Jamás lo había sentido tan fuerte,
la incertidumbre se crece,
cuando la duda no se responde.
El aire se siente distinto,
el silencio hoy es molesto.
Intento tomar al toro por los cuernos,
y no dejarme vencer en el ruedo.
Llamado “vida”,
y que a diario intenta recuperar lo que un día le pertenecía.
Si la vida es una simulación maestra,
y si decido girar a la derecha,
¿habrá estado ya previsto?,
¿o al siguiente movimiento me anticipo?
¿Por qué no puedo ser como los demás?,
¿por qué no solo camino y ya?,
¿por qué no dejo de cuestionar?,
a cuanta cosa mis ojos ven pasar.
¿Por qué existen cosas que no podemos ver?,
pero podemos sentir que están ahí,
observando nuestro vivir,
y el quién elegimos ser.
Sé cómo me llamo,
más no lo que significa en verdad;
aún no sé quién soy,
y esa es la triste realidad.
Siento que tengo una misión,
al igual que todos los demás,
¿pero por qué siento desorientación?,
al cada paso dar.
El avance no está siendo sencillo,
hay baches en todo el camino,
pero firmemente confío,
en que he de llegar a mi destino.
Editado: 02.10.2022