Amor&ciencias: entre átomos y estrellas

Capítulo XIII

_“Vivo o muerto”

Félix Daurella:

EE.UU.New York:

«15 de julio»

Día siguiente del que Stella viajó a España.

_Buenos días Licenciado Daurella-habló mi secretaria y me dedicó una mirada coqueta con aquellos ojos verdes-

Cerró la puerta tras su espalda y se fue acercando lentamente, haciendo resonar sus tacones por la oficina.

_Buenos días-examiné su cuerpo con descaro cuando terminó de acercarse-

_El Licenciado Bannister me ha pedido que usted revise estos informes.

Expresó rodeando la mesa para comenzar a jugar con mi corbata mientras dejaba los papeles encima de la mesa.

_¿No crees que eso puede esperar un rato?-susurré asomando una pequeña sonrisa, agarrando su cintura-

Mi secretaria mordió levemente su labio inferior y tomó el atrevimiento de sentarse en mi regazo a horcajadas, con mis manos sostuve su cintura para comenzar a acariciar lentamente sus muslos.

_Por supuesto.

Susurró a centímetros de mi boca,sosteniendo con fuerza mi corbata y estampar sus labios contra los míos. Tantas horas de trabajo abrumaba cualquier mente, por eso era necesario tener una pequeña distracción. Mi anterior secretaria encima de lo torpe que era se rehúsaba a darme un poco de entretenimiento, por lo que tuve que despedirla.

Hacía unos días que esta joven había comenzado a trabajar conmigo y desde el primer momento ambos tuvimos las mismas intenciones,llegando al acuerdo de no involucrarnos sentimentalmente.

Mi teléfono comenzó a vibrar constantemente encima de la mesa, lo cual me distrajo de lo que estábamos haciendo. Maldición, tal vez era algo importante.

Hice un ademán por alcanzarlo, sin embargo ella me interrumpió poniendo mi mano nuevamente en su cintura.

_No te distraigas, no tenemos mucho tiempo-expresó deshaciendo los botones de su blusa-

_Te encanta jugar con tu jefe,¿verdad?-dejé una mano en su cintura y con la otra sostuve sus rubios cabellos para volver a besarla-

Las insistentes vibraciones pasaron al tercer plano aquel día,cuando volví al departamento revisé el teléfono pudiendo notar que las llamadas eran de Stella. No entendía su insistencia y decidí no darle importancia porque de seguro era para alguna de sus estupideces en el campamento.

Erick Jones:

España-Madrid.

Actualidad: «23 de Julio»

En la tarde de ese mismo día, Violeta envió los resultados de la biopsia a Stella. Resultaba ser que William tenía cáncer pulmonar con metástasis cardíaca que le provocó que el corazón no puediera bombear sangre de manera eficiente. La metástasis es la capacidad de los tumores malignos de propagarse a órganos distintos de aquel en el que se manifestó, en cambio, la metástasis cardíaca es una condición muy grave y compleja, es tan extraña que solo es capaz de descubirse a través de la biopsia.

_¿Irás a la incineración?-pregunté mientras ella veía el mensaje de Violeta-

_No, debemos regresar a New York. Yo no quiero presenciar ese acto-respondió con seguridad en sus palabras, pero con dolor en su mirada-

_De acuerdo, nos iremos en la noche.

El día transcurrió habitualmente hasta llegar la noche.Minutos antes de irnos Stella quiso despedirse de mi familia.

_Gracias por todo Emilia, fue un gusto conocerlas-expresó Stella dándole un abrazo-

_No te vayas hermano, quiero ir contigo-sollozó Amy abrazando mi cintura-

_No puedes, tienes que cuidar a tu madre y a la nonna-traté de hablarle sin sonar tan áspero-

_Bueno hijo, yo solo te diré que pretendo seguir viva hasta la boda-comentó la nonna, a la cual miré fulminante y está rió a carcajadas-

_¡Mamá!-Emilia le gritó, avergonzada-

_Dudo que algo como eso suceda-respondí-

Observé a Stella de reojo y esta se encontraba encogida de hombros, con sus mejillas tornadas de carmesí.

Luego de eso salimos de la casa, tomando un taxi en dirección al aeropuerto de Madrid donde ya había reservado los boletos del vuelo que salía en 20 minutos.Nueve horas después aterrizamos en el Aeropuerto de Estados Unidos donde Julián aguardaba por nosostros en mi auto.

_Espero y no hayas montado a ninguna ramera en mi Lamborghini-mencioné en cuanto me acerqué, chocando nuestras manos-

_Como crees, no soy ese tipo de hombre-fingió indignación,sentándose en el lado del copiloto-

Hice un ademán por cargar la maleta de Stella, cuando ella me detuvo, añadiendo:

_No es necesario, tomaré un taxi.

_¿Estás de broma? Si ya tienes un chofer personal-intervino el rubio desde la ventanilla-

_Venga, dame esa maleta-intenté agarrarla de nuevo y ella se negó-

_He dicho que no.

_Ha dicho que no-agregó Julián,indignado-

_He dicho que sí, ¿Acaso tienes miedo de qué tu novio te vea llegar en el carro de un extraño?-solté directamente, arrepentido de mis palabras ya que parecía celoso-

_No tengo miedo, mucho menos de un hombre y eso te incluye Erick Jones-habló con molestia, señalándome con su dedo índice-

_Oooh, eso Stella no te dejes de intimidar por este imbécil-volvió a intervenir el rubio desde la ventana, lo que me hizo mirarle fulminante-

_¿Podrías callarte? Evidentemente no estás ayudando-pronuncié, enojado-

Le arrebaté la maleta de las manos y la coloqué en el maletero para después abrir la puerta trasera y sentarla por la fuerza. Tomé mi lugar encendiendo un cigarro y comencé a conducir.

_Si no detienes el auto y me bajas entonces me voy a lanzar-me amenazó, mirándome por el espejo-

_Inténtalo-la desafié, aumentando la velocidad del auto y activando la seguridad de todas las puertas-

_¡A este paso nos vamos a morir todos!-gritó Julián, sosteniéndose del cinturón-

_¡Suficiente, no es necesario que hagas esto!-gritó Stella cerrando sus ojos-



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Editado: 03.10.2025

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