Boris llegó a una sala cuyo aspecto era escalosfriante debido a las monstruosas criaturas que allí se encontraban encerrdas en diversas jaulas hechas de cristal transparente de todo tipo de tamaños.
El tritón dorado detectó la presencia de Shura allí mismo, no estaba lejos. Con su corazón latiendo a mil por segundos nadó en esa dirección, hasta llegar al sitio donde estaba prisionero.
Shura se encontraba encadenado en una especie de superficie horizontal rodeado por un líquido rojo que lentamente iba acercandose a su cuerpo. Boris podía ver que todo lo que rozaba dicho líquido era desintegrado para ser transformado en algo monstruoso. Shura lloraba debido a la desesperación que sentía ya que le era imposible librarse de semejante situación.
Sus secuestradores reían como hienas salvajes mientras contemplaban aquello. Boris sintió un profundo odio hacia esas criaturas oscuras, esto encendió su fuego interior volviendolo más letal.
Sin darles tiempo a nada los hiscineró a todas las oscuras criaturas que allí se encontraban. Luego se centró en aquel liquido rojo, lo envolvió con su poder del fuego y poco a poco fue desintegrandolo hasta hacerlo desaparecer finalmente.
Shura miró a Boris con desesperación forcejeando para poder liberarse de las cadenas que lo ataban a esa superficie.
— Boris — susurró con intenso dolor.
El tritón dorado lo liberó tras romper las cadenas que lo aprisionaban e inmefiatamente lo abrazó con fuerza mientras le susurraba al oído:
— Perdoname por favor Shura, perdoname.
— Mi vida....solo sácame de aquí. Te lo suplico.
Pero Boris no se movía ni lo soltaba, ya que no soportaba la idea de volver a perderlo. Las lágrimas humedecieron su hermoso rostro.
— Por favor mi amor, perdoname.
— Sacame de aquí y viviré solo para tí mi vida.
Recién Boris se apartó de su amado pero sujetó su mano y ambos se dirigieron al portal que conducía al exterior. Sin embargo en el camino Boris fue utilizando su poder del fuego para ir despedazando todo a su paso. Estaba dispuesto a aniquilarlo todo sin excepción alguna.
Por supuesto que las criaturas oscuras empezaron a movilizarse buscando el origen de menudo desastre. Pero no dieron con el tritón dorado ya que Boris sabía mantenerse bien oculto junto a Shura, quien se aferraba a su amado con intenso temor.
Boris llegó al sitio donde había visto a ese tritón identico a él y optó por salvarlo sin saber muy bien por qué. Shura se asombró al ver el parecido de ambos. Parecian gemelos. Cuando el prisionero quedó libre Boris y Shura tuvieron que sujetarlo debido a su debilidad física junto a los intensos dolores que su cuerpo seguía padeciendo.
— Volviste por mí — le dijo el prisionero a Boris — Creí que no te importaba....
— Si que me importas, solo que tenía que hacer algo mucho más urgente.
— Ya veo — dijo el prisionero mirando a Shura — Tienes su corazón por lo visto. Cuídalo.
Sin aguardar un instante más siguieron escapando. Shura sujetaba al otro tritón dorado mientras Boris seguía incendiandolo todo a su paso.
Así llegaron al portal en cuestión. Al tiempo que los tres lo traspasaban sañiendo de ese sitio, toda la fortaleza oscura colapsaba volviendose ruinas y quienes se encontraban allí morían al instantes. Tanto las criaturas oscuras como sus prisioneros.
Al regresar a la dimensión que pertenecían, Boris empleó su poder para cerrar definitivamente ese portal imposibilitandoles atravesarlo de nuevo. Habia sitios que era mejor no explorar.