar y dormir a Lía; cuando la pequeña estaba dormida salió Henry con una sonrisa en su rostro, le conto algunas cosas a Emily que ya no recordaba por el shock del momento, aún no había terminado de hablar cuando llamaron a la puerta, les resultó extraño pues ya era tarde y no solían recibir visitas, Henry creyó que se trataba de alguna persona enferma con alguna emergencia así que abrió sin dudar; pero al hacerlo se encontró no con un enfermo como el esperaba, sino con casi todos los hombres del pueblo.
-Buenas noche Henry – hablo el jefe del pueblo, su mirada era fría y su voz firme – ¿podemos hablar unos minutos?
-Claro, pasen, mi esposa les servirá algo de tomar – dijo dirigiendo una mirada a su esposa, quien saludo cordialmente a los invitados sorpresa.
-Hablemos afuera, queremos hacerte unas preguntas – dijo tajantemente – a solas -
-Está bien, salgamos – Henry salió y cerró la puerta a su paso, le desconcertaba el actuar de su jefe, una vez afuera se podía percibir un ambiente pesado, todos lo miraban como analizándolo -¿de qué querían hablar? -
-Henry- comenzó a hablar aquel hombre, su voz era glacial - siempre has sido un hombre respetado por todos, benevolente y honesto, así que espero que no mientas en esta ocasión -
-Siempre he sido honesto, no tengo nada que ocultar, que es lo que quieren saber -
-Hace casi un año, en el callejón que esta frente a la iglesia, tu... ¿ayudaste a quien estaba ahí? - pregunto con voz seria, pero solo recibió silencio como respuesta – te lo preguntare otra vez, ¡¿ayudaste a aquel vampiro esa noche?! -
-¡Si!-admitió Henry con valor, cerrando sus puños con fuerza – estaba sufriendo, no podía dejarlo ahí -
-¡Es un vampiro Henry! ¡mato a mucha gente! ¡¿cómo pudiste ayudarlo?! no merecía compasión - grito uno entre la muchedumbre.
-Te equivocas, todos ustedes lo hacen, el no mató a nadie, es bueno, se los aseguro –
-No, tú eres el que se equivoca, es un asesino que debió morir aquella noche -
-No hay pruebas de lo que dicen, solo son suposiciones -
-¿Eso crees?, pues la verdad es muy distinta, ¿sabes porque lo atacamos esa noche?, fue porque una joven perdió a sus padres en manos de ese monstruo; la encontraron huyendo de algo, estaba muy asustada y pedía ayuda a gritos, ella presenció con sus propios ojos como los mataba, logro huir de milagro; nos contó todo y le dijimos que estaría segura con nosotros, apenas y se estaba calmando cuando ese vampiro la encontró, todos en el pueblo lo confrontamos, el muy cobarde huyo al ver muchos de nosotros, pero logramos atraparlo, no era tan fuerte como lo creíamos, y pensamos que estaba muerto, por eso lo dejamos, queríamos incinerarlo al día siguiente, para que pagara su crimen pero ya no encontramos su cuerpo; esa chica perdió a su familia y tu rescataste al asesino, no sabíamos a cuantas personas había matado ya, pero es seguro que muchas más murieron por tu culpa, no hay dejar vivir a ese monstruo – replicaba furioso.
-No, eso no es verdad, Jackson no es un asesino, el jamás le haría daño a nadie, debe haber un error, les aseguro que no es así, de lo contrario mi familia y yo no estaríamos aquí, ni ustedes, si él fuera la clase de monstruo que aseguran es, hubiese buscado venganza, pero no fue así, ya paso casi un año y no ha muerto o desaparecido nadie, ¡¿cómo pueden seguir acusándolo sin pruebas?!, ustedes no lo vieron, y la chica no pudo haber huido de un vampiro con tanta facilidad, su historia no tiene lógica-
-¡¿Como puedes seguir defendiéndolo?!, es absurdo –exclamó furioso y luego de unos segundos dijo - dime la verdad Henry, ¿te está amenazando?, si esa así podemos ayudarte, di la verdad y te perdonaremos, dinos donde esta -
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Editado: 30.08.2023