En cierto espacio marginado
Sin lluvia y sin abono,
Algo inimaginado
¡Una rosa es un tesoro!
Ante la adversidad ella crecía
Y sin muchas esperanzas, así vivía.
La flor del desierto demuestra,
¡Que la vida es muy siniestra!
Aun así nunca se acobardó,
No perdió jamás las ganas de existir,
Ella siempre olvidó,
Que su destino era morir.
Y cuando la muerte
Al fin la atrapaba
Ella no se atribulaba;
El momento soportaba
¡Pues sabía el mensaje que dejaba!
El tiempo en el que vivió floreció,
Y aunque al final feneció,
Lágrimas de miel en su tumba,
La pena del viento abunda.
''Adiós flor del incierto''
Moriste reluciente,
En aquel frío desierto
¡Me enseñaste a ser valiente!