Mi corazón me lo grita en cada latido,
tenerte cerca marca su ritmo;
pídeme que te ame y así lo haré,
pídeme que te odie y me negaré;
si vas a lastimarme que así sea,
ya estoy harto de esta estúpida tristeza.
Dices que el amarte solo me hará sufrir,
desesperado me buscas y dices que no puedes estar sin mí;
dices que debo alejarme de ti,
entonces deberías empezar por dejar de mirarme así.
Abro mi mente y siento tu tacto en mi piel,
cierro los ojos y puedo beber el néctar de tu miel;
si está predicho el soltarte,
antes quiero aprender a amarte.
Esta noche secuestra mis sueños,
y olvida pedir rescate por ellos;
retenlos contigo por al menos una noche,
si después de ello tu postura es la misma,
me marcharé sin ningún reproche.
Desnuda mi alma y mi cuerpo y llévame al cielo,
que mi fuego y tu fuego maten el deseo;
que mi aliento y tu aliento se alimenten mutuamente,
y que nuestros cuerpos despierten una nueva faceta del amor lentamente.
Editado: 02.10.2022