Los hermanos, todavía seguían en coma semanas después de que corrieron a los traidores del palacio de la corona-No quisiera separarme de ellos, pero este viaje es importante-dijo Suleiman cuando Rustem Pasha le dijo que su viaje a Amasya se acercaba
-Su majestad esto es una tradición de su padre, yo estaré aquí...-dijo mientras que ambos veían a la Sultana Hurrem en medio de sus hijos mayores. Entonces Mihrimah entro a la habitación y se acerco a los hombres
-Yo iré con usted padre.....-dijo ella mientras que los hombres la veían haciendo que Suleiman asiente y ordena que se prepare-Mi hija quedara a cargo de una criada y estará bien.....
Suleiman solamente suspiro-Ok, mañana partiremos.....
Al día siguiente Suleiman y Mihrimah partieron hacia Amasya en un largo viaje ya que se encontraba hacia la frontera del imperio. Mientras tanto Hurrem sultán se encontraba con sus hijos sin separarse de ellos desde que llegaron-Llamen, a Malkococoglu Bali Bey-dijo ella a uno de los guardias quienes asienten y se va hacia el balcón de la habitación del sultán.
-¿Me llamo, mi sultana?-dijo el mientras que se inclinaba hacia ella por respeto.
La mujer quien se encontraba viendo el imperio solamente suspiro-Quiero que te cases con mi hija...-dijo soltando derrepente la frase sorprendiéndolo
-¿Como?-dijo sin poder creerlo. ¿Soy digno de su hija?
Hurrem solamente pudo sonreír mientras veía a sus hijos dormidos en la cama del sultán-Si, la protegiste desde que era pequeña y cuando me secuestraron. Siempre fuiste digno de mi hija-dijo mientras que el hombre se sonrojaba todo lo que hacia era por amor a ella
-Si, mi sol me acepta seria un honor muy grande casarme con ella-dijo sonriente hacia la Sultana Hurrem que conociendo a su hija lo aceptaría
Semanas después, el sultán y Mihrimah pudieron llegar a Amasya fueron directamente al palacio donde los recibieron y mas Mustafá quien estaba feliz pero al ver las actitudes de su padre y hermana sabia que lo odiaban.
-SU ATENCIÓN, LA SULTANA MIHRIMAH ESTA AQUÍ-dijo la voz de un guardia al harem del príncipe Mustafá haciendo que todas las mujeres se parasen ante la presencia de una de las dos hijas del sultán Suleiman. Pero cuando iba pasando una mujer no se había parado haciendo que Mihrimah se detuviera-¿Como osas a no levantarte ante una Sultana de sangre?-dijo el guardia llamando la atención de la mujer.
-Soy la favorita de su alteza, el príncipe-dijo con una voz que ponía a prueba a la hermana de Mustafá quien solamente podía reírse
Mihrimah solamente pudo sonreír y ante presencia de la Sultana Mahidevran se acerco peligrosamente hacia la favorita de su hermano y la agarro por los cachetes con su mano-Yo soy la Sultana Mihrimah, soy hija de la sultana Hurrem Haseki del imperio y del Sultán Suleiman ¿Cómo osas hablarme de esa manera?.......
Mihrunissa solamente pudo temblar ante lo que había ocasionado-Perdone....Mi sultana
-No te atrevas a hablarme como si fuéramos iguales que no lo somos, tu ante mi solamente eres una criada y espero que comprendas la lección...-dijo mientras que la soltaba tan fuerte que la aventó al piso-¡AGAS!..-grito a los guardias de las mujeres quienes asiente ante su llamado-Denle 25 azotes en los pies que aprenda a respetar a una sultana de sangre
Mahidevran pudo ver que era hora de interrumpir-Mihrimah, no puedes venir a dar ordenes, no......
-Su majestad, el príncipe Mustafá ordeno que todo lo que la Sultana Mihrimah ordene se cumpla-dijeron los guardias quienes se llevaron a Mihrunissa que los miraba con temor e imploraba que no le hicieran nada